Fitness

Formentor Capital compra el 84% de BeOne e inyecta 10 millones para su expansión

La firma de inversión se ha hecho con el control de tres empresas participadas por Atlas Capital, la gestora de fondos que en 2009 se hizo con el control de la cadena de gimnasios. Un ex de Torreal, Bernardino Díaz, asume la presidencia de la compañía, a la que apoyará en su expansión.

Patricia López

2 oct 2018 - 05:00

Serviocio-BeOne dio entrada al fondo Atlas Capital en 2009 para impulsar su expansión

 

 

Serviocio-BeOne cambia de manos. La gestora de fondos Atlas Capital ha vendido la totalidad de sus acciones de la cadena gallega de centros deportivos, el 84,1%, a Formentor Capital. Según ha podido saber Palco23, a esta adquisición le seguirá una inyección de capital de aproximadamente diez millones de euros que se realizará en distintas fases, con el objetivo de aportar el pulmón financiero necesario para la expansión de la compañía.

 

La operación se ha gestado durante los últimos meses, coincidiendo con la finalización del ciclo inversor de Atlas Capital. Esta gestora de fondos entró en Serviocio en 2009 para financiar su crecimiento. Según apuntan fuentes de la cadena “su capacidad de inversión estaba agotada”, lo que había provocado que en los últimos meses fuera la misma cadena la que financiaba sus operaciones a través de fondos propios y deuda.

 

Esta operación supone la entrada en el mercado español de Formentor Capital, un nuevo player liderado por un ex de Torreal, Bernardino Díaz, que ha asumido la presidencia de BeOne tomando el testigo de Pablo Cervera. Junto a él estará Jose Ramón de Pablo, ex de Atlas Capital, y que seguirá como consejero. Junto a Formentor, en el capital seguirán los dos socios fundadores, Roberto Ramos y José Amado, que controlan un 7,95% cada uno.

 

 

 

 

“En torno a diez millones se destinarán a nuestra expansión”, explica a este diario el socio fundador y director general de la cadena, Roberto Ramos. Entre los inversores internacionales que han inyectado 120 millones en Formentor está el fondo suizo Montana, que ha aportado aproximadamente 40 millones de euros. Esta firma es la que ha mantenido conversaciones con BeOne que, consciente de que Atlas había completado su ticket inversor, planeaba recibir apoyo económico del fondo suizo.

 

Ahora, BeOne emprende una nueva etapa con el apoyo de Formentor. “El plan es a cuatro años, pero estará más o menos tiempo en función de los resultados y de si se cumple el plan de expansión”, señalan fuentes cercanas a la operación. La compañía gallega no planea hacer grandes cambios en su plan de crecimiento, ya que en los últimos meses ha definido sus perspectivas a sabiendas de la entrada del nuevo accionista. “Todos los planes que teníamos estaban vinculados a esta operación”, señalan.

 

Ramos afirma que pese a la llegada del fondo no habrá cambios de calado en la directiva. “Seguiremos siendo las mismas caras, y la entrada de Bernardino va a ser buena porque tiene mucha experiencia en el sector. Seguiremos con la misma hoja de ruta”, afirma. Este plan contempla la firma de varias operaciones corporativas en las que la dirección lleva meses trabajando.

 

 

 

 

La adquisición de BeOne por parte de Formentor se engloba dentro de una operación corporativa de mayor calado, en la que el fondo ha adquirido de una tacada la cartera de participadas de Atlas Capital. Junto a la cadena de gimnasios, están Adea y el proveedor de servicios audiovisuales VaV Group. Según ha informado Expansión, la gestora de capital riesgo ha captado 120 millones para invertir en España.

 

BeOne ha sido una de las empresas de la industria del fitness en España más activas a la hora de salir de compras. El año pasado adquirió el 100% de Aquafit, una compañía con la que competía en el segmento concesional de Galicia. Anteriormente se hizo con el control de un club independiente en Madrid.

 

Serviocio cerró 2017 con una facturación de 26,6 millones de euros, lo que supuso un crecimiento de casi el 21% respecto al año anterior, según figura en las cuentas depositadas en el Registro Mercantil. La compañía se quedó al borde de los beneficios, con un resultado negativo de 854.000 euros.

 

 

 

 

Según recoge la empresa en su memoria anual, “para los próximos ejercicios se espera que el beneficio aumente como consecuencia del impacto de las medidas comerciales y operativas implementadas y por el retorno de las inversiones llevadas a cabo en 2017”, con la compra de Aquafit y las mejoras en el Beone de Boadilla del Monte (Madrid) y de Monterreal de Baiona (Galicia). La compañía aumentó un 83% la deuda con la banca a largo plazo, hasta 17,1 millones de euros.

 

La cadena da servicio a más de 168.000 abonados y opera 35 clubes que dan trabajo a 1.238 personas, una cifra que confirma a BeOne como la empresa que más empleo genera en el sector del fitness en España. A esta partida destinó 15,8 millones de euros en 2017, un 1,7% más que en 2016.