Fluidra suspende dividendo, baja sueldos a la alta dirección y prepara Ertes

Fluidra pone en marcha su plan de choque para ajustarse a la potencial caída de ventas que sufrirá en 2020. El fabricante de piscinas y aplicaciones para el tratamiento del agua ha anunciado el primer paquete de medidas, que incluye la suspensión del dividendo hasta nuevo aviso, el recorte del 30% en las retribuciones del consejo de administración y del 20% en el comité de dirección, así como la presentación de expedientes de regulación temporal de empleo (Erte) en distintos países.

La multinacional española señala que su objetivo es “adaptarse a la evolución de la demanda” tras un buen arranque en enero y febrero. Sin embargo, “hemos visto cómo las medidas de confinamiento han provocado una ralentización de la actividad”. Aun así, ha introducido complementos parciales para que los trabajadores afectados no pierdan poder adquisitivo.

Tras este primer paquete de medidas, la empresa dirigida por Eloi Planes señala que “está revisando todos sus gastos de operaciones a nivel global para reducir aquellos que sean discrecionales, así como retrasar inversiones que se consideren de menor prioridad”.

Fluidra ha puesto en revisión sus objetivos de 2020, tras una ralentización de las ventas a partir de marzo

Fluidra asegura que dispone de las bases para atender a un repunte de los pedidos cuando pase la pandemia, gracias a la gestión en la parte fabril. “A pesar de que algunas plantas han sido cerradas temporalmente, nuestros niveles de inventario se han distribuido en múltiples localizaciones, lo que nos permite servir a nuestros clientes”, sostiene el grupo.

De hecho, hay un argumento científico que podría ayudar a su negocio durante los próximos meses. “Según varios centros de control de enfermedades, este virus no puede sobrevivir en piscinas correctamente tratadas y, en muchos lugares del mundo, la limpieza del agua de la piscina es considerada una actividad esencial, por lo que nuestros equipos continúan dando soporte a nuestros clientes”, apunta.

La compañía también confía en que “las medidas de confinamiento favorecerán los hábitos de quedarse en casa, lo que potenciará las ventas a las piscinas ya instaladas, ya que los equipamientos tendrán que ser mantenidos y reemplazados”. Y es ahí donde se concentra el 84% del negocio de Fluidra. El impacto negativo se produciría en el área que sirve a establecimientos como hoteles y gimnasios, que hoy representan el 7% de las ventas.

La empresa facturó 1.368 millones de euros en 2019, lo que supone una mejora interanual del 4%. El beneficio neto proforma, es decir, a efectos comparables tras la fusión con Zodiac, bajó de 64,9 millones a 60 millones de euros. El resultado neto consolidado se situó en 8,3 millones.