Arabia Saudí suspende la licencia de beIN Sports en el país

Arabia Saudí apaga la señal de beIN Sports en ese país. El Gobierno ha suspendido de manera permanente la licencia de la plataforma audiovisual qatarí, que tiene prohibido emitir en dicho territorio desde mediados de 2017 debido a una disputa entre Arabia Saudí y Qatar. Ahora, el país aduce a causas monopolísticas y ha multado a la plataforma con 10 millones de riales (2,3 millones de euros).

La Autoridad General de la Competencia (GAC) de Arabia Saudí ha afirmado haber realizado “investigaciones sobre las quejas presentadas contra BeIN Sports, que abusó de su posición dominante a través de varias prácticas monopólicas con respecto a suscriptores potenciales de un paquete exclusivo para emitir la Euro 2016”, según ha comunicado.

Es un episodio más en la batalla audiovisual en Oriente Próximo. El mes pasado la Organización Mundial del Comercio (OMC) emitió un informe en el que concluía que Arabia Saudí promovió y apoyó activamente la piratería a través de la plataforma beoutQ, que durante años emitió de manera ilegal los contenidos de beIN Sports.

El órgano de la competencia de Arabia Saudí ha multado a BeIN Sports con 2,3 millones de euros

Ese falló aumentó la presión sobre Arabia Saudí, que ha sido señalada por parte de las autoridades competentes de Estados Unidos y la Unión Europea por vulnerar los derechos de autor en ese país. Como parte de este proceso, la Premier League, LaLiga, la Bundesliga alemana y los órganos rectores del fútbol mundial y europeo, la Fifa y la Uefa, presentaron pruebas que incriminan al país.

De hecho, estas entidades, junto con las cinco principales ligas de fútbol de Europa y la Confederación Asiática de Fútbol (AFC) pidieron de forma conjunta hacer frente a la piratería deportiva internacional como titulares de los derechos de competiciones deportivas, infringidos de forma sistemática por la citada operadora de televisión.

BeIN Sports, por su parte, ha cifrado en 1.000 millones de dólares el corte de la piratería en Oriente Próximo, una cantidad que reclamado por daños y perjuicios derivados del fomento de la emisión ilegal de su señal en esa región.