Fitness
Viva Gym crecerá en Barcelona, Córdoba y Zaragoza tras captar 20 millones para su expansión
16 ene 2017 - 17:06
Viva Gym acelera su ritmo de crecimiento para 2017. La cadena española de gimnasios, que acaba de inaugurar su segundo centro en Barcelona, ganará músculo en España con la apertura de seis clubs más en los próximos doce meses. Con el objetivo de convertirse en el gimnasio líder por implantación en España de cara a 2020-2021, su aspiración es alcanzar los 50 clubs en toda la Península Ibérica en cuatro años, contando los 17 que ya están operativos.
El consejero delegado de Viva Gym, Juan del Río, detalla que para lograr este objetivo ya se han asegurado una inversión inicial de 20 millones de euros por parte de sus accionistas. No obstante, y teniendo en cuenta que la inversión media por club es de 1,5 millones de euros, se estima que la inversión final oscilará entre 37 millones y 45 millones, dependiendo de la evolución valor del mercado inmobiliario.
Viva Gym basa su modelo de negocio en la oferta gimnasios de al menos 1.500 metros cuadrados, de bajo coste y ubicados en los núcleos urbanos de ciudades de al menos 200.000 habitantes. Siguiendo este patrón, la operadora tiene cerradas tres aperturas más, como ya adelantó este diario.
En febrero inaugurarán en Príncipe de Vergara, Madrid; en marzo en Puerta del Carmen, en el centro de Zaragoza, y a finales de abril en Palma de Mallorca. De cara al segundo semestre del año, Viva Gym planea "abrir tres centros más, uno en Córdoba, otro en Zaragoza y, a poder ser, en Barcelona", afirma Del Río, que en la capital catalana tiene cuatro localizaciones vistas a espera de dar con la idónea. Según explica, "en 2020 nos gustaría contar con entre cinco y diez centros Viva Gym en Barcelona".
El nuevo local de la cadena en la capital catalana está ubicado en el barrio de Sant Antoni, en calle Manso, y es el club más grande de la cadena en España. El gimnasio, que emplea a 12 técnicos y ya cuenta con 2.000 abonados, consta de cuatro plantas y 3.000 metros cuadrados, como ya avanzó este medio.
Cada planta está dedicada a un servicio o tipo de entrenamiento. Mientras que la primera están los vestuarios y las máquinas de vending, en la segunda se ubica una sala de cycling y otra destinada a las sesiones dirigidas con capacidad para cien personas. La tercera planta son 700 metros cuadrados dedicados a la zona de cardio y al entrenamiento funcional, y la cuarta y última planta cuenta con 700 metros cuadrados más dedicados al entrenamiento de musculación e hipertrofia. Matrix se ha encargado de suministrar la mayoría de máquinas del gimnasio.
La compañía ha destinado una inversión de dos millones de euros para la construcción y equipamiento de su gimnasio más emblemático. "Manso es, de entre los 17 gimnasios que tiene Viva Gym, aquel en el que mejor hemos implementado el valor de marca", al hacer "un centro accesible al público por un precio de 19,9 euros, sin contrato de permanencia, con una oferta de cien clases dirigidas a la semana y un amplio horario de apertura", ha enfatizado Del Río.
En 2016, la facturación alcanzó los 15 millones de euros y cerró con alrededor de 72.000 abonados, una cifra que planean aumentar hasta los 85.000 al cierre 2017. El ejecutivo prevé cerrar el año con un incremento de la facturación del 25%, hasta 18,7 millones de euros.
El accionariado de Viva Gym está compuesto por la sociedad de capital de riesgo Bridges Ventures, que en 2015 entró en el capital de la compañía con una inversión de 9,5 millones de euros y cuenta con el 51% de las acciones de la cadena. En el capital social también está el equipo directivo y otros accionistas minoritarios, con un 14%, y el 35% restante está en manos de Vivagym Holdings, controlado por la familia Singh, que ha invertido 16 millones de euros en el proyecto.