Italia investiga a la Serie A, Sky y Mediaset por posible restricción a la competencia

Funcionarios del Antitrust y la Guardia di Finanza han irrumpido hoy en las oficinas de la Liga Serie A, Sky, Infront Sports&Media y Mediaset. Las autoridades han recopilado información sobre la adjudicación de los derechos de televisión del torneo hasta la temporada 2017-2108, para esclarecer si durante el proceso se infringieron los principios de libre competencia entre los distintos operadores.

La investigación se centra en los acuerdos posteriores adquiridos entre Mediaset y Sky para repartirse las emisiones del torneo italiano a través de las distintas plataformas de pago. Según los investigadores, el hecho de que ambas compañías pujaran por todos los paquetes dejó fuera de la subasta organizada por Infront Sports&Media a rivales como Fox Sport o Eurosport, según Il Sole 24 Ore. Uno de los argumentos sería el cambio de cromos que acordaron con posterioridad los dos adjudicatarios.

Sky se adjudicó los paquetes A y B, que incluía la emisión de los partidos de los ocho principales clubes vía satélite y televisión digital terrestre; a cambio, pagaría 572 millones por temporada. Mediaset, por su parte, ofreció 373 millones por el paquete D, que incluía los encuentros de los doce equipos restantes, pero vinculando su propuesta a hacerse también con uno de los otros dos paquetes.

Esta posibilidad no se incluía en los pliegos del concurso, pero la Serie A acabó logrando el visto bueno de la Autorità per le Garanzie Nelle Comunicazioni (Agcom) a los cambios en la adjudicación para contentar a los imperios mediáticos de Silvio Berlusconi y Rupert Murdoch. En virtud el nuevo contrato, Mediaset Premium se quedaba con los paquetes B y D, mientras que Sky asumía los contenidos del sobre A y sublicenciaba la emisión en exclusiva de los partidos de los doce equipos menores encuadrados en el paquete D.

El nuevo reparto, sin embargo, supuso un menoscabo de más de cien millones de euros para la Serie A, ya que el monto total de 945 millones de euros estaría lejos de la cifra inicial de 1.000 millones de euros que se había marcado el torneo como objetivo básico con la nueva subasta.