La estación de esquí de Candanchú echa el cierre

Golpe al esquí en España. La estación de Candanchú cierra sus puertas, según ha decidido su consejo de administración, debido a las pérdidas millonarias y a la ausencia de ayudas públicas que la hayan ayudado a remontar la situación, según El Periódico de Aragón.

Las pérdidas fruto de la pandemia del coronavirus hacen “insostenible” la viabilidad a medio plazo del proyecto. En la temporada 2020-2021, cerrada en mayo, la estación obtuvo unas pérdidas de dos millones de euros.

La estación destaca la incertidumbre derivada de la evolución de la pandemia y sus efectos en la actividad empresarial, así como la ausencia de un plan de ayudas, ya que “hasta la fecha no ha tenido apoyo desde las administraciones públicas” y la ausencia de un proyecto integral de la nieve que no agravie al Valle del Aragón.

La plantilla de la empresa está formada por en torno a 150 trabajadores fijos, más los temporales que se incorporan en los momentos de mayor demanda. Candanchú es fundamental para el valle y un motor económico para la comarca y sus municipios, un sector estratégico que impulsa la economía de la zona.

Candanchú no abrirá sus puertas en la temporada 2021-2022 tras perder dos millones de euros

Los alcaldes de los pueblos del valle han solicitado una reunión “urgente” con los consejeros Marta Gastón y Arturo Aliaga, además de con el presidente de la Diputación Provincial de Huesca, Miguel Gracia Ferrer, para tratar sobre el cierre, que puede tener graves consecuencias económicas para sus municipios.

Candanchú cerró la temporada 2018-2019 con un negocio de 4,9 millones de euros. La estación, propiedad del grupo Ibernieve Aragón, cerró 2019-2020 con un resultado de 4,6 millones de euros y un resultado neto de 36.678 euros. En el año anterior, el resultado neto fue de 252.021 euros. Además, según sus últimas cuentas, debido a la falta de precipitaciones de nieve en la temporada y a la declaración del estado de alarma “la sociedad se ha acogido al punto IV del convenio de acreedores, lo que le ha permitido prorrogar en un año la duración del convenio ordinario de acreedores, posponiendo al próximo ejercicio el vencimiento previsto para el 31 de mayo de 2020”.