Fitness

Los gimnasios de Carlos Sainz y su hermano abren nueva etapa para facturar 16 millones en 2019

Reebok Sports Club ha integrado sus dos clubes bajo una única sociedad, después de que el piloto y su hermano Antonio hayan comprado el 50% del capital a Bruno Entrecanales. La compañía, que acumula inversiones por 45 millones, trabaja para especializarse en la prevención y la mejora de la salud.

Patricia López

4 jun 2019 - 05:00

 Los gimnasios La Finca y Reebok Sports Club se fusionan por pérdidas

 

Han pasado casi dos décadas desde que el piloto Carlos Sainz y su hermano debutaran en el sector del fitness, el tiempo necesario para posicionar el Reebok Sports Club como uno de los centros deportivos más exclusivos del país. Ahora, quieren dar un paso más en esta andadura, lo que les ha llevado a acercarse a sectores vinculados a la salud sin dejar de lado las nuevas tendencias de la industria de los gimnasios. Una nueva etapa en la que ambos se han hecho con el control del 100% del proyecto.

 

“Queremos a usuarios jóvenes, pero también nos interesa dar servicios a los abonados de la tercera edad”, explica a Palco23 Antonio Sainz, consejero delegado de una cadena que opera una instalación en el centro de Madrid y otra en Pozuelo. Ese público que describe Sainz genera una dicotomía que ha empujado a la cadena a reposicionarse y volver a invertir en sus clubes. De hecho, hace más de un año completó una inversión de un millón de euros en el club que opera en calle Serrano, el primero que inauguró en el año 2000.

 

Allí se ha abierto una nueva línea de negocio, el centro de salud y prevención Healthing, y tres estudios boutique de boxeo (Reebox), Hiit (Reeshape) y yoga. El directivo admite que, por falta de espacio, no es un modelo replicable en el club social de La Finca, que empezó a operar en 2004. Con todo, en esta instalación se ha habilitado un espacio parecido al Reebox para ofrecer entrenamiento especializado en boxeo y Hiit. “Los clientes cada vez quieren un tipo de entrenamiento más eficaz y en menos tiempo; la demanda se ha sofisticado”, argumenta Antonio Sainz.

 

 

 

 

En sus casi veinte años de historia, la compañía ha invertido aproximadamente 45 millones de euros en construir, equipar y actualizar sus dos instalaciones, que operan en régimen de alquiler con contratos de larga duración. “Lo hemos financiado todo con recursos propios y deuda bancaria; no tenemos interés en abrir el capital a terceros”, apunta Sainz, que, junto a su hermano, compró a Bruno Entrecanales su parte de la empresa. Esta operación se firmó el pasado diciembre, y permitió fusionar las dos sociedades en una sola, ASL Fitness.

 

Cada complejo cuenta con 3.000 socios, una cifra que ha crecido en los últimos dos años. “La subida del IVA nos afectó porque repercutió en el abonado y perdimos clientes; aún no hemos llegado a niveles de socios previos al aumento del impuesto, pero siempre hemos estado en ebitda positivo”, apunta. Parte del crecimiento tras la crisis económica ha venido por la vía de la diversificación, en la que ha tenido y tendrá un impacto vital Healthing.

 

“Es un negocio dentro del negocio; un modelo replicable en establecimientos independientes porque no supone inversiones tan elevadas como abrir un club”, defiende. La idea es que la cadena crezca con más centros de salud donde se dé servicio de bienestar, fisioterapia, osteopatía, medicina deportiva y nutrición. “Si encontramos la oportunidad, abriremos más centros independientes”, afirma.

 

 

 

 

El directivo asegura que esta línea de negocio ha ayudado a posicionar a la empresa con la salud y la calidad de vida como vector de diferenciación, una palanca de crecimiento que ahora buscan explotar a falta de oportunidades para abrir otro Reebok Sports Club. “Nuestro modelo daría sólo para un club más en Madrid, y las plazas que nos interesan están ocupadas”, reconoce, sobre los espacios donde se plantea crecer, como son el norte, el noroeste y el centro de la capital.

 

“Sólo lo haríamos si nos encajara la ubicación, pero sabemos que las plazas que nos interesan exigen una inversión de más de veinte millones y ahora mismo no visualizo esa oportunidad”, admite. El driver que sí ve viable aprovechar es el centro de salud, que junto a las cuotas mensuales, el pago por uso de los boutiques y los box de CrossFit que están integrados en los dos centros ayudarán a aumentar la cifra de negocio de la compañía, que rondará los 16 millones de euros en 2019.