Mammut cambia de manos: el fondo Telmos Capital compra la empresa

Mammut empieza el año cambiando de manos. La compañía de moda especializada en outdoor, que hasta ahora pertenecía al grupo suizo Conzzeta, ha sido adquirida por el fondo de inversión británico Telmos Capital, según ha explicado la empresa en un comunicado. El importe de la transacción no ha trascendido.

La operación está sujeta a la aprobación de las autoridades competentes, y se prevé que se complete a mediados de año. La venta de Mammut se enmarca en el plan de Conzzeta de centrarse en su actividad de procesamiento de chapa, para lo que venderá todos los demás negocios. El grupo ya vendió Schmid Rhyner a principios de 2020, y FoamPartner a finales de marzo de este año.

Con la venta de Mammut, el ajuste de la cartera de marcas de Conzzeta ha concluido. “El sólido posicionamiento de Mammut la posiciona como marca líder a escala mundial de actividades al aire libre, así como el considerable progreso que ha realizado la marca en los últimos años en la revisión de su gama de productos, la digitalización de su modelo de negocio y la optimización de la estructura de costes”, ha señalado el grupo.

Conzzeta ha vendido Mammut como parte de su plan estratégico para centrarse en su negocio de procesamiento de chapa

Conzzeta lleva cinco años inmersa en un plan de ajuste. El grupo comenzó con la venta de su negocio de automatización y culminará su reestructuración con la venta de Mammut. En mayo, la compañía cambiará también de nombre y pasará a ser conocida como Bystronic en bolsa.

“Tengo muchas ganas de trabajar con Telemos para ampliar la posición de liderazgo de Mammut como marca premium suiza a escala internacional”, ha señalado Oliver Pabst, consejero delegado de la empresa.

Mammut fue fundado en 1862 como un fabricante especializado en cuerdas en Dintikon (Suiza). En la actualidad, la empresa, que pasó a manos de Conzzeta hace seis años, está especializada en moda y equipamiento para actividades al aire libre. La compañía cerró el ejercicio 2020 con una facturación de 218 millones de francos suizos (197,2 millones de euros), casi un 19% menos que el año anterior.