Fitness

DreamFit pone rumbo a los 25 millones de euros con récord de aperturas en 2019

La cadena de gimnasios low cost espera crecer en torno a un 20% durante este año gracias al estreno de ocho centros. En paralelo, ha empezado a trabajar en un eje estratégico centrado en dar servicio a las personas que no están abonadas.

Patricia López

16 ene 2019 - 04:58

DreamFit cerró 2018 con una facturación de 20,3 millones de euros, un 14% más que el año anterior

 

 

DreamFit ha dado el pistoletazo de salida al año más intenso de su historia en volumen de aperturas. La cadena de gimnasios low cost, que el año pasado no inauguró ningún centro, ha asentado las bases de su plan de expansión a corto plazo con ocho aperturas en el horizonte. La consolidación de los clubes inaugurados en 2017 y la puesta en marcha de estos proyectos elevarán la facturación de la compañía por encima de los 24 millones de euros en 2019.

 

“Es una cifra que prevemos conseguir gracias a los clubes que abriremos este año”, explica Rafael Cecilio, presidente y máximo accionista, a Palco23. La compañía cerró el último ejercicio con unas ventas de 20,3 millones de euros, un 14% más que en 2017, una tasa que este año confía en superar si cumple sus previsiones. De hacerlo, facturaría aproximadamente un 20% más, ya que en función del calendario de aperturas podría alcanzar los 25 millones de euros en ingresos.

 

El directivo asegura que no echará el freno a la expansión cuando se acometan las ocho aperturas previstas. “Si bien no tenemos prisa en crecer, no podemos centrarnos sólo en abrir los proyectos que tenemos en cartera; tenemos que seguir buscando locales”, afirma, al reconocer que están negociando por nuevos emplazamientos.

 

 

 

 

Cecilio asegura que no es tarea sencilla dar con las ubicaciones acertadas, porque DreamFit apuesta por abrir centros de como mínimo 3.000 metros cuadrados. “No hay tanta oferta de locales de ese tamaño, y el mercado inmobiliario se está encareciendo”, señala.

 

El primer club que inaugurará este año será el de Logroño, que subirá la persiana en febrero en el Centro Comercial Parque Rioja. El próximo será en Moratalaz (Madrid), un proyecto en el que DreamFit está invirtiendo tres millones de euros. Le seguirán el de Las Palmas de Gran Canaria y el de Sant Boi de Llobregat (Barcelona), que se inaugurará a principios de mayo.

 

De cara al segundo trimestre se realizarán las aperturas de Gijón, en el centro comercial Opción, ubicado en el barrio de El Coto, y el de Barakaldo (Bilbao), en el centro comercial Los Fueros. Los proyectos de Coslada y Getafe se inaugurarán o bien a finales de 2019 o de cara a principios del próximo año.

 

El centro deportivo de Coslada es una de las obras más ambiciosas de DreamFit desde su fundación en 2010. Con una inversión estimada de 7,5 millones de euros, este macrocomplejo de 4.000 metros cuadrados contará con doce pistas de pádel (ocho de ellas cubiertas), un campo de fútbol once, otro de pequeñas dimensiones y un párking subterráneo con 400 plazas. Como ya adelantó Palco23, esta instalación contará con escuela de fútbol que “se volcará especialmente con el fútbol femenino”, detalla.

 

 

 

 

 

Otra de las líneas clave del plan estratégico de la compañía es dar servicio las personas que no están abonadas. “Si queremos crecer como sector y ampliar el pastel, debemos abarcar a aquellos que no acuden al gimnasio por falta de tiempo o por distintos motivos. Es importante que la gente esté activa, independientemente de si está abonada o no”, sostiene. Se trata de una línea estratégica en la que la compañía está empezando a trabajar, pero de momento no ha definido qué tipo de acciones realizará.

 

El crecimiento de la cadena, que en ocho años ha formado una red de catorce instalaciones, ha obligado a la empresa a profesionalizar y reforzar su estructura. A la división técnica, de operaciones y de licitaciones se sumó la dirección general con el fichaje de Marcos Verburgh en 2016. En los últimos años la compañía ha creado la dirección de happiness, una iniciativa con el que la compañía ha dado una vuelta al departamento de recursos humanos.

 

 

 

 

Así mismo, se ha creado la división de sistemas y un departamento de tecnología que depende de la división técnica, liderada por Gisel Swedzky. “Si queremos controlar la cadena como cuando teníamos cinco centros, debemos reforzar la estructura para seguir controlándola cuando tengamos treinta instalaciones”, afirma Cecilio. De ahí que la idea durante los próximos años sea “fichar a dos o tres personas más para las áreas de licitaciones y técnica.

 

Con catorce instalaciones en España, la principal área de influencia de es Madrid, donde opera seis instalaciones. También tiene presencia en la Comunidad Valenciana, con instalaciones en Alicante, Castellón y Valencia, Barcelona, Oviedo, Segovia, Sevilla y Zaragoza.