Mediapro ficha a Pau Gasol para explotar su negocio de museos deportivos en EEUU

Mediapro es ampliamente conocido por ser uno de los principales grupos audiovisuales en el negocio del fútbol y la producción de contenidos. Sin embargo, con el tiempo ha ido desarrollando líneas de negocio complementarias con las que ahora quiere dar un salto cuantitativo. Entre ellas, la división de museos, a la que quiere llevar a Estados Unidos de la mano de Pau Gasol.

La compañía ha anunciado que el jugador de la NBA se convierte en su asesor para la puesta en marcha de espacios de exhibición vinculados al deporte. "Gasol aportará su proyección internacional, su vinculación con el mundo del deporte y los conocimientos adquiridos durante su larga trayectoria profesional", comentan en un comunicado.

La estrella de baloncesto, que hasta ahora había limitado sus acuerdos con empresas a ejercer de embajador de marca, amplía así su lista de proyectos, entre los que figuran campañas con Banco Popular, Iberia, Nike, NBA 2K y Grupo Ifa. Se desconoce le grado de dedicación que dedicará a esta nueva iniciativa, aunque podría ser la puerta de entrada para Mediapro en la liga estadounidense de baloncesto.

Mediapro Exhibitions ya ha trabajado en Europa con dos de las principales entidades deportivas, ya que se encargó tanto de la digitalización del Camp Nou Experience del FC Barcelona, que este mes ha rebasado los 30 millones de visitantes en su historia, y también el Tour Berbabéu del Real Madrid. En el mundo del deporte, también asumió el diseño del Museo de la Confederación Brasileña de Fútbol.

El líder de esta división es David Xirau, que también ha pasado por el área de I+D de la compañía y que anteriormente trabajó en Andersen Consulting y Europraxis. A su cargo tiene a un equipo de más de veinte personas, que se encargan desde el diseño del discurso museográfico, hasta las escenografías y espacios con un alto componente audiovisual y de interacción digital.

La facturación del grupo audiovisual en 2015 bajó un 1,4%, hasta los 1.509 millones de euros, mientras que el ebitda (beneficio antes de intereses, impuestos y amortizaciones) se disparó un 36%, hasta los 129 millones. Para el ejercicio en curso, aunque no han dado a conocer sus previsiones de cifra de negocio, sí apuntaron que querían obtener un resultado operativo de 170 millones de euros y la facturación podría estar en torno a los 1.530 millones.