Equipamiento
Foot Locker: nuevo concepto y más marcas para impulsar sus ventas
La compañía invertirá 1.000 millones de dólares hasta 2026 para inaugurar tiendas en todo el mundo con su nuevo concepto, al que le ha dado el pistoletazo de salida con dos primeros establecimientos en Estados Unidos y Francia.
30 may 2024 - 05:00
Foot Locker renueva su esencia para superar el bache del sector deportivo. La compañía estadounidense de distribución de equipamiento deportivo inaugurará este viernes el primer establecimiento en Europa del que será el nuevo concepto de tienda de la marca en todo el mundo. Foot Locker, que está inmerso en un plan estratégico para elevar sus ventas, prevé invertir hasta 1.000 millones de dólares en tres años en la apertura y renovación de sus establecimientos por todo el mundo.
La tienda francesa, ubicada en el barrio de La Défense, en París, es la segunda de la compañía con el nuevo concepto, que lo estrenó hace cuatro semanas en Nueva Jersey (Estados Unidos), el mercado local de la compañía. A lo largo de 2024, las próximas aperturas previstas serán en las ciudades de Nueva York (Estados Unidos), Melbourne (Australia) y Nueva Delhi (India), según ha explicado Tomas Petersson, vicepresidente y director general de la región de Europa, Oriente Próximo y África de Foot Locker, a Modaes.
“A través de este nuevo concepto de tienda, estamos reforzando la posición de liderazgo de Foot Locker dentro del mundo de las sneakers y esperamos con ganas poder introducir este formato en otros mercados durante los próximos meses en todo el mundo”, añade Petersson. Para finales de 2025, la compañía espera haber renovado dos tercios de su red de tiendas.
Foot Locker invertirá 1.000 millones de dólares para renovar la imagen de sus tiendas en todo el mundo
Recientemente, la empresa estadounidense ha retrasado su plan estratégico para elevar sus ventas hasta 9.500 millones de dólares en dos años, un objetivo que prevé alcanzar ahora en 2028. En 2023, Foot Locker redujo su facturación un 6,7% respecto al año anterior, hasta los 8.154 millones de dólares.
La introducción de un nuevo concepto forma parte de este plan estratégico, bautizado como Lace Up Plan, que contempla también la diversificación de la oferta y fidelización de los consumidores. Para asegurar la apuesta por los nuevos establecimientos, Foot Locker realizó el año pasado alrededor de un centenar de pruebas piloto en Europa y Estados Unidos. El resultado fue un claro “impacto positivo”, explica Petersson, en el que se consiguió elevar la productividad de las ventas.
Foot Locker estudiará el impacto en su negocio de los primeros establecimientos a lo largo de 2025, mientras revisa las inversiones de la compañía en cada país, con el objetivo de decidir qué partes del nuevo concepto implementar en los establecimientos. La estrategia de Foot Locker hasta 2026 pasa por relocalizar, remodelarlas o inaugurar nuevas tiendas en las principales capitales globales.
A través del nuevo concepto de tienda, Foot Locker tiene el objetivo de elevar la experiencia del consumidor durante el proceso de compra. Algunas de las novedades incluyen espacios dedicados a colecciones exclusivas, un espacio más diáfano y orgánico, espacios dedicados a la customización de las sneakers y una mayor presencia tecnológica que conecta el canal físico con el online.
La compañía estadounidense presenta hoy los resultados del primer trimestre del ejercicio, los primeros después de registrar una caída de ventas a cierre de 2023. Petersson explica que Foot Locker prevé un “crecimiento generalizado” en el mercado europeo. El directivo también ha remarcado el peso de España como un “mercado clave” para la compañía, en el que los consumidores demandan cada vez más tiendas y marcas “nuevas”, como New Balance, Asics u On Running, frente a la oferta tradicional de Adidas o Nike.
El plan estratégico de Foot Locker busca capear la caída generalizada en el sector de la moda y el equipamiento deportivo. Gigantes del sector como Nike o Adidas han encadenado varios trimestres difíciles, lo que los ha llevado a idear planes de reducción de gastos. Mientras Nike elevó sus ventas apenas un 1% en los primeros nueve meses del ejercicio actual (finalizado el 29 de febrero), hasta los 38.756 millones de dólares, Adidas apenas consiguió salir de pérdidas en el primer trimestre del suyo (finalizado el 31 de marzo).