J. Viladot (Gestiona): “El fitness catalán puede perder el 20% de sus socios por la sequía”

Sequía, proyecto social y presión fiscal. Estos son los tres pilares que Josep Viladot, presidente de la Asociación de Gestores de Instalaciones Deportivas Públicas de Catalunya (Gestiona), considera que marcarán el fitness catalán en el corto plazo. Para Viladot, la Generalitat de Catalunya debe reconsiderar las medidas aprobadas para paliar la sequía, ya que “podría traducirse en una pérdida del 20% de los socios” y sentencia que “cerrar duchas no es la solución”. Además, defiende y explica el Modelo Barcelona, que “debe preservar la cooperación público-privada, teniendo en cuenta, además de la solvencia técnica y financiera, el beneficio social de los centros municipales deportivos”. Por último, considera que la presión fiscal del fitness debe ir acorde con el beneficio social, por lo que se debería reducir el IVA y el Irpf.

Pregunta: ¿Qué proyectos pondrá en marcha Gestiona de cara al presente curso?

Respuesta: El objetivo como Asociación pasa por crecer: en Barcelona queremos aglutinar al 100% de las instalaciones municipales. Actualmente estamos en el 90%. Fuera de la capital catalana, nos gustaría llegar a incorporar el 50% de los centros municipales de Cataluña, frente al 25% actual. Por otro lado, apostaremos por continuar con la potenciación de los servicios que ya prestamos a nuestros asociados. Hemos puesto en marcha dos plataformas: Sapiens y Mercatus. La primera servirá para compartir información y conocimiento entre todas las personas que forman parte de la Asociación; la segunda es un espacio comercial en el que queremos aglutinar la mayoría de los proveedores que nos sirven actualmente para que se puedan dar referencias.

P.: ¿De qué se trata el Modelo Barcelona que defiende la asociación?

R.: Este modelo debe preservar la cooperación público-privada y, al mismo tiempo, ser heterogéneo, porque la realidad es que hay muchas naturalezas distintas entre las empresas y entidades que gestionan instalaciones municipales, y homogéneo en cuanto a un proyecto social que rodea la instalación municipal. Para poder preservar el modelo y, al mismo tiempo, actualizarlo, nuestra propuesta pasa por revisar la definición de los pliegues de condiciones para las licitaciones. Hasta ahora, las instituciones sólo valoran la solvencia técnica y la financiera y se debería aplicar un nuevo eje de valoración que pasa por el proyecto social que desarrolla esa instalación municipal en la zona de captación.

“Las instituciones, además de valorar la solvencia técnica y financiera, deberían tener en cuenta el proyecto social de las instalaciones municipales”

P.: ¿Tienen suficiente impacto social los centros deportivos en Cataluña?

R.: Todos los centros deportivos tienen un impacto altísimo en la sociedad. Centrados en las instalaciones deportivas municipales, además, el proyecto social pasa por acoger escuelas de iniciación deportiva, programas para tercera edad y campamentos de verano, entre otras actividades beneficiosas para el conjunto de la masa social. Por ello, el sector debería estar mucho más reconocido de lo que actualmente lo está.

P.: ¿Cómo va a afectar el nuevo Salario Mínimo Interprofesional al sector?

R.: Va a tener un impacto muy importante. La subida salarial obligará a buscar posibles soluciones alternativas. Estas pasan por mejorar la eficiencia en los suministros, digitalizar procesos, centrales de compra o buscar un trato fiscal ventajoso, entre otras. Dentro de las estrategias de pricing se podría plantear una subida generalizada de precios. El valor que aporta el sector no se refleja con el precio final que paga el ciudadano. El sector no puede funcionar sin profesionales cualificados y satisfechas.

P.: Con la pandemia, el incremento de gasto de los suministros y el aumento de los tipos de interés, ¿la sequía hace que ya estemos ante el quinto año de crisis?

R.: Todavía es pronto para catalogar el 2024 como de crisis, pero está a la vuelta de la esquina. Si no se rectifican las medidas del cierre de duchas, nos podemos encontrar ante la nueva crisis.

“La actividad deportiva debe tener un trato fiscal acorde a su beneficio social”

P.: ¿Cuáles son las demandas de Gestiona al sector y a los organismos públicos de cara a este año?

R.: Ante la llegada de esta posible nueva crisis, pedimos diálogo y trabajo conjunto. A ello se suma la coherencia con la decisión de otorgar reconocimiento de bien esencial a la actividad deportiva. Esta coherencia debe pasar por destinar un mayor presupuesto al sector deportivo y tener un trato fiscal acorde con el beneficio social, no sólo afecta al Impuesto del Valor Añadido (IVA), sino también al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (Irpf).

P.: ¿Cómo valora Gestiona las propuestas del Govern ante la sequía?

R.: La aplicación de las primeras propuestas que se hicieron entre diciembre y enero será ineficaz para el objetivo que persiguen, además de ser discriminatorias y conflictivas. Se ha creado una mesa de trabajo entre el sector y la Generalitat de Catalunya para intentar mejorar el Decreto que se publicó. Se debe hacer frente a la sequía con un trato más eficiente del agua sin frenar la actividad económica de ningún sector. Se debe hablar con las Administraciones para definir un nuevo programa de inversiones y de ayudas para poder tomar medidas a medio plazo. Las aplicadas a corto plazo no requieren inversión, pero el problema de la sequia ha llegado para quedarse.

P.: ¿Cómo están afectando las restricciones aprobadas por el Govern de Cataluña, consecuencia de la sequía, al sector del fitness?

R.: Las instalaciones municipales tendrán bajas de abonados y frenarán las nuevas admisiones. Las personas tienen la necesidad de cuidar su salud mental y física y se trasladarán a un club sin piscina. La propuesta de cerrar duchas no es una solución y al mismo tiempo es absurda. Los usuarios se ducharán, aunque sea en otro lugar. Si lo hacen en su propia casa, el consumo de agua será superior al del club, porque el caudal es superior y porque la duración también lo es. Además, es una medida discriminatoria, porque solo afecta a los centros con piscina.

P.: ¿Tendrán un impacto directo en el número de bajas de socios en el corto plazo?

R.: La sequía es un problema que ha llegado para quedarse y todos los sectores debemos trabajar para reducir el consumo del agua. Cerrar duchas no es la solución. Se debería marcar una métrica de consumo de agua y cada sector desarrollar sus acciones más oportunas para conseguir el objetivo. El escenario más optimista es que perderemos un 10% de los abonados, aunque creemos que realmente perderemos un 20% de los socios. Nuevamente tendremos un desastre en el sector.