Opinión

Secciones amateurs del FC Barcelona: algo más que sólo secciones

Jordi Delás

1 abr 2021

Tras las elecciones a la presidencia del FC Barcelona es notable la expectación en relación al fútbol y resto del área deportiva y económica, imagen externa, globalización, venta de ropa deportiva oficial, renovación de los espacios o cuestiones legales. Unos aspectos que muestran la enorme complejidad de la entidad y abundan en el concepto més que un club, que, si bien podría ser atribuible a cualquier gran club polideportivo, en el caso del Barcelona alcanza gran convicción entre los socios y el entorno.

 

Ciertamente son muchos los argumentos a favor de este lema, pero contribuye a dar sentido a la afirmación el hecho que dentro del Barça haya muchos clubs constituidos por los diferentes deportes profesionales –fútbol, baloncesto, balonmano, hockey patines, fútbol sala- y los deportes amateurs.

 

Los miembros de la junta directiva reciben encargos diferenciados. Uno de ellos es la dirección de los deportes amateurs, de estructura profesional centralizada, estando al frente de cada uno de ellos un delegado de la sección, designado por el club sin retribución económica.

 

Si esta persona coloquialmente es denominada presidente, el nuevo directivo responsable de las secciones amateurs va a ser el presidente de los presidentes de atletismo (sección creada en 1915), hockey hierba (1923), rugby (1924), voleibol masculino (1970), hockey hielo y patinaje artístico sobre hielo (1972), baloncesto femenino (1992), baloncesto en silla de ruedas (2001) y voleibol femenino (2004). Se va a encontrar con deportistas que compiten al más alto nivel de su deporte, con un notable listado de deportistas internacionales y olímpicos, junto a las aspiraciones y diferentes características de cada deporte, haciendo evidente que cada uno de ellos es un mundo.

 

 

La antigüedad y arraigo de las secciones justifican su razón de ser. El socio conoce su existencia y cuando presencialmente o por los medios de comunicación sabe de un equipo del FC Barcelona de un deporte amateur, le agrada esa diversidad, la presencia en esa disciplina y evidentemente desea que gane.

 

Una fuerte vinculación derivaría de la normalización de lo que ocurre en la mayoría de clubes, cuando los socios más jóvenes escogen deporte a practicar. En un entorno tan masivo como el del Barça, de producirse una amplia demanda podría entenderse que apareciera numerus clausus en alguna sección, hecho que ahora solo surge en alguna de muy especial infraestructura.

 

Las secciones amateurs, fruto de la diversidad de sus superficies de entrenamiento y juego, se hallan dispersas. Contar con una sede, un espacio común de relación entre deportistas, familiares y seguidores, es un antiguo anhelo.  

 

En los últimos años se han dado pasos para que la Ciudad Deportiva de las Secciones Amateurs  se ubique en las instalaciones deportivas de la Universidad de Barcelona, en la Diagonal. Permitiría combinar el desarrollo del deporte universitario con las necesidades de las secciones amateurs. La ubicación es excelente en cuanto a comunicaciones en la ciudad de Barcelona. Es, sin duda, un tema a abordar por parte de la nueva junta.

 

Las secciones generan pérdidas, a pesar de lo cual, el FC Barcelona mantiene su participación en deportes amateurs. Que en la competición de un determinado deporte aparezcan equipos del Barça confiere notoriedad, difusión, solvencia en la asunción de compromisos, aumento de licencias federativas, posibilidad individual de practicar ese deporte sin tener que pagar importantes cuotas o utilizar para el deporte un espacio que difícilmente seguiría siendo usado a esos efectos sin el concurso del club.

 

Todas estas cuestiones no siempre son valoradas por las federaciones y las diferentes administraciones e incluso, en ocasiones, que ven con recelo la sección amateur del Barcelona, atribuyéndole riqueza inexistente y haciendo difícil la aparición de ayudas o descuentos, cuando sería recomendable facilitar al FC Barcelona la tarea de seguir  manteniendo y sufragando equipos en deportes amateurs.

 

 

Además de los recursos propios del club, otra forma de ingresos son las cuotas de las escuelas deportivas de cada sección para menores de 18 años. Comparativamente, son más bajas que las de otros clubs con lo que se facilita la plural procedencia de los deportistas.

Tiempo atrás, hasta prácticamente 2010, se aceptaban patrocinadores particulares de una sección. La tendencia actual es la búsqueda de un patrocinador global. Actualmente en las camisetas de los equipos amateurs figura Fundació Barça, en espera del patrocinador global que se sienta cómodo con los valores del deporte y del amateurismo del FC Barcelona, más allá del concepto de publicidad estática en vallas o camisetas o la presencia en los medios de comunicación.

 

Otros valores con los que puede sentirse identificado el futuro patrocinador son los de tres ámbitos valiosos, a generalizar, ya que no están presentes en todas: deporte femenino, deporte para personas con discapacidad intelectual y deporte inclusivo.

 

El deporte de inclusión social supone que el esfuerzo de mostrar, divulgar, formar en los deportes minoritarios se dirija también a zonas de menor oferta deportiva, en las que no suelen haber actividades extraescolares y donde el deporte es una alternativa al tiempo libre de riesgo.

 

 

Actualmente, no se retransmiten en directo de partidos de todas las competiciones de los deportes amateurs, salvo que haya un familiar o un seguidor dispuesto a filmar con teléfonos o cámaras de bajo coste. Con una sencilla tecnología que el club puede ayudar a implementar, se multiplicaría la repercusión de los encuentros deportivos.

 

Dentro de las secciones amateurs hay concepto de familia. Y en este sentido fue dolorosa la pérdida, a recuperar, del béisbol, sección del FC Barcelona desde 1931 y que se apartó, si bien sigue funcionando eficazmente a la espera del retorno, en la crisis de 2011. Ese año se propuso recortar los gastos de los deportes amateurs suprimiendo los desplazamientos fuera de Catalunya, lo que en la práctica suponía la desaparición de los primeros equipos que competían en ligas estatales. Al final, la cuestión derivó en una disminución del presupuesto de cada una de las secciones del orden del 15% y la inexplicable salida del béisbol.

 

La magnitud del FC Barcelona hace que estas tareas se hayan venido realizando de forma no conexionada. De hecho es deseable que en el Barcelona posterior a las elecciones de 2021 haya más vínculos entre la Fundación FC Barcelona y las secciones amateurs.

 

En los últimos años desde la Fundación se han desarrollado experiencias deportivas en diferentes lugares de Catalunya destinadas a mejorar, a partir del deporte, la formación de personas con menores oportunidades. Tarea que también realizan las secciones amateurs y en la que sería deseable la acción conjunta.

 

 

Es muy interesante la iniciativa Fútbol-Net, desarrollada por la Fundación, por la que escolares se introducen en los valores del deporte y del juego limpio, con personal altamente cualificado y una metodología impecable. Estas mismas actuaciones se podrían aplicar desde todos los deportes amateurs, no solo el fútbol. Con la colaboración de los formadores de las escuelas deportivas del club y la posibilidad de que niñas y niños se sientan atraídos por alguno de estos deportes, conocer otras realidades y favorecer la transversalidad mezcladora y beneficiosa entre deportistas de diferente procedencia.

 

Una partida importante de gastos la constituyen los elevados alquileres de las instalaciones que dificultan la difusión de los distintos deportes. Más participantes supone más coste de entrenamientos y partidos. Aunque para las administraciones locales, propietarias de las instalaciones, implica una mayor capacidad de recaudación, es una limitación para la incorporación de nuevos practicantes a los deportes minoritarios.

 

También destacan los derivados de los desplazamientos de los deportistas extranjeros. El transporte y alojamiento, constituyen junto a la marca Barça, la ciudad de Barcelona o los servicios médicos elementos de atracción para jugadores que quieran jugar en el club, que no cobran por jugar en la sección.

 

Los gastos de personal se concretan en la dirección técnica de cada una de las secciones, fisioterapeutas, preparadores técnicos y entrenadores. Desde 2011 no hay contratos a jugadores salvo por entrenar en las escuelas de las secciones. Sería muy recomendable contar con becas deportivas, como por ejemplo ocurre en el Programa de la Asociación Deportes Olímpicos.

 

 

En la actualidad se da un importante proceso de formación continuo para los deportistas amateurs. Sería valorable la creación de la oficina de atención al deportista con asesoramiento en aspectos de educación, compatibilidad de estudios y entrenamientos, alojamiento, acceso a la salud pública y salidas profesionales o bolsa de trabajo como realizan, por ejemplo, los centros de alto rendimiento.

 

A través de las secciones amateurs hay un amplio programa de devolución a la sociedad. Hoy en día, no tiene sentido un club amateur que sólo se plantee ganar. Con las secciones amateurs el FC Barcelona halla ese plus diferenciado. La competitividad obliga a hacer bien las cosas, optimizar la gestión, desarrollar talento y cultura de esfuerzo.  

 

Toda esta dinámica, a través de los deportes amateurs del FC Barcelona dan pistas y ejemplos de servicio a la comunidad, replicables en otros ámbitos para alcanzar al mayor número posible de personas.

Jordi Delás

Jordi Delás

Experto