Mediapro negocia su refinanciación y estudia pedir ayudas de la Sepi

Mediapro busca ayuda. El grupo de producción audiovisual ha fichado a Rothschild y Kpmg para reestructurar su deuda financiera y mantiene conversaciones con la  Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi) para solicitar acceso al fondo de apoyo de solvencia de empresas estratégicas, según ha avanzado Expansión. Rotschild será el interlocutor del grupo en las negociaciones con sus acreedores, mientras que Kpmg diseñará el nuevo plan financiero de la compañía en el contexto actual de la pandemia.

La compañía audiovisual arrastra una deuda de 920 millones de euros y busca un apoyo transitorio que le permita hacer frente a la crisis económica del Covid-19. En esta línea, la solicitud de ayuda a la Sepi podría ascender a 300 millones de euros. Además, la compañía se ha puesto en contacto con sus accionistas, así como algunos grupos de capital riesgo, para inyectar recursos en la empresa, sin haber llegado todavía a un acuerdo.

La empresa, que cuenta con 8.000 trabajadores, 5.000 de ellos en España, afronta una pérdida de ingresos derivada de la suspensión de las competiciones deportivas y la paralización de las actividades audiovisuales. Según el rotativo, el pasivo de Mediapro se divide en tres tramos con distintos vencimientos: el primero de ellos es un crédito ordinario de 300 millones de euros, con vencimiento en 2024, de bancos como Citi, Barclays, Bbva, Caixabank o Bankia. El segundo, de 380 millones de euros, consiste en un préstamo bullet a devolver en 2025, en el que participan diversos fondos, entre ellos BlackRock y Goldman Sachs. En el tercer tramo, por importe de 180 millones de euros y con vencimiento a 2025, el fondo de perfil oportunista Barings es el que dispone de la mayor posición.