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Osasuna dispara su deuda en el primer semestre por la plantilla y la ampliación de El Sadar

El equipo rojillo presenta los resultados financieros intermedios de la temporada en curso, habiendo obtenido unos ingresos de 27,91 millones de euros.

Palco23

3 may 2021 - 19:01

Osasuna dispara su deuda en el primer semestre por la plantilla y la ampliación de El Sadar

 

CA Osasuna cierra la primera parte de la temporada con un incremento de deuda. El club de LaLiga publica los resultados financieros intermedios de la temporada 2019-2020, en la que la deuda con entidades de crédito ha crecido un 48% hasta 23,65 millones de euros, fruto de la inversión en plantilla y los trabajos de mejora en el estadio de El Sadar.

 

De ellos, 15,5 millones corresponden a deuda a largo plazo y 8,13 millones a corto plazo. La deuda neta, por su parte, se situó en 43 millones de euros al cierre del periodo, lo que supone un incremento del 38,7%.

 

El conjunto rojillo destaca “el esfuerzo realizado en la confección de la plantilla deportiva” para “conseguir la permanencia en el primer equipo”, un objetivo prácticamente asegurado ya que a falta de cuatro jornadas ocupa la undécima plaza con diez puntos de ventaja sobre las posiciones de descenso.

 

 

Al mismo tiempo, “las obras de ampliación del estadio y la necesidad de endeudarse para llevar a cabo esta obra” hacen que, a 31 de diciembre de 2020, el fondo de maniobra sea negativo en 26,33 millones de euros (por 22,09 millones a finales de la 2019-2020), mientras que la deuda neta asciende a 43,29 millones de euros (31,02 millones seis meses antes).

En cualquier caso, el club asegura que “esta situación se irá corrigiendo en la temporada 2020-2021 y siguientes, en la medida en que se vaya amortizando el préstamo del estadio y la tesorería se normalice”. El club está elaborando un dossier para que los socios conozcan las actuaciones “en la reforma del estadio, su coste y su forma de pago”.

 

La empresa cuenta con diez préstamos con entidades de crédito, tras amortizar el leasing de la máquina pinchadora y firmar tres nuevos préstamos en el último semestre con Santander y Banco Caja Rural, de tres millones cada uno, y un crédito con La Caixa por 1,5 millones.

La empresa tiene también deuda con Caja Rural de Navarra, que pasó de 829.481 euros en junio de 2020 a 5,53 millones de euros a finales de diciembre (de los que están pendientes de amortizar 4,25 millones). Una situación similar a un crédito del Banco Santander y otro del Banco Sabadell, que aumentaron de 691.234 euros a 4,61 millones euros en ese periodo. Estos tres préstamos están avalados por el Gobierno de Navarra. 

 

 

Esta temporada, el club debe hacer frente al pago de tres millones de euros del préstamo del estadio, y si certifica la permanencia serán otros tres millones en la temporada 2021-2022. A lo que hay que sumar que “las cantidades pendientes de pago por las reformas solicitadas en el estadio al margen del proyecto inicial se verán satisfechas en su mayor parte a lo largo de 2021 y primeros meses de 2022, reduciendo también el endeudamiento”. A partir de ahí, la evolución de la deuda “dependerá principalmente del regreso del público a los estadios y también de la evolución del mercado de los derechos de televisión”, sostiene el club, con una previsión de una mejora “leve” de los ingresos audiovisuales en la 2021-2022 a la espera de la firma del futuro contrato de los derechos audiovisuales de la competición.

 

El club calcula que ha dejado de ingresar más de 10 millones de euros en las dos últimas temporadas por el coronavirus, “algo que evidentemente tiene su impacto en la deuda y en la tesorería”, detalla en un comunicado. A 31 de diciembre, la empresa tenía efectivo y otros activos equivalentes por valor de un millón de euros, la mitad que seis meses antes.

 

Osasuna cerró diciembre con unos ingresos de 27,91 millones de euros, cifra similar a la temporada pasada pese al coronavirus, y unos beneficios de 2,1 millones de euros, manteniendo la línea del presupuesto presentado a la asamblea general ordinaria. Los beneficios disminuirán en el segundo semestre, con la previsión de cerrar el ejercicio con unos números negros de 300.000 euros. El patrimonio neto del club se situó en 23,7 millones de euros.

 

 

Los ingresos de patrocinio han crecido un 40%, hasta 3,5 millones de euros, que “permite compensar la pérdida de ingresos en otros capítulos”. A esta partida se suman 584.898 euros por socios, en una temporada en la que el club dejará de percibir cerca de tres millones de euros por este concepto y un millón de euros por taquilla, al no poder abrir el estadio al público. Además, ha ingresado 23,6 millones por los derechos de televisión, de los que esta temporada cobrará el 95% debido al impacto de la pandemia sobre el sector de la hostelería, lo que supondrá cerca de 2,5 millones de euros menos para el club.

 

Además, el club se ha asegurado unos ingresos excepcionales de 4,96 millones de euros fruto del traspaso de Luis Perea al CD Leganés (tres millones), más otras operaciones vinculadas a Álex Berenguer, Pervis Estupiñán y Oihan Sancet. Finalmente, los gastos de personal se mantienen estables, representando 17,93 millones de euros, por 35,86 millones de euros durante la temporada 2019-2020.