Fitness

La licitación deportiva, entre las más lastradas por el Covid-19: firma su peor trimestre en tres años

La patronal de la construcción advierte de que el impacto de la declaración del estado de alarma es aún más acusado en el deporte que en otros sectores. La inversión en complejos deportivos municipales ha caído un 44,5% interanual, por el 32,3% de descenso del total de obras públicas.

P. López

30 abr 2020 - 05:00

La licitación deportiva, entre las más lastradas por el Covid-19: firma su peor trimestre en cuatro años

 

 

La economía española se ha parado por el coronavirus, e incluso el sector de la construcción, que genera el 14% de la riqueza del país, ha pulsado el botón de pausa. También lo ha hecho la Administración, que ha dejado de licitar proyectos de obra pública, como colegios, hospitales, carreteras y, también, centros deportivos. Prueba de ello es que la licitación deportiva cerró en marzo su peor trimestre desde 2017. Según datos de la patronal de la construcción Seopan, sólo se sacaron a concurso proyectos por 95,6 millones de euros. Hay que remontarse al primer trimestre de 2017 para encontrar una cifra inferior.

 

La caída del 44,5% interanual en la inversión pública en complejos deportivos responde al freno de la actividad económica por el Covid-19. Así lo apuntan desde Seopan, al señalar que estas cifras evidencian una sustancial caída del volumen licitado como consecuencia del decreto de estado de alarma y la actual crisis sanitaria. La incógnita es cuánto durará la situación y cuáles serán los daños colaterales en un país que va a endeudarse para mitigar los efectos de la crisis económica derivada del coronavirus.

 

Fue durante la presidencia de Mariano Rajoy cuando el Administración intensificó las medidas de ajuste para reducir el déficit del país y la licitación deportiva tocó mínimos, con 158 millones en todo 2013. Los datos del primer trimestre de 2020 arrojan cifras de licitación que recuerdan a los de la época de crisis económica. Sin ir más lejos, el peor trimestre de la serie histórica fue el periodo de enero a marzo de 2012, cuando sólo se sacaron a concurso proyectos por 15,4 millones de euros.

 

 

 

 

Si bien el dato del primer trimestre de 2020 es muy superior al de 2012, también lo es la gravedad de la situación económica. El Gobierno decretó el confinamiento el 14 de marzo, pero durante las dos primeras semanas del mes la Administración redujo su actividad y, por ende, congeló los proyectos que tenía en cartera para priorizar la gestión de la emergencia sanitaria. Y, pese a ello, la licitación de obra sanitaria cayó un 53% interanual.

 

Antes de la llegada del Covid-19 a España, se estimaba que la Administración reactivara a licitación al haber pasado más de medio año de la celebración de elecciones municipales que dieron lugar a los equipos de Gobierno encargados de sacar a concurso este tipo de proyectos. Sin embargo, no ha sido así. Los gestores de instalaciones deportivas municipales asumen que, con el parón de la actividad, se publicarán menos proyectos en el Boletín Oficial del Estado (BOE).

 

Madrid, Barcelona y L’Hospitalet de Llobregat son algunas de las ciudades que preveían movimiento en este sentido. La capital española anunció que sacaría a concurso la explotación de once centros deportivos municipales para paliar el déficit de instalaciones deportivas en la ciudad. Ahora bien, la idea era que el Ayuntamiento no asumiera los costes de construcción de estos equipamientos, sino que derivara la obra y la gestión a una empresa especializada que lo operara en régimen de concesión administrativa.

 

El modelo de colaboración público-privada es el que se utiliza en Barcelona, donde hasta 2020 el Ayuntamiento esperaba sacar a concurso la gestión de siete gimnasios municipales. En el caso de L’Hospitalet de Llobregat, que es la ciudad española con mayor densidad poblacional, la idea era adjudicar diez macrocomplejos deportivos desde finales de 2019 y durante 2020. A diferencia de Barcelona, en este municipio es el consistorio el que suele asumir las inversiones en equipamientos, por lo que se espera que los proyectos se demoren hasta alcanzar la nueva normalidad post Covid-19.