Fitness

La cadena Basic-Fit centrará en Madrid la apertura de diez gimnasios durante 2016

M. Menchén

11 feb 2016 - 05:00

Basic-Fit es uno de los principales operadores europeos de la industria del fitness, y en España tiene claro que su proyecto pasa ahora por consolidar la plaza en Madrid. Por eso, la compañía ha decidido que las diez aperturas que aproximadamente prevé realizar durante 2016 en el país se concentrarán en la capital española y su área de influencia. En la actualidad, la cadena cuenta con 26 centros repartidos por todo el territorio y factura 15 millones de euros.

 

Fran Fragoso, director general de la filial española, explica a Palco23 que la decisión de centrar las aperturas en una misma zona responde al objetivo de aprovechar "sinergias en la inversión en marketing". El ejecutivo recuerda de su paso por Starbucks (trabajó para el grupo Vips, licenciatario en España de la cadena) que concentrar la expansión de un modelo en una o dos ciudades tiene varias ventajas: "cuesta mucho menos hacer una marca y crearla, el marketing que generas en la ciudad cada vez es menos costoso y llegas mucho antes a tus objetivos que si vas a distintas ciudades".

 

Basic Fit 650
Basic-Fit equipa sus centros con máquinas de Matrix, que las diseña con el color naranja característico de la cadena.

 

Basic-Fit también alude a cuestiones operativas, como el hecho de que estar concentrado en un corto radio de distancia permite "estar más cerca de la calidad de servicio" que buscan dar, además de que no les obliga a duplicar estructura para supervisar el día a día del negocio. "Si abres en distintas ciudades a la vez, no puedes dar mayor calidad al crecimiento o seguridad en el desarrollo formativo de las personas", opina.

 

Fragoso considera que "conquistar Madrid" en términos de cubrir la demanda se conseguirá cuando dispongan de entre 25 o 30 gimnasios, algo que darán por cumplido este año, ya que en la actualidad hay 18 instalaciones. "Es la ciudad de España donde más gente vive y aún hay potencial para crecer en zonas que no son estrictamente el centro", explica. En este punto, asegura que "estamos consiguiendo crear una marca con la que todo el mundo se siente identificado, ya sea en una zona popular de Madrid o en Goya".

 

En este sentido, el directivo considera que todos los proyectos no deben ser nuevas aperturas y también pueden plantearse adquisiciones. "Estamos encantados con comprar cosas buenas; este año hemos comprado dos gimnasios en Madrid y en estos casos siempre respetamos los contratos que haya en vigor y los nuevos socios se adaptan a nuestra estructura", apunta sobre sus cuotas de 19,99 euros al mes con un año de permanencia o 25,99 si se quiere eludir esta obligación.

 

A partir de 2017, se plantearán abrir en otras ciudades españolas, aunque por el momento prefiere no desvelar dónde: "hay que analizar el mercado y ver en qué zona merece la pena expandirnos", apunta Fragoso, quien recuerda que los ocho centros que ya tienen fuera de Madrid son heredados de la adquisición de Fitness First en mayo de 2011 (dos en Bilbao, dos en Valencia y sendos en Gijón, Córdoba, Vitoria y Guadalajara).

 

Basic Fit recurso 650
Basic-Fit tiene un acuerdo con Les Mills para las clases dirigidas.

 

Basic-Fit acostumbra a operar en instalaciones de entre 1.300 metros y 2.200 metros cuadrados, que exigen una importante inversión respecto a otras cadenas que operan en el mismo segmento. Ello, debido a que la cadena rechaza crecer bajo el formato de franquicias. "Pertenecer a una gran multinacional tiene cosas positivas, como disponer de más de 350 gimnasios en Europa. Toda esta marca te da credibilidad a la hora de lograr locales y rapidez a la hora de negociar", opina.

 

La inversión de la compañía supera los 30 millones de euros desde su entrada en España, lo que en una primera fase ha generado importantes pérdidas fruto de la amortización de las inversiones y los costes de reestructuración asociados a la citada compra, ya que posteriormente se redujo a la mitad la red. Éstas se han ido compensando mediante reducciones de capital, como consta en el Registro Mercantil, gracias al apoyo de la matriz, que en 2013 fue adquirida por el grupo de capital riesgo 3i tras una inversión de 110 millones de euros.

 

Uno de los grandes retos del sector es la aplicación de la tecnología, algo que Fragoso considera que "está aquí para quedarse y evolucionar; las máquinas de un gimnasio evolucionan y las de ahora no tienen nada que ver". A día de hoy, Basic-Fit ya utiliza las oportunidades de la conectividad para ofrecer sesiones virtuales, aunque también ofrecen clases dirigidas de forma presencial. "Si hay algo que diferencia a España del resto de Europa es la fuerte importancia de la clase colectiva; en Europa no ves a más de 7-8 personas en una clase colectiva, mientras que aquí hay mucho baile como Zumba y un importante peso del cycling".