Fitness

Serviocio invierte 1,2 millones en renovar sus centros y ultima dos aperturas

M.M.A.

10 oct 2016 - 04:54

Serviocio ha arrancado con fuerza la nueva temporada. El grupo gallego, que se encuentra en pleno proceso de reconversión de algunos centros a la marca BeOne, ha invertido 1,2 millones de euros en la renovación de sus instalaciones durante el verano. A este importe se le suman los 1,5 millones destinados a la apertura de dos centros en Galicia, que abrirán este mismo mes.

 

La compañía que dirige Roberto Ramos explica que los fondos se han destinado a "mejoras y en la implantación de nuevos servicios y la tecnología más novedosa del sector". Entre otras cuestiones, se ha renovado la maquinaria de las salas de entrenamiento y se ha introducido un nuevo sistema de depuración de agua en sus piscinas.

 

Una de las instalaciones a la que se le han destinado más recursos (150.000 euros) es a la de Ribadeo, en Lugo, donde se ha construido una nueva sala de actividades. Además, se ha acelerado la implantación de la nueva marca, que hasta ahora sólo se había aplicado en Granada y en Madrid, donde se adquirió un antiguo club deportivo en la primera mitad de año. Ahora, ya está disponible en A Malata (Ferrol), Ourense, Ribadeo (Lugo), Cabezón (Cantabria), Cayón (Cantabria), Sopela (Vizcaya), Errentería (Guipúzcoa) y Llíria (Valencia).

 

Serviocio beONe 650
Uno de los primeros centros en los que se implantó la nueva marca fue en Madrid.

 

La compañía asegura que no se trata de una simple renovación, sino de un nuevo concepto en el que hay "una evolución en los protocolos de trabajo y en el servicio a los socios y socias hacia la innovación deportiva, la personalización del servicio y la tecnología". En este sentido, ya han lanzado su propia app con la que los usuarios pueden planificar su entrenamiento.

 

En paralelo, y como ya adelantó Palco23, BeOne contará con dos nuevos centros deportivos este mismo mes. Las ubicaciones escogidas son Ourense y Baiona, donde se invertirán 500.000 euros y un millón de euros, respectivamente. En el municipio pontevedrés, se ha adquirido un complejo de 12.000 metros cuadrados que estaba en manos de la banca, mientras que en la capital de provincia se ha alquilado un espacio de menores dimensiones en el centro.

 

La diversificación de la empresa ha ido a más en los últimos meses, con la organización de eventos de masas. Su primera iniciativa ha sido la Heroican Race, que se disputó el pasado 3 de septiembre en Ribadeo (Lugo) y contó con 900 participantes y 2.000 espectadores. En su apuesta por las pruebas de obstáculos, además, ha firmado un acuerdo de patrocinio con Lluís Barbé, un corredor catalán que lucirá durante su temporada de competición el logo de BeOne en sus equipaciones. Además impartirá sesiones de preparación y master class en los centros de la compañía.

 

No es la primera vez que la empresa colabora con deportistas, ya que también apoya al triatleta Iván Raña y a Pablo Lijó, jugador del World Padel Tour (WPT). "También tenemos como objetivo formar nuevos deportistas profesionales o aficionados", explica Ramos.

 

En la actualidad, son más de 120.00 usuarios los que acumula la empresa entre sus treinta centros (no incluye las dos aperturas), con una facturación superior a los 22,5 millones de euros. En Galicia tiene 12 instalaciones, por las cinco de Cantabria y tres en País Vasco. Además, dispone de seis gimnasios en la Comunidad de Madrid, dos en Andalucía, otro en Castilla y León y uno más en Comunidad Valenciana.

 

 

 

Presencia del capital riesgo en el accionariado

 

Serviocio es una de las empresas del sector del fitness que logró aprovechar el apetito del capital riesgo por un sector que, durante los años de bonanza económica, vio cómo la Administración se lanzaba a la construcción de gimnasios públicos. En su caso, fue Atlas Capital la que decidió adquirir una participación mayoritaria (se desconoce el porcentaje) de la compañía en 2009.

 

Entonces, la facturación se situaba en 16 millones de euros, con un crecimiento medio anual del 13% en los cuatro años previos a la compraventa. Y el fuerte incremento parece deberse sobre todo a una mayor rentabilidad de los centros, ya que por esas fechas ya rozaba la treintena. En cuanto a la plantilla, se ha pasado de 900 a 930 trabajadores.

 

Este crecimiento ha ido acompañado de la diversificación de la actividad. En 1993 sólo se dedicaba a la gestión de instalaciones municipales o del sector privado que necesitaban un gestor, pero en 2009 empezaron a explorar una opción que ya empezaba a demandar la Administración tres años antes: empresas dispuestas a asumir la construcción, lo que exigía mayor inversión inicial y propició la llegada de Atlas Capital, a cambio de una concesión de larga duración. Ahora, junto a estas dos opciones, Serviocio tendrá los centros propios.