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DiR activa su lado más ‘zen’ con la apertura de tres YogaOne en Barcelona

La cadena catalana de gimnasios inaugurará a principios año dos centros en la zona alta de la capital y otro más cerca de la Sagrada Familia.

P. López

2 ene 2018 - 04:57

DiR activa su lado más ‘zen’ con la apertura de tres YogaOne en Barcelona

 

 

DiR baja revoluciones y confía en el equilibrio cuerpo-mente para su arranque de 2018. La cadena catalana de gimnasios inaugurará tres nuevos centros YogaOne en Barcelona durante las próximas semanas. Según ha podido saber Palco23, los nuevos estudios se ubicarán en los barrios de Sarrià y Sant Gervasi, en la zona alta de la capital catalana, y cerca de la Sagrada Familia, en el distrito del Eixample.

 

Este último abrirá en el número 254 de la calle Cartagena, a una manzana de un club de Claror y de un Duet Fit. Esta instalación contará con una sala de yoga de más de 120 metros cuadrados y otra de cardio. En cuanto a los otros dos centros, el primero estará en el número 13 de la calle Caponata y, además de contar con sala de entrenamiento cardiovascular, tendrá dos salas de yoga de 100 metros cuadrados. El otro se instalará en la Plaza Molina, en una instalación que de más de 200 metros cuadrados que contará con dos salas de yoga.

 

Estos tres centros se sumarán a los cinco que la cadena ya tiene operativos en Barcelona, Sabadell y Tarragona, y al que se añadirá el YogaOne Marina, cuya apertura está prevista para el ocho de enero. Si se cumplen las previsiones, DiR cerrará el primer mes del año con nueve instalaciones de esta marca. La idea es seguir creciendo, motivo por el que la compañía está en búsqueda de franquiciados, de técnicos de yoga e impartiendo formaciones para agilizar la expansión de la cadena.

 

 

 

 

YogaOne, junto a los gimnasios de proximidad BDiR, son las dos marcas en las que la compañía ha confiado su crecimiento. Mientras que la primera suele abrir de la mano de franquiciados, la segunda lo hace con capital propio de la empresa y el apoyo de inversores particulares que participan en rondas de financiación a cambio de convertirse en accionistas minoritarios. Para los próximos proyectos, la empresa no ha confirmado si serán propios o estarán gestionados por terceros.

 

Las condiciones que exige a los socios interesados en adquirir la licencia de la marca YogaOne son una inversión mínima de 65.000 euros en la que el pago del canon no está incluido y la compra o el alquiler de un local de al menos 200 metros cuadrados que cuente con, como mínimo, una sala diáfana. Bajo este modelo, la compañía ha logrado abrir tres estudios gestionados por terceros en el barrio barcelonés de Gracia, Tarragona y Sabadell, que han sido los últimos en subir la persiana.

 

DiR cerrará 2017 con 24 instalaciones operativas, 17 de las que son gimnasios tradicionales de dimensiones más elevadas, dos son clubes de proximidad y las cinco restantes son estudios de yoga. La empresa no ha dado a conocer sus resultados económicos de 2016, pero fuentes próximas a la dirección confirman que sigue una evolución alcista en su cifra de negocio, que en 2015 superó los 40 millones de euros.