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YogaOne dobla su presencia en Tarragona con el rescate de un antiguo club de yoga

Tras el cierre del estudio Bioritmes, se negoció el traspaso con franquiciadas que ya operan un YogaOne en la ciudad catalana desde hace dos años.

P. López

5 feb 2020 - 04:57

YogaOne abre su segundo club en Tarragona tras incorporar a su red el antiguo Bioritmes

 

 

 

Nuevo paso de YogaOne para mantenerse como la principal cadena de centros de yoga en España. La cadena, creada por la catalana DiR para crecer con estudios boutiques de esta disciplina, ha rescatado un club que cerró en Tarragona, donde ahora abrirá su segundo espacio en la ciudad. Se trata de Bioritmes, que tras echar el cierre se negoció un traspaso con las propietarias del primer YogaOne que abrió en dicho municipio hace ahora dos años.

 

De esta manera, las franquiciadas contarán con un segundo establecimiento en esta capital de provincia y con una única cuota. En concreto, operarán el centro que se encuentra en el número 3 de la calle Fortuny, en la zonq del centro, y un estudio en el número 7 de la calle Josep Pla Casadevall, junto a la playa de l’Arrabassada. Es decir, que son complementarios en cuanto a captación de público.

 

“Para YogaOne este acuerdo supone acercar el yoga a los residentes de una zona nueva, y la oportunidad de fidelizar a los socios actuales que podrán acceder sin sobrecoste a dos centros distintos”, comenta Silvia Canela, directora de expansión de DiR. La directiva afirma que al primer club que abrieron acudían clientes que no vivían en el centro y que con el nuevo estudio hay más facilidades de aparcamiento.

 

 

 

 

En las próximas semanas se realizará el rebranding de la instalación, que está redecorándose para que tenga el estilo de estudio de YogaOne, y se rediseñarán los horarios con el fin de incorporar más sesiones de distintos estilos en todas las franjas del día. De cara al futuro, se plantea la posibilidad de añadir una pequeña sala para practicar yoga en familia o para el público infantil.

 

El objetivo de este acuerdo también es que se generen sinergias entre ambos centros, de modo que “los profesores más potentes darán clases en los dos centros, por lo que la calidad de los instructores será alta”, argumenta Canela.

 

Está por ver si YogaOne incorporará las actividades que ofrecía Bioritmes antes de cerrar, como pilates, una disciplina que no se ofrece en el resto de YogaOne. “Estamos trabajando en ello, pero aún no tenemos los horarios definitivos”, explica la directora de expansión de DiR.

 

Este acuerdo llega meses después de que DiR entrara en Madrid a través de YogaOne. Es la cadena con la que ha conseguido salir de Cataluña y crecer en la capital madrileña, donde ya opera el barrio de Moncloa, en Ventas y próximamente inaugurará un club junto al estadio Santiago Bernabéu, en Nuevos Ministerios.

 

DiR ha celebrado su cuarenta aniversario en 2019 y, aunque la compañía no ha desvelado cómo ha cerrado el año en términos de facturación, la compañía finalizó 2018 con unas ventas de 46,8 millones de euros y un resultado de explotación de 5 millones de euros, lo que supuso un alza del 20% respecto al año anterior. El beneficio antes de impuestos fue de 200.000 euros.

 

Además de la marca matriz, DiR, y YogaOne, la compañía opera las cadenas BDiR, que se basan en clubes de proximidad y menor tamaño que los DiR, y los boutique de boxeo Jambox. En total, suma 66 instalaciones en España.