Inverse frena y registra en 2022 su menor facturación desde 2015, hasta 4,4 millones de euros

Inverse acusa la cuesta. La compañía española especializada en equipamiento para ciclismo y triatlón Inverse ha cerrado el ejercicio 2022 disminuyendo sus ingresos un 3,2% en comparativa anual, hasta 4,4 millones de euros, según CMD Sport.

Las exportaciones supusieron el 30% del total de los ingresos del ejercicio, con Francia como principal cliente, seguido de Suiza. En Latinoamérica, destacaron las ventas a México y Costa Rica.

Los registros del pasado curso suponen la menor facturación de la compañía desde 2015. Inverse disminuyó sus ingresos un 10% respeto a los alcanzados en 2018, que supusieron el récord de Inverse, elevándose hasta 4,9 millones de euros.

Para el presente ejercicio, la compañía continuará poniendo el foco en el ciclismo, categoría que representa el 60% de sus ingresos. Los otros deportes que trabaja la marca son triatlón, running, trail, esquí de fondo y natación, que aportan el 40% restante de la facturación. La compañía también pondrá el foco en el triatlón para aumentar sus ventas e intentar alcanzar los niveles prepandémicos.

Inverse nombró en marzo a Jordi Coronado como director comercial, con el objetivo de aumentar su presencia en las tiendas especializadas en ciclismo

Asimismo, Inverse ha aumentado su presencia en los sectores de trail running y carreras de obstáculos. En ese ámbito, la marca cuenta como embajador de producto con Albert Soley, un referente mundial para los deportistas de las carreras Spartan Race y obstáculos.

En marzo, la compañía nombró a Jordi Coronado como director comercial, con el objetivo de aumentar su presencia en las tiendas especializadas en ciclismo, con nuevas campañas de márketing que persiguen transmitir el cambio de imagen de la marca.

Fundada en 1969 de la mano de Joaquin Sabaté, Inverse empezó fabricando ropa de ciclismo. Poco después de su nacimiento, la compañía amplió su línea de producto con triatlón y running, y hace ocho años, volvió a incorporar una nueva categoría, esta vez el trail. Con sede en Mollet del Vallès (Barcelona), la empresa cuenta actualmente con dos naves industriales, en las que concentra toda su producción.

Inverse, que cuenta con una plantilla de cuarenta trabajadores, está controlada por los hermanos Sabaté. La compañía concentra todos sus procesos, incluido el logístico, en Mollet del Vallès, donde posee una nave de 2.000 metros cuadrados, además de un taller de confección y un departamento de I+D, entre otros. La empresa compra todos los tejidos con los que confecciona los artículos en Europa, principalmente en Italia, aunque también adquiere ciertos accesorios, como cremalleras, en Asia.