Under Armour prepara una nueva batería de despidos en sus oficinas

Under Armour vuelve a ajustar su plantilla. La compañía estadounidense de moda y equipamiento deportivo ha despedido a cincuenta trabajadores de distintas secciones corporativas de la empresa, tal y como ha revelado en un comunicado.

El grupo argumenta que el objetivo es “ayudar a la empresa a reducir gastos y avanzar hacia la rentabilidad como parte de una nueva etapa de crecimiento”. “Under Armour tomó la difícil decisión de eliminar ciertos roles corporativos en varias funciones del negocio”, añade el comunicado.

La compañía ya afrontó un dure ajuste de personal en 2018, cuando despidió al 3% de su plantilla global, alrededor de 400 empleados. Los despidos se culminaron en 2019 y supusieron diez millones de euros en costes.

En 2020, la empresa anunció otra reestructuración todavía mayor, que afectó a 600 empleados en todo el mundo. El ajuste llegó también a España, donde la empresa optó por cerrar sus oficinas en Barcelona.

Under Armour aumentó sus ventas en el cuarto trimestre hasta 1.400 millones

Under Armour finalizó el ejercicio 2022 (cerrado el 31 de marzo de 2023) registrando un ligero repunte tanto en ventas como en beneficio y apuntando previsiones moderadas para 2023: un crecimiento estable en ingresos o con un aumento ligero y con un repunte de 25 puntos básicos en el margen bruto. La compañía se vio lastrada por la caída de las ventas en tiendas propias y en su mercado local, Norteamérica.

En concreto, Under Armour registró un repunte de las ventas del 3% en el ejercicio 2022, hasta 5.900 millones de euros, una tasa que escaló hasta el 6% descontando los tipos de cambio.

El resultado neto de la compañía se situó en 387 millones de dólares, un 3,9% más que en 2021. Excluyendo un beneficio de 45 millones de dólares en relación con la venta de la plataforma MyFitnessPal, un beneficio de 96 millones de dólares por la liberación de una provisión de valoración fiscal relacionada con la reestructuración del periodo anterior y un gasto de 20 millones de dólares en reservas para litigios, el beneficio neto ajustado fue de 266 millones de dólares.