GoPro apuesta por la realidad virtual con la compra de la tecnológica Kolor

GoPro siente que cada vez hay más proveedores que quieren entrar en el negocio de las cámaras de acción y ha empezado a trabajar en nuevas innovaciones. Al mismo tiempo que TomTom anunciaba el lanzamiento de Bandit, el aparato con el que quiere plantar cara al gigante norteamericano, éste cerraba la compra de Kolor, una tecnológica de Francia especializada en realidad virtual. Los términos económicos de la operación no han trascendido.

La empresa, que mantendrá sus oficinas en la localidad gala de Saboya, ha desarrollado soluciones que permiten a los usuarios "combinar varias fotografías o vídeos para producir panorámicas esféricas o contenido en alta resolución que puede ser disfrutados en dispositivos móviles, páginas web o en un entorno de realidad virtual", según GoPro. La intención de la compañía fundada por Nicholas Woodman es que las imágenes filmadas a través de sus cámaras de acción puedan ser tratadas después con las aplicaciones de Kolor.

"Se combinarán para ofrecer soluciones interesantes y altamente accesibles para capturar, crear y compartir contenidos esféricos", indican. Y es que, gracias a esta aplicación, GoPro podría dejar de considerarse sólo como una cámara de acción, ya que le permitiría ser utilizada para, por ejemplo, filmar tours virtuales o panorámicas a bordo de un avión.

GoPro cerró 2014 con una facturación de 1.394 millones de dólares (1.277 millones de euros), un 41,4% más en comparación con el ejercicio anterior. Este fuerte estirón de ventas, al calor del auge de los deportes extremos y la escasa competencia que aún tenía en este segmento de negocio, permitió prácticamente triplicar las ganancias, que pasaron de 46,16 millones a 113,85 millones de dólares (de 42,3 millones a 104,3 millones de euros).