Fitness
La recuperación pospandemia impulsa a VivaGym: recorta un 53,6% sus pérdidas en 2022
La cadena española de gimnasios cerró el ejercicio 2022 con pérdidas por 7,7 millones de euros. El recorte de sus números rojos se debe al incremento de la facturación, al pasar de 28,3 millones en 2021 a 43,3 millones en 2022.
31 ene 2024 - 05:00
Viva Gym se olvida del Covid-19. La cadena española de gimnasios cerró 2022 en plena fase de recuperación pospandemia, quedando atrás las restricciones y los cierres parciales y totales de los centros deportivos. En el ejercicio, Viva Gym redujo sus pérdidas un 53,6%, hasta 7,7 millones de euros, tal y como reflejan sus cuentas anuales.
Los estados financieros de Viva Gym subrayan que “desde el mes de marzo de 2020 y hasta diciembre 2022, la sociedad ha tenido que gestionar los efectos de la pandemia en la industria del fitness”.
“El efecto Covid-19, sin precedentes, ha tenido un gran impacto, pues se produjeron cierres de clubs durante 2020 y 2021 y han estado vigentes restricciones de todo tipo, impuestas al negocio, durante más de 24 meses y se prolongaron hasta abril de 2022, lo que ha obligado a la compañía a aplazar pagos a sus acreedores y proveedores de circulante, comenzando los repagos según lo previsto a partir del segundo semestre de 2022”, añaden.
Sin embargo, dos aspectos clave para la recuperación financiera de la compañía en 2022 fue la vuelta a la normalidad, con el consiguiente incremento en la actividad y el número de abonados, así como la reactivación del plan de expansión de Viva Gym en España.
Viva Gym cerró el ejercicio 2022 con 57 gimnasios operativos en la Península Ibérica
En 2022, la cadena inauguró tres nuevos gimnasios en el país: Viva Gym Londres (Barcelona), Viva Gym Coslada (Madrid) y Viva Gym Cuzco (Madrid), lo que aumentó su pool de centros hasta 57 gimnasios.
Ello se tradujo en un incremento del 53% en su volumen de negocio, pasando de 28,3 millones de euros en 2021 a 43,3 millones de euros en 2022. En paralelo, la cadena facturó 695.233 euros en concepto de Otros ingresos de explotación, sin dar detalle de su naturaleza y procedencia en las cuentas anuales. En el epígrafe Trabajos realizados por la empresa para su activo, la compañía registró casi 100.000 euros, un 10% más que en 2021.
Las dos principales fuentes de gasto de Viva Gym fueron, del mismo modo que en el ejercicio anterior, los gastos de personal y los de explotación. La cadena destinó 11,6 millones de euros al pago de salarios y contingencias sociales del total de trabajadores. En 2022, Viva Gym empleó a 606 personas.
Por su parte, imputó 26,5 millones de euros a servicios exteriores, a lo que se suman un millón de euros por reajustes de previsiones y 345.878 euros procedentes de tributos. Además, Viva Gym amortizó 7,7 millones de euros en 2022, un 6,1% menos que en el ejercicio anterior. Sólo por el fondo de comercio derivado de la adquisición de Duet Fit y de Gimnasios Islas Baleares, la cadena ha amortizado 5,5 millones en 2022.
De cara al ejercicio 2023, la enseña esperaba experimentar “un robusto crecimiento en ingresos y socios respecto al año anterior, recuperando las cifras previas a la pandemia, gracias a una campaña de enero y febrero con total eliminación de restricciones en nuestros gimnasios de horario y aforo”.
La cadena cerró el ejercicio 2022 con un fondo de maniobra negativo de 9,4 millones de euros
Pese a que no ha trascendido el nivel de facturación con el que Viva Gym concluyó el ejercicio 2023, el consejero delegado de la compañía, Juan del Río, explicó a Palco23 que “tenemos más gimnasios que antes del estallido del Covid-19; entramos con 97 gimnasios en pandemia y ahora tenemos casi veinte más”. La cadena, además, ha aumentado sus precios en el transcurso de los últimos años.
La cadena ha cerrado el ejercicio 2022 con un fondo de maniobra negativo de 9,4 millones de euros, al registrar 3,7 millones de euros de activo corriente frente a 13,1 millones de euros de pasivo corriente. Viva Gym atribuye esta falta de autonomía financiera a corto plazo a “la aparición del Covid-19 supuso el cierre de todos los centros deportivos explotados por la sociedad”.
Fundada en 2011, Viva Gym Group es uno de los principales operadores en el segmento de gimnasios de bajo coste y el dueño también de Fitness Hut en Portugal. El accionariado de la empresa lo componen la sociedad de capital de riesgo Bridges Ventures, con el 51%, el equipo directivo y otros accionistas minoritarios, con un 14%, mientras que el 35% restante está en manos de Vivagym Holdings, controlado por la familia Singh. Además, VivaGym Group adquirió en 2019 las sociedades Happy Gym y Duet Fit.