DiR vuelve a crecer fuera de Barcelona: suma un nuevo franquiciado y abre un club YogaOne

DiR continúa creciendo con el modelo de franquicia como aliado. La cadena catalana, que creó sus primeros clubes operados por terceros en 2016, ha incorporado un nuevo gimnasio a su red, según ha podido saber Palco23. Se trata de Gimbe, el centro deportivo más antiguo de Manresa, que se integrará en la red de DiR a principios de julio.

El contrato ya está firmado y durante las próximas semanas se realizarán mejoras, aunque desde DiR apuntan a este diario que desconocen el volumen total de la inversión que se realizará. Lo que sí confirman es que aportaran nuevos sistemas de gestión en todos los departamentos, se desarrollará el área de entrenamiento personal y se incorporarán actividades dirigidas propias de DiR.

La instalación tiene 2.800 metros cuadrados distribuidos entre un sótano y tres plantas. A finales de 2010, Gimbe reinauguró el centro tras realizar una inversión de 2,5 millones de euros. En la actualidad cuenta con sala de fitness, un box para entrenamiento funcional, espacio para actividades dirigidas, piscina, spa, solárium, ludoteca, sala de fisioterapia y cafetería.

DiR cuenta con una red de más de cincuenta clubes, entre su marca original, YogaOne, BDiR y Jambox

Como parte del acuerdo con DiR, los usuarios de Gimbe podrán acceder a cualquiera de los 52 gimnasios de su socio pagando una entrada puntual a precio reducido, y los clientes de DiR podrán hacer lo propio en el club manresano. “Es un centro histórico con unas instalaciones increíbles; aprovecharemos para crear sinergias entre las dos compañías”, explica a este diario la directora de expansión, Silvia Canela.

De esta manera, la compañía fundada por Ramón Canela vuelve a confiar en el sistema de franquicias para crecer, y en lugar de hacerlo con la cadena de clubes de proximidad BDiR, lo hace con DiR, su marca original de gimnasios de gran tamaño. Es la misma fórmula que utilizó cuando incorporó el club Fitness Paradise de Mataró.

Hasta entonces, la compañía sí que había sumado clubes independientes a su red como centros franquiciados, como ocurrió con La Tribu de Premià, que ahora es un BDiR Maresme, el Punt Centre Fitness de Sabadell, ahora BDiR Sabadell, o el gimnasio del Golf Costa Daurada, que operará como BDiR Tarragona en los próximos meses. Eso sí, todos han asumido la marca de centros de menor tamaño y de proximidad.

La cadena catalana de gimnasios facturó 46 millones de euros en 2018

La línea de negocio con la que más centros franquiciados ha abierto ha sido YogaOne, que a las tres aperturas previstas en Barcelona y alrededores se sumará en agosto una en Vilanova i la Geltrú (Barcelona). De cumplir las previsiones, esta cadena de estudios de yoga contará con 29 instalaciones en septiembre.

En paralelo, la cadena está a una semana de finalizar el plazo que de dos meses que se dio para levantar una ronda de crowdfunding de 440.000 euros. Con el 50% del objetivo captado, es probable que la compañía amplíe el plazo para que puedan sumarse nuevos inversores que aporten los fondos necesarios para la apertura de otro BDiR en el centro de Barcelona.

A través de todas sus líneas de negocio, la cadena fundada en 1979 facturó 46 millones de euros en 2018, y es uno de los principales operadores de gimnasios en Cataluña. Su principal área de influencia es Barcelona, donde ha centrado su operativa en los últimos cuarenta años, aunque en los últimos meses ha logrado ganar terreno fuera de la capital catalana.