Puma eleva ingresos hasta junio, pero recorta un 16% su beneficio

Puma no termina de consolidar el sprint del primer trimestre. La compañía de equipamiento deportivo, pilotada desde finales del año pasado por Arne Freundt, ha cerrado el primer semestre con un aumento de las ventas del 10% y con un nuevo descenso del beneficio, tras desacelerar en el segundo trimestre lastrada por América.

La compañía alemana facturó 4.308,3 millones de euros en el periodo, finalizado el 30 de junio. El resultado neto se situó en 172 millones de euros, un 16,2% menos que en el mismo periodo del año anterior. La empresa ha reafirmado sus perspectivas para el ejercicio, que eran ya prudentes en lo que el grupo calificó de año de “transición”.  

Puma ya había anticipado que la rentabilidad seguiría bajo presión en el primer semestre debido al efecto divisa, las actividades promocionales y el precio de las materias primas, y subrayaba que el crecimiento era la prioridad a corto plazo. En la primera mitad del año, el margen bruto de Puma ha descendido en más de un punto respecto al año anterior, hasta el 45,7%.

Puma facturó más en Europa que en América por primera vez desde 2020

Las ventas, por su parte, han estado por encima de los analistas, aunque han desacelerado en el segundo trimestre, con un alza del 5,9%, frente al 14,4% anotado en el trimestre anterior.

Parte de esta desaceleración se debió al pinchazo de América, donde las ventas se contrajeron un 8,4% en el segundo trimestre (un 3,8% en el acumulado del año).  “La caída de las ventas en Norteamérica estuvo motivada por el entorno macroeconómico y la relativa dependencia de Puma de la distribución off price, que continuará siendo contenida a futuro”, justifica la compañía.

La caída de América contrastó con la buena evolución en Europa, Oriente Próximo y África, donde las ventas crecieron un 22,2% en el semestre, convirtiéndose en el mayor mercado de Puma por primera vez desde 2020 con unos ingresos de 1.730 millones de euros. Asia Pacífico también anotó un sólido crecimiento, del 19,8% en el semestre, gracias a la recuperación del mercado chino.

La empresa ha comenzado a normalizar sus niveles de stock

Otra nota positiva del semestre es la mejora de los niveles de inventario, tras más de un año y medio marcado por disrupciones en la cadena de suministro. La empresa elevó su stock un 8,1%, hasta 2.146 millones de euros, lo que lo devuelve a volúmenes normales.

A diferencia de otros grupos como Nike, Puma ha insistido en que sigue priorizando a sus socios multimarca, si bien ha continuado desarrollando su red de tiendas con aperturas en Bangkok, Pekín y México, así como el lanzamiento de un nuevo formato de tiendas en China adaptado a las necesidades locales.

En cuanto al tipos de producto, la zapatilla continúa siendo la reina de la compañía con 2.336,4 millones de euros en ventas en el semestre, un 10% más que en el mismo periodo del año anterior. Las ventas de ropa se estancaron en 1.300 millones de euros, del mismo modo que la venta de accesorios, que se ha mantenido en alrededor de 661 millones de euros.

Puma anticipa cerrar el presente ejercicio con un ebit de 590 millones de euros, un 8% menos que en 2022. Asimismo, la compañía manifiesta que “continúa esperando una mejora de la rentabilidad hacia finales del año, impulsada por una mejora secuencial del margen de beneficio bruto debido a la disminución de los costes de aprovisionamiento y los fletes”.

El grupo ha reafirmado sus previsiones tras los resultados semestrales

Durante el periodo, las activaciones deportivas han dado alegrías a la empresa: en Alemania, Borussia Dortmund fue subcampeón de la Bundesliga; el RC Lens y Olympique de Marsella fueron segundo y tercero de la Ligue 1, respectivamente, y en Holanda, el PSV Eindhoven volvió a ganar la Copa Knvb.

Fuera del fútbol, el embajador de la compañía Rickie Fowler consiguió su sexta victoria en el PGA Tour en el Rocket Mortgage Classic de Detroit, mientras que Patricia Isabel Schmidt se hizo con su primera victoria en el European Tour en el Belgian Ladies Open.

Asimismo, Puma ha firmado un acuerdo con la Fórmula 1 para convertirse en proveedor oficial de la competición y producir ropa, calzado y accesorios ligados al mundial automovilístico.