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‘Play for the Planet’: la fórmula del Barcelona Open Banc Sabadell para abrazar la sostenibilidad

“A través del lema, Play for the planet difundiremos todas las acciones para interactuar con 110.000 personas gracias a la sostenibilidad”, afirma Pablo Acevedo, líder del proyecto de sostenibilidad que lleva a cabo el torneo ATP500.

Matere García

24 feb 2020 - 04:57

 ‘Play for the Planet’: la fórmula del Barcelona Open Banc Sabadell para abrazar la sostenibilidad

 

 

El histórico Trofeo Conde de Godó se reafirma como torneo sostenible, en plena lucha de los torneos ATP por buscar elementos de diferenciación. El Barcelona Open Banc Sabadell volverá a ser un torneo marcado en rojo en el calendario, y no sólo por lo que ocurre en las pistas. Por tercer año consecutivo, la cita que alberga el Real Club Tenis Barcelona (Rctb) implantará una serie de medidas de sostenibilidad, una apuesta que forma parte del plan estratégico del club.

 

Al frente del proyecto está Pablo Acevedo, que, junto a Daniel Peral, auditor ingeniero, quiere seguir posicionando al Godó como torneo de referencia dentro del circuito ATP por el compromiso medioambiental. “Es de los pocos torneos de todo el circuito donde se transforma un club social y familiar en un torneo”, recuerda Acevedo, sobre la complejidad añadida para la operativa de la cita.

 

Aunque organizar el campeonato requiere todo un proceso más largo, a diferencia de otros como Wimbledon, que ya tienen sus instalaciones preparadas, “tenemos la suerte de trabajar en un club donde la junta directiva y los socios son muy conscientes y responsables en materia de sostenibilidad”, añade Acevedo.

 

 

 

 

El plan de sostenibilidad implantado desde 2018 ha provocado que sea el único torneo del circuito ATP, junto con Roland Garros, en conseguir el certificado ISO 20121 de gestión de eventos sostenibles. ¿Cómo lo consiguieron? Tomando como referencia un torneo Grand Slam y mejorando aquello que hacen. “Fuimos a Francia, ya que hoy en día es el país, junto a Escandinavia, que más acciones y transformaciones en sostenibilidad hace”, afirma el directivo.

 

Dentro del Rctb y de la organización del torneo una de las verticales es la sostenibilidad, y todas las acciones que llevarán a cabo se sustentan sobre un plan estratégico, que está asesorado por tres expertos y socios del club: José María Baldasano, Albert Bosch e Ignasi Cubiñà, expertos en materia medioambiental, deportiva y comunicativa, materiales y economía circular, respectivamente, basan el proyecto en estos tres pilares de los 17 Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS).

 

Para ello, la organización ha planificado once acciones distintas que se irán ejecutando en el tiempo. Como novedad, en la próxima edición se reciclarán todas las acreditaciones en mal estado o no utilizadas, pondrán luces LED en todas las pistas y contarán por primera vez con una flota de coches Peugeot eléctricos e híbridos. Es un ejemplo de cómo los patrocinadores se involucran en el desafío medioambiental. También ha decidido declarar el evento sin humo de tabaco, siendo el primer torneo que lleve a cabo esta medida.

 

 

 

 

Asimismo, quieren reducir la huella de carbono, parámetro que registra el volumen de dióxido de carbono  que genera el torneo en la ciudad. El transporte hasta el club es el que, hoy en día, genera más impacto por lo que se fomentará el uso del transporte público. Prueba de ello es que en torno a un 80% de asistentes de 2019 llegaron al torneo en bus, taxi o metro. Por otro lado, han creado un proyecto de eficiencia energética basado en “establecer una serie de controladores para saber en qué punto estamos, y así ir reduciendo la huella de carbono”, declara Pablo Acevedo.

 

Uno de los problemas que el directivo contempla es que “ser sostenible cuesta dinero, hacer todas estas acciones cuesta dinero y las empresas no tienen un presupuesto económico destinado a la sostenibilidad”. Además, denuncia que el Estado “no te recompensa ni te pone facilidades para ser sostenible, por lo que no es fácil serlo; no alcanza sólo con ser consciente de ello, también debes tener mucho dinero”, reconoce Pablo.

 

Este año, además, se creará un canal de comunicación para que los socios se involucren y propongan ideas de cambio. De esta forma, el torneo no sólo quiere reafirmarse como sostenible, sino que, a través de la comunicación, también busca generar una reacción dentro de su ecosistema. “Ni mucho menos estamos ni realizados ni satisfechos con esta situación y no podemos decir que somos 100% sostenibles, no hay nadie que lo sea”, admite Acevedo. Sin embargo, “queremos apuntar a una economía circular, estamos en el comienzo de una gran transformación y a partir de micromedidas podemos llegar al mundo”, concluye el ejecutivo.