El Circuit comienza su ‘plan renove’: concurso de 5,9 millones para iniciar su modernización

El Circuit de Barcelona-Catalunya se engalana. El trazado catalán ha sacado a concurso la construcción de una pasarela polivalente por 5,9 millones de euros, según la plataforma de contratación del sector público del Ministerio de Hacienda. Hasta 4,9 millones de euros corresponderán a la base imponible, mientras que el resto, un millón de euros será Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA).

El proyecto incluye la construcción de una pasarela de 74,3 metros de longitud, que alojará espacios polivalentes que podrán albergar conferencias, presentaciones, exposiciones y distintos actos relacionados con el motor.

La nueva instalación estará formada por tres alturas: la primera planta constará de una zona principal de circulación, un primer espacio polivalente y aseos; el segundo piso dispondrá de un espacio abierto desde el cual habrá una vista a ambos lados hacia la pista, y en la tercera se ubicará terraza en el lado sur y una zona no transitable con placas fotovoltaicas.

Además de la pasarela en sí, se acondicionarán los espacios exteriores adyacentes a la misma que darán acceso a la zona; se reformarán los viales y se creará una sala auxiliar para almacenaje y mantenimiento.

El Circuit de Barcelona recibirá treinta millones de la Generalitat de Cataluña para modernizarse y adaptarse a las nuevas necesidades

El pliego detalla que el concurso se dividirá en cinco lotes, entre los que se encuentra la construcción de una estructura metálica, por 2,1 millones de euros; la paletería, por casi 600.000 euros, así como la fachada, por 957.671 euros, entre otras estructuras. El Circuit de Barcelona-Catalunya justifica su decisión de división del contrato en lotes porque permitirá garantizar una mejor calidad des del punto de vista técnico.

A esta remodelación de suma la reciente inauguración de placas fotovoltaicas en el trazado catalán, instaladas en la cubierta de la tribuna principal. El espacio cuenta con 1.239 paneles solares que ocupan 2.710 metros cuadrados y que generan un volumen de energía de 0,88 gigavatio-hora (GWh) anuales.

Estas reformas se enmarcan en el proyecto de la Generalitat de Cataluña, que, a finales de 2022, aprobó una inversión de alrededor de treinta millones de euros hasta 2024 para modernizar y adaptar el Circuit de Barcelona-Catalunya a las nuevas necesidades en el marco de un nuevo plan estratégico de la instalación.

El plan contempla la implementación de un sistema pionero de almacenamiento para garantizar la suficiencia energética del circuito y varias inversiones en cargadores eléctricos. También apuesta por la diversificación para generar nuevos ingresos.

La primera gran remodelación del Circuit llegó en 2022, cuando destinó seis millones para el ‘paddock’, mejorar la seguridad y varias instalaciones

A principios de 2022, el Circuit destinó seis millones de euros a su primera remodelación a fondo en los últimos treinta años, que afectó a la zona del paddock, a aspectos de seguridad de la pista y a varias instalaciones. Se instaló un nuevo podio ampliando la superficie para las celebraciones; se subieron los semáforos y se instaló una nueva valla de protección en el pit-lane homologada por la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), entre otras.

Estas reformas sólo son la punta del iceberg de las que se han realizado en el circuito desde su inauguración en 1991. La primera gran remodelación del trazado catalán no tardó en llegar: en 1994 se instaló una chicane con muros de neumáticos antes de la chicane de Nissan que, aún hoy en día, se mantiene en el trazado a final de recta.

El Circuit de Barcelona-Catalunya siguió remodelando su trazado. En 2004, la curva 10 (conocida como la curva de La Caixa) se cambió a un largo giro de izquierdas debido a las altas velocidades que ya alcanzaban los monoplazas.

El Circuit y las chicanes van de la mano. Por eso, y por la queja de varios pilotos ante la dificultad de adelantar, en 2007, se instaló la chicane del Racc, reduciendo la velocidad del último sector y añadiendo un nuevo punto de overtake para los pilotos de Fórmula 1 y MotoGP.

2022, el año en el que el Circuit se olvidó el Covid-19

El Circuit de Barcelona-Catalunya cerró el ejercicio 2022 multiplicando casi por cinco sus ingresos, elevándose hasta 30,1 millones de euros, según sus estados financieros reflejados en las cuentas generales elaboradas por la Intervención General de la Generalitat de Catalunya. En 2021, el circuito ingresó 7,8 millones de euros.

Del total de la facturación, 20,7 millones de euros correspondieron a la celebración de carreras, cinco millones de euros a hospitality y concesiones, y el resto, 4,3 millones de euros, a alquiler de la pista y tandas de pilotos privados.

Pese al aumento de los ingresos, el circuito cerró 2022 con 2,5 millones de euros de pérdidas, ante los 2,2 millones de euros negativos del ejercicio anterior. El fondo de maniobra también se mantuvo por debajo de cero, de hecho, las cuentas anuales remarcan que “el fondo de maniobra a la fecha de cierre de los ejercicios 2022 y 2021 es negativo por importe de 15,8 millones de euros y 14,9 millones de euros, respectivamente”.

El trazado catalán recuperó los niveles prepandemia de asistencia a la Fórmula 1 y a MotoGP. La carrera de monoplazas congregó a 121.667 aficionados, mientras que al Gran Premio de MotoGP asistieron 114.574 personas, alrededor de cuatro veces más que en 2021, aún con restricciones por el Covid-19.