La tecnología, punta de lanza de la profesionalización en la gestión de las cadenas de gimnasios

La tecnología está íntimamente relacionada con la industria de la actividad física. Del mismo modo que las aplicaciones de entrenamiento ayudan a los usuarios a medir su rendimiento, las cadenas de gimnasios han incorporado herramientas digitales de gestión de los clubs para ser más eficientes.

En otras palabras, las empresas utilizan sistemas tecnológicos para estar en forma: aumentar su cartera de clientes, valorar el rendimiento de su equipo de entrenadores y conocer qué clases dirigidas tienen más éxito entre los abonados. Así se desprende de las opiniones recogidas por Palco23 para la serie de reportajes patrocinada por Life Fitness sobre la importancia que tiene la tecnología en la industria de la actividad física.

“Los motivos por los que los clubs utilizan la tecnología son que les permiten profesionalizar la gestión, reducir costes y recabar información de los clientes para conocerles mejor y saber cómo fidelizarles”, resume Jerónimo García, doctor en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte e investigador de la Universidad de Sevilla en materia de retención en los centros de fitness.

Aplicar el Big Data, es decir, la recopilación masiva de datos a través de software de CRM que facilite su visualización e interpretación se ha convertido en una herramienta indispensable para las cadenas. "La información aportada por el booking de la reserva de salas permite a los centros conocer al cliente y por lo tanto saber qué ofrecerle", explica Xavier Trias, socio de la consultora EY y experto en transformación digital.

En este sentido, las empresas de bajo coste son las que más han potenciado la gestión digital de las instalaciones. Por ejemplo, Viva Gym y Dream Fit controlan el acceso de los usuarios mediante tornos, lo que les "ayuda a saber cuándo viene más gente al gimnasio, y a partir de ahí reforzamos algunos turnos y trazamos la parrilla de clases dirigidas”, explica Daniel Galindo, director regional de Viva Gym.

Ambas cadenas también apuestan por la reserva de espacios y clases dirigidas. “Así sabemos qué sesiones tienen más éxito y qué entrenadores triunfan más. Modificamos la oferta en función de esos datos”, comenta Marcos Verburgh, director general de Dream Fit. "La tecnología aplicada a la gestión nos permite conocer mejor al abonado y disparar hacia sus preferencias, por lo que hace más eficiente nuestra política de marketing", resume Verburgh.

Viva Gym asigna los instructores que más clientes congregan en las sesiones a las que acuden menos abonados o incluso programan sesiones de running en el exterior para “evitar masificar el club”. De este modo, la cadena no tiene por qué reforzar con más personal las horas punta, lo que a la larga se traduce en una contención de los gastos laborales.

Duet, por su parte, ha invertido en un sistema integral de gestión que permite al director de cada centro disponer de una aplicación que le ofrece un resumen diario de la actividad de sus entrenadores y la calidad del servicio que ofrecen. Además, a través de su marca low cost Duet Fit, instala máquinas en la entrada de cada club para registrar la huella digital de los clientes y así controlar el acceso y las altas.

Para modernizar el programa y hacerlo más accesible, el grupo ha apostado por un servicio cloud, de modo que la dirección tiene acceso a la gestión y la facturación de los centros, al sistema de accesos a la instalación y al control de espacios deportivos a través de su dispositivo móvil. "Se trata de un núcleo que integra el business intelligence, la contabilidad y el factor social", expone Anselmo Méndez, director general.

Claror tampoco se queda atrás, puesto que se vale de la tecnología “porque nos ayuda a ser más productivos y a reunir información que nos hace tomar mejores decisiones”, detalla Miguel Ángel Martínez, director de innovación y calidad deportiva. La fundación ha optado por habilitar un kiosko online para reservar las clases y poder hacer un seguimiento de sus instructores de fitness.

GO Fit es una de las cadenas que está en pleno proceso de transformación digital. “Hemos diseñado una estrategia que tiene uno de sus pilares en la optimización de la gestión de club a través de la tecnología”, aclara una portavoz de la cadena. El objetivo es “detectar las necesidades de los clientes para adaptar nuestros programas de entrenamiento y simplificar el día a día de nuestra plantilla”.

Supera también incide en el rendimiento. “Las herramientas que utilizamos tienen que ver con la optimización de procesos para mejorar el servicio y la rentabilidad. Por ejemplo, disponemos de un software orientado a potenciar la eficiencia y hemos implementado un programa de gestión laboral que integra las características de nuestro modelo de gestión y nos permite alcanzar mayores volúmenes de trabajo a menor coste”, detalla Jorge Barros, director del departamento técnico.

Con la digitalización de los centros, “las cadenas están orientando la tecnología a la gestión de los activos, de los aparatos y de la sala, pero esa gestión de instalaciones debe estar más relacionada con la relación que tienes con tu cliente”, explica Marcos Eguillor, profesor de IE Business School, experto en transformación digital y ponente en el Congreso Europeo de Ihrsa que se celebró en Sevilla el pasado año.