Francia: temporada en blanco para las estaciones de esquí

Un año en blanco. El secretario de estado de turismo francés, Jean-Baptiste Lemoyne, ha anunciado que, debido a la evolución de la pandemia en el país, las estaciones de esquí francesas no abrirán el 1 de febrero como habían previsto. Además, admite que es prácticamente imposible que durante febrero se pongan en marcha los remontadores.

Las estaciones de esquí y negocios de montaña franceses esperaban que pudiera haber una reapertura para limitar al mínimo el impacto económico que supondría cerrar durante un año entero, cuando el sector genera entre 250.000 y 400.000 puestos de trabajo directa e indirectamente.

Las estaciones de esquí catalanas abrieron sus puertas el 14 de diciembre, adelantándose a Francia y Andorra. Pese a las restricciones aprobadas por el Gobierno catalán, el sector ha reivindicado que las pistas son un entorno seguro y que cuentan con el espacio y las medidas de seguridad suficientes para la protección de los usuarios. Asimismo, han pedido que haya salvoconductos para ir a esquiar, tal como ha hecho el la Junta de Andalucía con Sierra Nevada.

El último país en abrir sus puertas a los esquiadores fue Andorra, que puso en marcha toda la maquinaria el pasado 2 de enero para los residentes. En las próximas semanas se espera un comunicado en el que se aclarará si los franceses seguirán teniendo prohibido ir al extranjero a esquiar (en este caso a Andorra), sobre todo durante las vacaciones de carnaval, que es cuando más dinero se recauda. 

Antes de empezar la temporada, Francia, Italia, Bélgica y Alemania pidieron a todos los socios de la Unión Europea que no abrieran las estaciones de esquí y, de hecho, el gobierno galo ya anunció que impondría restricciones a los turistas que marcharan a esquiar a otro país.