Fitness

MoveUp se hace fuerte en Madrid con un gimnasio en un antiguo Basic-Fit

La cadena de centros deportivos prepara tres aperturas más hasta 2021, dos de ellas fuera de la Comunidad de Madrid, para lo que se ha asegurado 1,5 millones de euros de inversión por parte de sus accionistas.

P. López

25 nov 2019 - 04:59

MoveUp abrirá su segundo gimnasio en abril de 2020, y prepara tres aperturas más en España hasta 2021

 

 

MoveUp ha decidido dar el pistoletazo de salida a un su primera fase de expansión en España dos años después de echar a andar en el sector del fitness. La compañía, que debutó en la industria con la compra de un Fitness Place, ha vuelto a adquirir un local que el que en su día operó un gimnasio. Según ha podido saber Palco23, la cadena ha comprado el inmueble en que Basic-Fit explotó un club que cerró hace más de un año.


Se trata del centro que tenía en el número 65 de la calle Antonio López, en el distrito de Carabanchel. Fue una instalación de 1.550 metros cuadrados que Basic-Fit heredó de Fitness First, y que cerró porque no la consideraba estratégica. Ahora, MoveUp toma el testigo e invertirá más de un millón de euros en reformar el local, implantar su imagen corporativa, adquirir las máquinas de entrenamiento y habilitar un párking de 1.500 metros cuadrados en un espacio que Basic-Fit tenía desocupado.


La previsión es que el gimnasio se inaugure a partir de abril de 2020 y dé servicio a 1.600 abonados. El local contará con zona de fitness, dos salas para actividades dirigidas y una más de ciclo-indoor, siguiendo el modelo de club de proximidad de MoveUp. La cadena dirigida por Joaquín Iribarren ha definido un concepto de gimnasio que prevé replicar primero en Madrid, y más adelante en otras regiones de España.
 
 

 


“Prevemos abrir un tercer club en otoño de 2020 y, de cara a 2021, dos más fuera de la Comunidad de Madrid”, explica a este diario el fundador y director general. El ejecutivo, que descarta franquiciar el modelo para expandirse, espera seguir comprando o alquilando inmuebles donde operaron gimnasios, una fórmula que permite “agilizar los plazos de apertura”, apunta Iribarren.


Por el momento no contemplan su expansión hacia Barcelona, una plaza que considera lo suficientemente concurrida como para abrir un MoveUp. Lo que sí está claro es que los clubes que abrirá estarán equipados por Technogym, fabricante con el que ha firmado un acuerdo para proveer las máquinas de sus próximos proyectos.


El plan de crecimiento no sería posible de no ser por los inversores de MoveUp, cuya estructura accionarial ha cambiado en el último año. El family office vasco que en 2018 disponía de un 78% del capital ha diluido su participación para dar entrada a otro grupo inversor, como ya adelantó este diario. Ahora, el accionista principal controla un 55%, el nuevo inversor ostenta un 23% del accionariado e Iribarren dispone de un 22%. Se desconoce su identidad.

“Para realizar las próximas aperturas completaremos una ampliación de capital de 1,5 millones de euros a lo largo de 2020”, explica el director general.  La facturación de la compañía no ha trascendido, pero el directivo afirma que en 2019 se doblarán las ventas respecto  2018, y la previsión es que en 2020 se crezca alrededor de un 25%.