Fitness

Solinca echa el candado al ‘fitness’ español en Portugal: doblará tamaño hasta 2022 con 70 gimnasios

El grupo de gimnasios controlado por Sonae Capital descarta su expansión internacional para centrarse en crecer en el mercado luso, donde opera con las marcas Solinca, ONE y Pump Fitness. La compañía aspira a ser el mayor operador del país, donde facturó 36,4 millones de euros en 2018.

P. López

12 jun 2019 - 05:00

Solinca Health & Fitness creció un54% en 2018 y facturó 36,4 millones de euros

 

 

Numerosas cadenas españolas de fitness han visto a Portugal como el mercado natural en el que iniciar su expansión internacional, pero sus competidores lusos no han recorrido el camino contrario para hacerse fuertes en España. Y la idea es que, de momento, no den ese paso. O al menos esa es la intención de Solinca Health & Fitness, uno de los principales operadores del mercado portugués, donde opera 35 gimnasios y en 2018 obtuvo una facturación de 36,4 millones de euros en 2018.

 

“En los tres próximos años el objetivo es convertirnos en el operador líder por volumen de negocio y doblar nuestro tamaño en Portugal”, explica a Palco23 José Teixeira, director de experiencia del cliente de la compañía. En esta hoja de ruta se plantea el crecimiento con las tres líneas de negocio que tiene la empresa controlada por Sonae Capital: Solinca, Pump y la premium ONE.

 

La principal es Solinca, con la que opera veinte instalaciones situadas entre el segmento medio. No obstante, con la que más creció el último año fue Pump, que es la cadena de gimnasios de bajo coste que adquirió a principios de 2018 por 8,4 millones de euros. La incorporación de sus ocho instalaciones favoreció un alza del negocio del 54% interanual.

 

 

 

 

También se adquirió el Club Lagoas Park de Lisboa, que modificó su imagen corporativa para operar como ONE. En total, el año pasado la empresa invirtió 12,6 millones en adquirir y mejorar instalaciones. Tras la firma de estas operaciones, la cadena cerró el ejercicio con treinta instalaciones, a las que se han sumado una apertura de Pump y la compra de cuatro centros Urban Fit Clubs en Oporto, que se hará efectiva a lo largo de este mes.

 

Como resultado, la compañía realizará el rebranding de estos centros, que operarán bajo la firma Pump y elevarán su red hasta catorce instalaciones. “Prevemos crecer de manera orgánica y mediante adquisiciones; sólo entraríamos en España si hubiera una operación muy clara, pero no tenemos el foco puesto ahí, sino en contar con 70 gimnasios en 2022”, asegura Teixeira. En la actualidad, la compañía da servicio a 89.113 abonados, de modo que la previsión es aumentar esa cifra hasta 180.000 clientes en el próximo trienio.

 

Esta expansión se realizará siguiendo una estrategia multisegmento “para consolidar nuestra presencia en el sector del estilo de vida”, según se detalla en la memoria anual de Sonae Capital. “Prevemos mantener el plan de expansión en los próximos trimestres aumentando el número de clubes en cada segmento”, añade el fondo.

 

 

 

 

En Portugal, la compañía rivaliza con Fitness Hut en el segmento low cost, Holmes Place en la categoría de clubes de alta gama y con las cadenas españolas que operan en régimen de concesión administrativa, como GO fit, que tiene dos complejos, Forus, con tres instalaciones, y Supera está construyendo seis centros en ese país. Solinca no gestiona centros municipales, pero está posicionada en el mismo segmento medio en el que operan las cadenas españolas que han entrado en ese mercado.

 

La industria del fitness en Portugal movió 311,3 millones de dólares (275,2 millones de euros) en 2018, según el último Global Report elaborado por Ihrsa, una organización que aglutina a empresas del sector. Fue el décimo octavo mercado europeo en términos de facturación. Según el estudio, en el país operan 1.000 instalaciones deportivas que dan servicio a 596.834 personas, lo que corresponde al 5,8% de la población.