La Policía detiene a Sandro Rosell en una operación contra el blanqueo de capitales

Los problemas judiciales para Sandro Rosell no cesan. El expresidente del FC Barcelona, denunciado hace un año por Mediapro por espionaje industrial, habría sido detenido esta mañana por la Policía Nacional en el marco de una operación contra el blanqueo de capitales. Se desconoce el importe que no habría declarado el también ex alto ejecutivo de Nike y si tiene alguna relación con las otras causas por las que se le investiga.

Los registros que se han realizado a cabo desde primera hora de la mañana afectan a domicilios particulares y oficinas que se encuentran en Barcelona, Girona y Lleida. Se prevé que las actuaciones de hoy culminen con la detención de al menos cinco personas, incluido Rosell y su mujer, Marta Pineda. También ha sido detenido Shahe Ohannessian, al que años atrás aseguró haber vendido su empresa Bonus Sports Marketing (BSM).

El dispositivo está siendo dirigido por la Fiscalía de la Audiencia Nacional y el Juzgado Central de Instrucción número 3, después de un año de investigación por parte de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (Udef). Según el citado medio, en esta operación se ha estado colaborando con la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) de Estados Unidos, ya que el origen de las actuaciones de hoy están en la comisión rogatoria enviada a Madrid por el tribunal de Nueva York que en 2015 canalizó el proceso iniciado por la Fiscalía de EEUU contra la corrupción en la Fifa.

De hecho, la operación se ha bautizado como Rimet, en referencia a Jules Rimet, abogado que presidio la Fifa y que hasta 1970 dio nombre oficial a la copa que reciben los campeones del Mundial de fútbol.  La instructora de la causa, la jueza Carmen Lamela, habría acordado embargar de forma preventiva 10 millones de euros en cuentas bancarias y 25 millones de euros en propiedades inmobiliarias a Rosell, aunque en realidad estarían a nombre de terceros para dificultar su identificación.

Los investigadores consideran que Rosell es una pieza más de la red que estuvo cobrando comisiones de forma irregular a través de la comercialización de los derechos comerciales de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), pagos que después se habrían lavado a través de empresas en paraísos fiscales.

Pau Molins, abogado del expresidente del Barça, ha asegurado que su cliente está "preocupado pero sorprendido" por su detención, ya que considera que los negocios que realizó en Brasil son "completamente legales". También ha añadido que la documentación que buscaba la policía se refiere a la venta de unos bonos hace seis años y que la cuenta que posee en Andorra está "perfectamente regularizada" y es conocida por "las autoridades". "Se le acusan de cosas completamente legales, no ha cometido ninguna irregularidad", ha insistido el letrado.