Opinión

Pequeños atletas en un gigantesco negocio, y el porqué no es “un cuento chino”

Pequeños atletas en un gigantesco negocio, y el porqué no es “un cuento chino”

José Bonal

30 oct 2018

Pequeños atletas en un gigantesco negocio, y el porqué no es “un cuento chino”

 

 

Para todo aquel que no sea un gran conocedor o experto en la cultura y el deporte en China, algo habitual es mirar las cifras y preguntarse: ¿cómo un país en el que habitan 1,3 billones de personas no puede conseguir que 11 jueguen al máximo nivel en un campo de fútbol? En base a mi experiencia como Manager del Campus Experience de la Fundación Real Madrid en 2015, muchas horas de estudio y tres años más viviendo en el gigante asiático trabajando como Sports & Athletics Director en una de las mejores instituciones del país, me gustaría compartir algunas ideas y conceptos claves para resolver este misterio.

 

¿Cómo está estructurada la competición? Debido a las distancias y para facilitar el día a día a las familias debemos conocer que en China hay 100.000 internados o colegios internos, es decir, colegios donde un total cercano a los 33 millones de estudiantes en total pernoctan. Este dato nos ayuda a entender la estructura de competición divida no solo desde un prisma federativo (como el que predomina en España) sino también colegial (algo más similar al estadounidense). La mayor red de detección de talento está basada en estas ligas colegiales.

Los colegios públicos juegan en ligas locales y reciben subvenciones del estado en función de su participación, pero también en base a sus resultados. Esto, combinado con el concepto de "ganar honor" para tu familia o colegio, hace que la dedicación en estos centros, sea totalmente especializada y enfocada al rendimiento en un determinado deporte, por ejemplo, con altas horas de dedicación, y variaciones en el currículo escolar (ausencia de algunas materias para poder tener más horas de práctica en esta especialidad, bien sea bádminton, voleibol, baloncesto, etcétera,).

 

En el ámbito federativo la dedicación es incluso mayor en horas y sacrificios, pues una vez que las canteras de los equipos de SuperLiga, la federación provincial o nacional selecciona a sus jugadores desde estas ligas escolares, les concentra todo el año para entrenar como conjunto. Por ejemplo: equipo Sub-14 de Chengdu, entrena y convive todo el año, 24 horas al día, prácticamente 365 días al año (salvo la celebración de año nuevo chino, donde los estudiantes visitan sus pueblos y ciudades de origen). En estos casos, y en contra de lo que la ciencia recomienda, la mayoría de los jugadores abandonan sus estudios académicos para poder dedicar una mayor concentración y número de horas al fútbol.

 

 

 

 

¿Qué les falta, por qué todavía no son competitivos? La palabra clave es "todavía", pues lo único que a priori les falta es tiempo. La cifra de jugadores de élite potenciales del primer párrafo, no tenía del todo una aplicación real, pues estaba sin activar por diversos motivos (culturales, falta de recursos, falta de instalaciones, etcétera). El plan que el gobierno de Xi Jinping ha puesto en marcha, con un presupuesto de 800.000 millones de euros abarca a muchos stakeholders importantes y contempla muchos aspectos claves para el éxito en su objetivo:

 

- Popularización del fútbol a nivel general: el gobierno chino ha comprado para emitir en abierto los derechos televisivos de La Liga, Premier League, Bundesliga y

Serie A. Ellos creen que si el fútbol gana relevancia social, un mayor número de los mejores jóvenes atletas querrán dedicarse a este deporte, pues hasta hace no tanto los mejores atletas querían dedicarse a otros deportes como el bádminton o baloncesto. Asimismo, el boom económico del país proporciona un mayor acceso a instalaciones, así como oportunidades para que los clubes de SuperLiga puedan subir los salarios de jugadores locales e importen talento de primer nivel mediático del fútbol occidental (Lavezzi, Mascherano, Paulinho, etc,). Esta misma línea persigue la organización del Mundial de 2034.

 

- Tecnificación del máximo de población: la apertura de 20.000 academias especializadas en 2025 (frente a las 5.000 actuales) y la instauración en los colegios de todo el país del ¨fútbol¨ como asignatura obligatoria, hace que la masa de potenciales jugadores crezca exponencialmente.

 

- Evolución cultural: la mayoría de familias en China solo tiene un hijo, por lo que en muchos casos de familias de clase media-alta, los adultos no querían que la dedicación de su progenitor fuese el deporte (pues si fracasaban, habrían desperdiciado su tiempo). Sobre todo en estratos sociales medios-altos se orientaba a los hijos tan solo a profesiones relacionadas con economía-negocios, medicina o ingenierías. Este pensamiento ya impera en muchos menos hogares, por lo que la verdadera cifra de jugadores potenciales a nivel práctico empieza realmente a activarse como mencionábamos previamente.

 

- Metodología y gestión del talento: el gran talón de Aquiles, pues históricamente China ha dominado deportes en los que la ¨toma de decisión¨ tiene un impacto medio-bajo en el resultado final (gimnasia artística, natación, atletismo). Son buenos en repetir, masterizar la técnica pero no tanto en comprender los espacios y los tiempos del juego. Por ello y para solucionar esa carencia, el gobierno ha firmado convenios y ha facilitado la llegada al país a las entidades de alto prestigio y renombre, como por ejemplo La Liga o la Federación Brasileña. Estos acuerdos implican la llegada a las escuelas chinas de entrenadores occidentales, para implantar la metodología que se usa en Europa actualmente y la facilitación en la apertura de Academias (por ejemplo FC Barcelona, Borussia Dortmund o la famosa alianza entre Evergrande-Real Madrid).

 

En definitiva, el tiempo dirá, pero si estos jóvenes atletas siguen la ruta marcada, puede que al final no fuese todo "un cuento chino".

José Bonal

José Bonal

Profesor de gestión deportiva la Universidad Europea de Madrid