Entorno

2023: el año en que las mujeres alzaron la voz

2023, el año en que las mujeres alzaron la voz

Del “estamos contigo” al “se acabó”: la marea que se convirtió en un tsunami que acabó con elúltimo presidente ‘old school’ de la Real Federación Española de Fútbol.                                                       

2023, el año en que las mujeres alzaron la voz
2023, el año en que las mujeres alzaron la voz
Este cambio no viene sólo precedido por la lucha de Megan Rapinoe, Alexia Putellas o Aitana Bonmatí; los cimientos se comenzaron a construir en el siglo XX.

Palco23

21 dic 2023 - 05:00

El ejercicio 2023 será recordado por el posicionamiento del deporte femenino en el mapa: y no es que antes no lo estuviera, sino que ahora brilla con luz propia. Lleno de simbología y trascendencia, está empezando a tener su propio camino: independiente, sólido y referente.

 

Este cambio no viene sólo precedido por la lucha de Megan Rapinoe, Alexia Putellas o Aitana Bonmatí. Los cimientos se comenzaron a construir en el siglo XX. La corredora Kathrine Switzer, que fue la primera mujer en correr un maratón en 1967, cuando estaba prohibido para ellas; la tenista Billie Jean King, que en 1973 amenazó con boicotear el US Open si el prize money entre hombres y mujeres no se equiparaba; la esgrimista Ibtihaj Muhammad, que fue la primera atleta estadounidense en usar un hiyab en unos Juegos Olímpicos, o la atleta Nawal El Moutawakel, la primera mujer de un país islámico en ganar una medalla olímpica. Todas ellas son sólo algunos de los referentes femeninos que han trazado el camino para llegar al punto en el que deporte y sociedad se encuentran hoy en día.

 

 

 

 

Ese camino es el que las jugadoras de la Selección Española de Fútbol se han encargado de fortalecer a fuerza de alzar la voz y no achantarse ante organismos poderosos. El fútbol es pasión, mueve sentimientos y aficiones, pero tiene un lado oscuro protagonizado por el racismo en los estadios, la homofobia y los estilos de gestión de ciertos mandatarios y entidades que se caracterizan por la falta de transparencia. El fútbol en Occidente ha escapado de la imagen de violencia, pero hay otros rinocerontes grises que pueden convertirse en un problema serio en una sociedad que avanza.

 

Existen ciertos paralelismos en el fútbol: el masculino va de la mano de millonarios que blanquean a dictadores árabes, mientras que el femenino va de la mano del heroísmo, de familias que asisten a los estadios a disfrutar de un partido y no a expulsar su ira.

 

Ahora tiene en sus manos el poder de cambiar y avanzar de la mano de la sociedad hacia la Enviromental Social Governance (ESG) o, lo que es lo mismo, la sostenibilidad, la buena gobernanza y recuperar los valores del deporte que han quedado olvidados enla memoria. Incluso cambiar a su público en las gradas, dando de nuevo la bienvenida a familias y decir adiós al hooliganismo.

 

La explosión más reciente llegó en la pasada final del Mundial Femenino de Fútbol, celebrada el 20 de agosto de 2023 en el Sydney Football Stadium (Australia). La Selección Española de Fútbol se alzó con el título de Campeonas del Mundo, pero el mérito deportivo quedó empañado por unos hechos que trascendieron al terreno de juego. El hasta entonces presidente de la Real Federación Española de Fútbol (Rfef), Luís Rubiales, gobernaba en el organismo rector del fútbol español con mano de hierro desde 2018. Sus gestos obscenos en el palco, tocándose los genitales, o su beso no consentido a la futbolista Jennifer Hermoso fueron la gota que colmó el vaso para las jugadoras del combinado nacional español.

 

 

 

 

 

En ese momento dijeron basta y alzaron la voz: las jugadoras eran ya una roca indestructible, todas a una, y se plantaron. Rubiales montó un show, un teatro maquillado de asamblea en la que se intentó defender de lo indefendible, explicando lo sucedido y

pasando el balón a Hermoso, al decir que “ella fue la que me subió en brazos y me acercó a su cuerpo; y yo le dije: ¿un piquito? y ella me dijo, vale”.

 

Ante el esperpento de Rubiales y las vergonzosas muestras de apoyo de sus fieles seguidores, como el seleccionador femenino, Jorge Vilda, y el masculino, Luis de la Fuente, las jugadoras iniciaron una marea que acabaría con varias cabezas rodando. Las redes sociales se llenaron de mensajes en apoyo a Hermoso: “Esto es inaceptable; se acabó; contigo compañera”, sentenció Alexia Putellas; “todo el mundo vio lo que pasó; la víctima eres tú; estoy contigo amiga”, manifestó Irene Paredes; “hay límites que no se pueden cruzar y esto no lo podemos tolerar; estamos contigo compañera”, twitteó Aitana Bonmatí.

 

No sólo eso, sino que de forma conjunta emitieron un comunicado manifestando que “las jugadoras de la Selección Nacional Absoluta, recientes campeonas del mundo, así como sus compañeras, desean manifestar tal y como lo hicieron el 25 de agosto de 2023, su enorme descontento tras los hechos acontecidos en la entrega de medallas en la Copa Mundial femenina y la posterior asamblea extraordinaria de la Real Federación Española de Fútbol”.

 

Además, exigieron varias medidas entre las que se encontraba la reestructuración de varios organismos internos de la federación, como el organigrama de fútbol femenino, el gabinete de la presidencia y secretaría general, el área de comunicación y márketing y la dirección de integridad.

 

Algo que no pasó con sus colegas de la Selección masculina. “Puedo entender que, si Jenni (Hermoso) está pasando un mal momento, hay que solidarizarse con ella, está claro, aunque tampoco creo que el presidente (Rubiales) esté viviendo momentos agradables”, manifestó el jugador del Real Madrid CF, Daniel Carvajal. Luis Enrique, exentrenador de Celta de Vigo y FC Barcelona, actualmente en el banquillo de París Saint-Germain, tampoco denunció los actos de Rubiales, simplemente se limitó a apuntar que “la labor de Luis Rubiales a lo largo de estos años ha sido excepcional; el presidente ha admitido su error”. Aunque lo más destacable no fue que unos pocos futbolistas expresaran su opinión, sino que hubo un silencio generalizado por parte de la gran mayoría de ellos. Con excepciones como las de Borja Iglesias, que renunció a la Selección “hasta que las cosas cambien y este tipo de actos no queden impunes”.

 

 

2023 especial mujeres hermoso

 

 

Para el 15 de septiembre de 2023 la marea ya era un tsunami y la cancelación a Rubiales era total. Se había convertido en una cuestión de Estado, trascendiendo más allá del fútbol y forzando al Gobierno a entrar en el asunto. Desde el primer momento, el Consejo Superior de Deportes (CSD) se posicionó del lado de Hermoso y envió al Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAD) la información requerida para expedientar al directivo, considerando que la falta era “muy grave”.

 

Todo ello llevó a que el entonces presidente, que ya había sido suspendido por la Rfef, anunciase su dimisión tras dos semanas resistiéndose a ello. Preguntado por el periodista británico Pierce Morgan sobre una posible dimisión, respondió “sí, voy a hacerlo”.

 

Y ese fue el inicio del mayor cambio estructural en el fútbol femenino español. Las jugadoras siguieron presionando, Rubiales no era suficiente, e insistieron en su “voluntad de no ser convocadas” para disputar el encuentro ante Suecia con el equipo nacional. Tras su presión, la Rfef las escuchó e inició un conjunto de despidos sin precedentes. El secretario general, Andreu Camps; el director de integridad, Miguel García Caba; el seleccionador, Jorge Vilda, y el director de comunicación, Pablo García Cuervo, son las personas que, a diciembre de 2023, han sido despedidas. Aún así, la lista podría aumentar, y es que las jugadoras insisten en la destitución de la nueva seleccionadora del combinado nacional, Montse Tomé.

 

 

 

 

Tras semanas de calma tensa, las jugadoras y la Rfef acercaron posturas con la mediación del CSD y crearon una comisión mixta para el impulso del fútbol femenino, uno de los puntos de los acuerdos adoptados ya en septiembre.

 

Más allá de la pista, la situación trasciende al deporte en sí e impacta en el negocio como tal. Más que anecdótico fue el posicionamiento (prácticamente obligado) de los patrocinadores de la Rfef tras el estallido del caso Rubiales. Iberdrola, Renfe e Iberia salieron al paso para posicionarse claramente en contra de lo sucedido con el entonces presidente de la Rfef.

 

Iberdrola, como principal patrocinador la selección femenina de fútbol, emitió un comunicado en el que consideró que cualquier actitud que “se desvíe o vaya en contra” de la defensa de la igualdad de derechos y la dignidad de las mujeres “no tiene cabida en el mundo del deporte ni en la sociedad”.

 

Por su parte, Iberia fue el primer sponsor en manifestarse, pidiendo “medidas para preservar la dignidad” de las futbolistas; cuando se producen situaciones ofensivas, impropias de una sociedad desarrollada, moderna e igualitaria como la española, Iberia apoya las medidas oportunas y pertinentes que haya que tomar para preservar los derechos y la dignidad de las y los deportistas”. Renfe fue menos categórica, aunque expresó que “respalda y apoya de manera rotunda y contundente la actuación del organismo presidido por Víctor Francos (CSD)”. Ahora, el fútbol tiene la oportunidad de cambiar.