Fitness

Yes You Fit crece en Madrid: invertirá 685.000 euros en abrir tres clubes corporativos

La cadena de gimnasios se ha hecho con la gestión del gimnasio corporativo ubicado de MásMóvil, donde hasta ahora operaba MOMO Sports Club. También abrirá un club exclusivo para la empresa Haya Real Estate y uno más en Ifema.

Patricia López

13 feb 2019 - 04:57

Yes You Fit prevé inaugurar siete instalaciones en 2019, incluyendo la de Haya Real Estate, la de MásMóvil y la de Ifema

 

 

Yes You Fit crece en Madrid al calor del gimnasio corporativo. La cadena fundada en 2016 por David del Campo ha firmado tres aperturas para el primer semestre de 2018, en las que invertirá aproximadamente 685.000 euros. Empezará a operar el 20 de febrero en la sede de Haya Real Estate, donde la compañía de gimnasios ha desarrollado un club ad hoc para la gestora de activos inmobiliarios.

 

A lo largo de febrero, la cadena también abrirá en el número 15 de Avenida de la Vega, donde se encuentra la sede del grupo de telecomunicaciones MásMóvil. Se trata de un espacio que hasta hace unos meses gestionaba MOMO Sports Club, y que Yes You Fit incorporará a su red. “El club estaba listo para abrir, pero quería redistribuir el espacio de otra manera y hacer el cambio de imagen corporativa”, explica David del Campo, director general de la cadena. Además, la empresa está a punto de firmar otro gimnasio con una multinacional en la zona de Ifema, donde también abrirá un biobar.

 

El proyecto probeta de Yes You Fit  empezó en 2015, momento en que del Campo proyectó cómo sería un modelo de negocio basado en el fitness corporativo. “Me di cuenta de que las grandes empresas que cuentan con una plantilla superior a los 600 empleados estaban empezando a preocuparse por el bienestar de sus empleados y, aprovechando que Madrid es la ciudad con mayor número de parques empresariales, me lancé a este segmento”, apunta.

 

 

 

 

El directivo asegura que decidió diseñar un negocio en el que se dieran cita el deporte, la nutrición, el bienestar y el ocio. “Leí un estudio de Harvard que decía que estas cuestiones están asociadas a un envejecimiento saludable, y pensé en desarrollar un negocio así”, explica. De ahí que el grupo opere tanto gimnasios como restaurantes corporativos.

 

Del Campo diseñó un modelo en que la actividad física, la nutrición y el ocio fueran de la mano, lo que le llevó a inaugurar un club de 1.000 metros cuadrados en el parque empresarial Cristalia, donde tienen sede Iberdrola, UPS y la aseguradora AMA. “Decidimos abrirlo con un modelo híbrido para llegar al público residencial y corporativo y aprovechar las horas valle”, explica.

 

Es una fórmula que en otoño de 2018 le llevó a abrir otro espacio en el centro empresarial de Manoteras, donde tiene oficina CaixaBank, entre otras multinacionales. En este complejo se invirtió 270.000 euros y meses después de su apertura ya cuenta con más de 400 socios de perfil corporativo. “Algunas empresas cofinancian la tarifa”, explica, sobre una opción que les permite desgravar parte de la inversión en este tipo de políticas que fomentan la actividad física entre sus plantillas.

 

Del Campo afirma que el modelo con el que quiere crecer es el de alquiler y construcción del local desde cero, en lugar de explotar centros en las sedes de las empresas. “Esa opción obliga a renovar el contrato cada dos años, pero prefiero gestionar más a largo plazo aunque eso implique invertir entre 200.000 euros y medio millón”, sostiene.

 

 

 

 

Es una horquilla de inversión que le permitió abrir en La Moraleja (Alcobendas), en el mismo edificio donde tiene las oficinas Renault España y Más digital. “En los clubes corporativos, dar con la ubicación ideal es tan importante como en los gimnasios convencionales”, explica. El directivo ha sabido rodearse de partners inmobiliarios que le han ayudado a crecer, como son Merlin Properties y Savills Aguirre Newman.

 

“Nosotros competimos con el club que el cliente tiene cerca de su casa, y tratamos de ofrecer un plus, como es el aparcamiento gratuito o un horario de clases dirigidas adaptado a su horario laboral”, afirma. De ahí que programen clases de mayor intensidad a primera hora y de yoga a última. Con el paso de los años la compañía ha profesionalizado su estructura, ya que del Campo tenía experiencia en el sector de la restauración y los parques temáticos, pero no en el del fitness. Tras varios años apoyándose en consultores, ha fichado a un director de operaciones. “En los próximos meses incorporaremos talento procedente de empresas líderes del sector”, adelanta del Campo.

 

La división de fitness del grupo cerró 2018 con una facturación de 500.000 euros a través de sus tres centros. “Más allá de las tres aperturas, queremos seguir creciendo con más instalaciones con vistas a finalizar el año con diez clubes creciendo con recursos propios y con partners”, asegura. Este tipo de alianzas podría firmarse con cadenas de gimnasios, aunque por el momento no se ha firmado ningún acuerdo.