El fabricante de butacas Figueras ficha a un nuevo consejero delegado

Figueras vuelve a contar con un primer ejecutivo externo a la familia fundadora. El fabricante catalán de butacas para espacios públicos, entre ellos estadios y pabellones deportivos, ha incorporado a Marcos Carrasquilla como consejero delegado. El ejecutivo, que se incorporó a la empresa en septiembre, fue el director general de la empresa de mobiliario urbano Benito Urban hasta abril.

Carrasquilla, que en el pasado también trabajó para Lehman Brothers, McKinsey y Quercus, llega a Figueras International Seating con la misión de liderar el proceso de transición generacional y el nuevo ciclo de crecimiento de la compañía, según publica La Vanguardia. Josep Figueras, presidente de la empresa, es hijo del fundador y el artífice del crecimiento y la internacionalización; además, dos de sus hijos trabajan en la empresa: Alejandro Figueras es vicepresidente, y Silvia Figueras, directora de marketing.

No es la primera vez que Figueras recurre a un ejecutivo interno para dirigir el negocio. A mediados de 2011 contrataron a Oriol Balaguer, entonces director general de la empresa pública Aeroports de Catalunya. Sin embargo, su paso por la empresa catalana apenas duró unos meses y fue relevado por Salvador Martí, exdirectivo de MediaMarkt, en noviembre de ese mismo año. El ejecutivo tampoco tuvo una larga trayectoria, ya que en septiembre de 2012 se suprimió el consejo de administración como medida de austeridad.

Figueras fue fundada en 1934 como fabricante de butacas de madera para cines. Su historia no está exenta de dificultades, ya que en 1996 suspendió pagos y el desplome del mercado español le forzó a un rápido proceso de internacionalización, que hoy le permite obtener el 90% de sus ingresos fuera del país. En 2014, la empresa prevé una facturación consolidada de unos 40 millones de euros, frente a los 35 millones del ejercicio anterior.

La empresa ha ampliado capital recientemente en 1,2 millones de euros para seguir creciendo en el exterior, donde ya dispone de filiales propias en Estados Unidos, Alemania y Francia. Con 160 trabajadores, Figueras ha instalado sus butacas en estadios de prestigio, como el Camp Nou o el Santiago Bernabéu. También ha logrado importantes contratos para las numerosas instalaciones que Qatar está construyendo en vistas al Mundial de Fútbol de 2022.