Entorno

¿Jugador o club? Quién paga la multa cuando se rompe un contrato unilateralmente

El abogado de Jordi López Batet, socio del bufete Pintor Ruiz del Valle, ha concluido que, dependiendo de quién induzca a la finalización del compromiso, la sanción económica y deportiva incurrirá hacia club o jugador.  

¿Jugador o club? Quién paga la multa cuando se rompe un contrato unilateralmente
¿Jugador o club? Quién paga la multa cuando se rompe un contrato unilateralmente
Según la normativa de la Fifa, la parte que extingue un contrato sin causa justa debe indemnizar a la otra

A.F.O.

15 jun 2022 - 05:00

Tiempo de ejecución, voluntariedad e inducción son algunas de las claves que pueden decidir quién tiene la culpa cuando un jugador de fútbol rompe su contrato de forma unilateral, si el propio futbolista o el nuevo club de destino.

 

Son las claves que el abogado de Jordi López Batet, socio del bufete Pintor Ruiz del Valle, ha aportado durante el último Encuentro LaLiga de derecho del deporte de la temporada 2021-2022. “El conocimiento del jugador sobre la posible inducción realizada es considerable, pero no decisivo en el hecho de decidir quién es el infractor”, señala el abogado.

 

Según la normativa de la Fifa, la parte que extingue un contrato sin causa justa debe indemnizar a la otra, además de poder incurrir en sanciones deportivas, como es el caso de prohibir la inscripción de nuevos jugadores durante dos ventanas completas (es decir, un año entero durante los mercados veraniegos e invernales).

 

En un primer momento, cualquier equipo que contrata a un jugador que haya rescindido su contrato sin causa justificada “ha inducido al profesional a romper su vinculación contractual con su anterior club”. Por ello, tanto los equipos como los jugadores acusados pueden acudir a la Fifa para reclamar su presunción de inocencia, antes de recurrir al Tribunal del Arbritraje del Deporte (TAS) en última instancia.

 

 

 

 

“No es el antiguo club el que debe probar la inducción, sino el nuevo club que debe probar que no indujo”, explicaba el abogado de Pintor Ruiz del Valle. López Batet puso de manifiesto un caso que sucedió en 2020 y que implicaba a un conjunto portugués, el Club Desportivo de Tondela.

 

En este caso, el club argelino Nasr demandó al jugador Naoufel Khacef y al conjunto portugués reclamando una indemnización por ruptura injustificada de contrato de trabajo. Tras una larga exploración del caso, la Fifa ordenó al jugador y al nuevo club abonar una indemnización al equipo argelino.

 

Además, el jugador fue sancionado con cuatro meses de suspensión (que ya ha cumplido) y se impidió al Tondela fichar jugadores en el mercado de fichajes de verano y enero. En el auto del TAS, la sentencia se hizo con el objetivo de “evitar que los clubes contraten jugadores con vinculación a otros equipos”.

 

En sus conclusiones, el abogado señaló que “la inducción a la extinción del contrato de forma unilateral se relaciona con el nuevo club, que es quién tiene más posibilidades de ser sancionado en el caso de que el anterior equipo decida tomar acciones legales”. Es por ello que los tiempos manejados entre la salida y la nueva firma, la labor ejercida por el nuevo club o los movimientos del jugador pueden ser relevantes a la hora de determinar quién debe pagar la multa en estos casos.