Fitness

El fitness reabre en Cataluña con aforo al límite y reservas previas colapsadas

El sector considera que un 30 % de aforo es insuficiente y que las pérdidas continúan, pero celebra que no se prolongue más el cierre.

M.L-E

24 nov 2020 - 04:27

 

 

Los gimnasios reabrieron ayer en Cataluña con el aforo y las reservas previas al límite. Después de casi cuatro semanas de cierre obligado, los centros deportivos interiores pudieron abrir al 30%, una cifra “insuficiente”, según varios operadores del sector del sector, pues "un 50% permite sobrevivir". Colas, nuevas altas y sistemás de reserva colapsados fueron la tónica durante todo el día.

 

“Una cosa es que podamos abrir y que la gente vaya a los gimnasios, y la es otra que este aforo cubra los servicios y los costes”, señala Iolanda Latorre, gerente de la Asociación Catalana de Clubes de Fitness (Adecaf) a Palco23. “Estamos contentos de poder trabajar, pero no estamos cubriendo y las pérdidas continúan, pero apostamos por colaborar y trabajar”, reitera la directiva de Adecaf, que calculó pérdidas de 48 millones de euros.

 

“Los clientes lo han recibido muy bien: los que se han mantenido necesitan la actividad física”, analiza el presidente de Dreamfit, Rafael Cecilio. “La gente no entiende que los vestuarios estén cerrados, que es donde hay más higiene, pero están muy satisfechos”, añade. “Hemos ido cubriendo el 30% del aforo, pero es muy poco; el 50% de aforo te permite sobrevivir”, sentencia y recuerda que “si los operadores hemos conservado un 60% de los clientes, este aforo significa que sólo la mitad puede entrenar”. “Habrá horas en que la gente tendrá que esperar, ya pasó en la última reapertura: en algunos centros la gente tenía que esperar diez minutos”, explica.

 

 

 

“Ayer hubo la demanda de las casi cuatro semanas de cierre y de un lunes, pero se irá tranquilizando por la estación del año, ya que no es una temporada alta de afluencia a los gimnasios”, prevé Juan del Rio, consejero delegado de Vivagym. “Nosotros ya manejábamos la cita previa antes, por lo que ha sido más fácil de gestionar”, subraya.

 

“Los clientes tenían ganas de volver a sentir la experiencia de estar en su gimnasio”, señala José Antonio Sevilla, director general de Altafit. “Llevamos todo el fin de semana comunicando la cita previa a través de nuestra aplicación, la mayoría lo ha asimilado correctamente, pero alguno no se ha enterado y le hemos tenido que ayudar en la recepción”, comenta.

 

“Lo peor es la no utilización de vestuarios; no entendemos esa medida, el aforo está limitado, las duchas son individuales, están ventiladas y la gente está poco tiempo en ellos, la mayoría es gente de proximidad”, critica, y recuerda que “con esta medida se perjudica a los usuarios que tienen que ir a trabajar tras el gimnasio”. 

 

Asimismo, los gimnasios de la cadena Dir registraron varios locales con la ocupación al máximo a primera hora de la mañana después de tener numerosas reservas y tuvieron algunas nuevas altas.

 

Otro operador del sector explica que “ayer ya teníamos muchos sitios con las reservas llenas”. “Con un 30% los números no salen; además, el toque de queda afecta a muchas personas que quieren entrenar a partir de las ocho de la noche, pero es mejor tener abierto que nada”, remarca.

 

 

 

“Los aforos nos afectan relativamente poco porque nuestro método de trabajo implica que no se supere el 30%”, explica Brais González, director de operaciones y proyectos de Distrito Estudio. “Cada usuario tiene casi diez metros cuadrados en una sala de 200 metros cuadrados, por lo que las adaptaciones han sido mínimas, pero hemos tenido que separar las clases para dar un tiempo de limpieza, por lo que hemos tenido que celebrar una menos”, comenta.

 

“La reapertura ha sido prácticamente volver a la normalidad de antes del cierre; cuando abrimos después del confinamiento, en el primer mes recuperamos el 100% de los socios y hasta este cierre, estábamos creciendo por encima del año anterior”, añade.

 

“Tampoco hemos visto mucha diferencia, nos quedamos por debajo del aforo por nuestra manera de trabajar”, subraya Sano Center. “La acogida ha sido muy buena, siguen los mismos grupos de antes del cierre y trabajamos con grupos burbuja”, asegura y recuerda que “durante estas semanas de cierre hemos dado servicio con nuestra plataforma online y con algunos entrenamientos outdoor”.

 

Hasta el 6 de diciembre, el aforo está limitado al 30% en espacios cerrados y hay que pedir cita previa. Los espacios abiertos pueden abrir al 50%, hay que mantener una distancia de seguridad de dos metros y la mascarilla sólo se puede quitar cuando se esté realizando la actividad física. Además, los vestuarios están cerrados excepto para aquellas personas que hagan actividades acuáticas.