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Del Espai Barça a la promesa de Mestalla: los estadios se reforman con foco en el Mundial 2030
Sumar más espacio para espectadores, hacer funcionar el activo más allá de los días de partido y potenciar el sector hospitality son los denominadores en común de todos los estadios del fútbol español que se están reformando.
23 ago 2024 - 05:00
Los activos inmobiliarios del fútbol español buscan más rentabilidad. El sector, que cuenta con grandes espacios pero que se usan poco (entre una o dos veces a la semana para los días de partido) se renuevan con varios objetivos en común: hacer funcionar el inmueble los 365 días del año, potenciar el sector hospitlity y, por supuesto, albergar más fanáticos en sus gradas.
Todo esto mientras comienza la cuenta atrás para el Mundial 2030 en el que España será sede. El primero en comenzar con esta serie de grandes reformas fue el Real Madrid. El equipo galáctico inauguró el año pasado el nuevo estadio Santiago Bernabéu, imponiendo una nueva era de modernización y tecnología en los estadios españoles de fútbol.
El Real Madrid lleva invertidos alrededor de 893 millones de euros en el proyecto, que fue diseñado por L35 Architects, en colaboración con GMP Architekten y Ribas & Ribas. Originalmente construido en 1947 dentro de un tejido urbano que ya no es el mismo, el estadio Santiago Bernabéu cuenta ahora con 125.600 metros cuadrados en una reforma que constó de una cubierta retráctil, que dota al estadio de más comodidad y de que sea operativo todo el año.
El pasado noviembre, los socios de Real Madrid CF aprobaron la ampliación del préstamo para finalizar las obras del Santiago Bernabéu en 370 millones de euros. El club presupuestó un desembolso de 575 millones de euros, devueltos en un plazo de treinta años y con un interés fijo del 2,5%, para reformar el feudo blanco. A ello debe sumarse un préstamo a disposición de 225 millones de euros adicionales, lo que elevó la inversión para culminar las obras hasta 800 millones de euros, de los cuales el club ya ha consumido la totalidad.
FC Barcelona prevé que el nuevo estadio genere unos ingresos anuales de 247 millones de euros
El otro gran equipo de LaLiga también está cambiando de piel. Originariamente, el Camp Nou fue diseñado en 1953 por el arquitecto Francesc Mitjans en el corazón del barrio de Les Corts. El nuevo estadio forma parte de un proyecto realizado por Idom, Nikken Sekkei y b720.
Con una inversión de 1.500 millones de euros, el proyecto no consta sólo del nuevo estadio, sino de la creación de Espai Barça, un complejo deportivo innovador que prioriza la sostenibilidad y el hospitality. El nuevo estadio del FC Barcelona contará con 18.000 metros cuadrados de placas solares en toda la cubierta exterior, además de un sistema geotérmico. El antiguo estadio ya empleaba energías renovables y generaba emisiones de CO2 cero, pero en el nuevo Spotify Camp Nou será capaz de producir su propia energía y autoabastecerse de una gran parte del consumo energético.
El Espai Barça se proyecta sobre 18 hectáreas de suelo en una ubicación céntrica de una ciudad como Barcelona, y con 350.000 metros cuadrados de techo. Desde el club blaugrana aseguran que este proyecto es imprescindible para mantener al FC Barcelona en el liderazgo mundial de fútbol y deporte.
El proyecto tiene la particularidad de financiarse por sí mismo, a través de los ingresos que genera el propio Espai Barça, como la nueva oferta de hospitality, los patrocinios y los tittle rights, el Museo y sus visitas, el ticketing y la restauración, así como la explotación de nuevos activos y eventos que generará el propio Espai Barça. El club ha negociado una financiación a un tipo de interés medio neto estimado en un 5,53 %, con veinte inversores internacionales.
Se prevé que el Spotify Camp Nou se estrene en 2026 y genere unos ingresos anuales de 247 millones de euros. El 24% de ellos estará impulsado por los derechos de naming y spornsorship, mientras que otro 24% corresponderá al segmento hospitality en el que confía el club azulgrana sea una de sus palancas de crecimiento. En cuanto a los tickets y restauración, los mismos supondrán el 22% de los ingresos, mientras que el museo y eventos coparán un 15% cada uno.
Si bien el Atlético de Madrid fue uno de los primeros en inaugurar un nuevo estadio en 2017, el club colchonero colocó a principios de julio la primera piedra de lo que será su nueva sede deporta más allá de sus partidos oficiales.
El proyecto deportivo catalogado como de referencia en el Área Metropolitana de Madrid, será también un gran avance para el sector deportivo y ocio de España. El proyecto lleva meses gestándose y su materialización se debe gracias a una alianza entre el Ayuntamiento de Madrid y el Atlético de Madrid.
En concreto, Ciudad del Deporte contará con cinco parcelas con una superficie de más de 265.000 metros cuadrados destinados a la práctica deportiva y alrededor de 380.000 metros cuadrados de zonas verdes, enmarcados en las 1,1 hectáreas cuadradas que ocupa el Parque Deportivo del Este, donde se ubicará el nuevo complejo deportivo.
Sevilla FC destinará 350 millones de euros para la reforma del estadio Ramón Sánchez-Pizjuán
El Atlético de Madrid ocupará una de esas parcelas para desarrollar su Centro de Alto Rendimiento. Para el levantamiento de la primera etapa se estima una inversión superior a los 350 millones de euros y se prevé que la Ciudad del Deporte genere más de 3.500 empleos directos e indirectos.
La zona de Andalucía también prepara remodelaciones. El Sevilla FC anunció recientemente un aumento del 75% del presupuesto para la reforma del estadio Ramón Sánchez-Pizjuán, pasando de 200 millones de euros a 350 millones de euros. Las obras de modernización del estadio comenzarán en 2026 y aumentarán su capacidad hasta 55.000 asientos con nuevas zonas de hospitality. Alrededor del 10% de las butacas se destinarán a zonas VIP.
Tal y como marca la tendencia de esta ola de reformas en los estadios de fútbol, el club sevillano pretende exprimir al máximo su estadio, con actividades durante los 365 días del año. En cuanto al diseño, el estadio contará con una cubierta particular y novedosa y para su remodelación, el actual recinto deberá ser derribado en su totalidad.
Su rival, el Real Betis, también prepara la remodelación de sus instalaciones. Con una inversión de cien millones, el club verdiblanco reformará el Villamarín cuyas obras podrían comenzar el próximo año y extenderse hasta 2027. El diseño estará liderado por el estudio de arquitectura de Rafael de La-Hoz y dotará al estadio Benito Villamarín de una nueva piel, una fachada cuyo diseño representa las Trece Barras del escudo.
Valencia CF lleva años inmerso en la eterna promesa de reformar su estadio
Asimismo, el proyecto incluye la instalación de la cubierta, donde se ubicarán dos nuevos videomarcadores de mayores dimensiones que los actuales; además de los sistemas de sonido e iluminación que potenciarán el espectáculo de partido y mejorarán la experiencia de los aficionados. También la cubierta permitirá la recogida de aguas pluviales, que serán destinadas para el riego siguiendo la política de sostenibilidad del club. Como el resto de los estadios españoles, el del Real Betis también sumará una zona de restauración, comercio, aparcamiento subterráneo y espacios de ocio.
La eterna promesa del nuevo Mestalla parece comenzar a hacerse realidad. Recientemente, el Pleno del Ayuntamiento de Valencia ha dado el visto bueno en la modificación del plan urbanístico que afecta a la zona donde se encontraría el nuevo estadio. El del Valencia CF es uno de los estadios más controversiales de LaLiga, ya que lleva más de quince años en busca de su reforma. En 2009, el club se vio obligado a paralizar las obras por falta de liquidez.
El club, que se presenta como promotor de la obra del Nuevo Mestalla, tiene 36 meses desde que reciba la notificación de las licencias para construir el estadio: seis para reanudar la obra y treinta para acabarla. Sin embargo, la aprobación del Gobierno valenciano llega más tarde de la confirmación de España como sede de la Copa del Mundo 2030, evento para el que la ciudad quería ser una de las sedes. El Nuevo Mestalla debería estar listo para que eso suceda y con todo el club destinará unos 180 millones de euros.
Otro club español que prepara una inversión millonaria para ampliar sus instalaciones es UD Las Palmas. Hace algunas semanas, el Cabildo de Gran Canaria aprobó el gasto plurianual de 101 millones de euros (2025-2027) de las obras de ampliación y reforma integral del Estadio de Gran Canaria, con la finalidad de garantizar su cobertura financiera.
El proyecto, que asciende a un desembolso de 101 millones de euros, se repartirá en paquetes de inversión de 25,9 millones de euros en 2025; 50,6 millones de euros en 2026, y 25,3 millones de euros en 2027. Se estima que la ejecución total de las obras se demore durante unos 24 meses.
El aumento del aforo será uno de los sustanciales cambios del Estadio de Gran Canaria. La idea inicial es que eleve un 37% su capacidad, lo que le haría pasar de los 32.148 asientos actuales a los 44.620 que se pretenden. Esto es un requisito clave para el Mundial 2030, que exige al menos 40.000 sitios.
En cuanto al resto de islas de España, Baleares también desembolsó dinero para mejorar sus estadios de fútbol. El RCD Mallorca inauguró recientemente la reforma del estadio Son Moix, con una inversión de 5,4 millones en la primera fase, ejecutada en 2022. El estadio fue construido en 1997 para la Universiada de Palma, pero las obras del nuevo estadio fueron ejecutadas bajo la dirección de la arquitecta vasca Izaskun Larzabal.
La particularidad de Son Moix es que cuenta con cuatro gradas de diferente diseño y dimensión y mantuvo la cubierta de su estadio. Con todo, RCD Mallorca sumó una capacidad para 25.800 espectadores. Con todo, el club balear invirtió veinte millones de euros, que se pagarán con el dinero que el club ha obtenido por el pacto de LaLiga con CVC. Los recursos del presidente Andy Kohlberg y Robert Sarver, máximos accionistas, completarán el crédito de 27 millones de euros que llega procedente de LaLiga Impulso.
A por mejoras en las ciudades deportivas
Más allá de los estadios donde se disputan las competiciones más importantes, muchos clubes han destinado parte del dinero en mejorar sus complejos deportivos, espacios donde entrenan, se rehabilitan, realizan eventos o compiten otras disciplinas, que por lo general suelen ubicarse en otro terreno que el estadio en sí.
Girona FC, por ejemplo, ha recibido el visto bueno para desarrollar su nuevo centro de entrenamiento. City Football Academy Girona supondrá una inversión de 25 millones de euros y contará con dos campos de fútbol, la transformación de la masía La Massana, unas nuevas oficinas y en la sede institucional de la entidad.
En el caso del Getafe CF, el club azulón remodelará el Coliseum Alfonso Pérez y su ciudad deportiva, con el objetivo de ofrecer un estadio más cubierto para que el público anime más de cerca a sus futbolistas. Entre los planes del club madrileño también se encuentra la construcción de un mini estadio en su ciudad deportiva, con capacidad para 2.000 espectadores. El campo dispondrá de hierba natural y será utilizado por el equipo filial y el primer equipo juvenil.
Si bien compite en LaLiga EA Sports, el Cádiz CF tiene previsto desarrollar Sportech City, una iniciativa empresarial y social que busca ser el motor económico para el club y para la provincia. Se estima que una vez finalizado el proyecto genere ingresos por 46,9 millones de euros al año.
El club ha creado un fondo de inversión, del cual es propietario al 100%, apodado Gades Sports Technology Industry Fondo de Capital Riesgo como herramienta vehicular para el desarrollo del proyecto, que también contará con un centro de congresos con capacidad para 40.000 personas, una universidad especializada en deporte, un data center, un espacio de coworking, una incubadora de start ups y espacios comerciales. Además, contará con hub orientado a las experiencias de los usuarios y otro para la tecnología aplicada a la industria.
Por último, en el otro extremo del país se enfrentan con dificultades para nuevos desarrollos. El RC Celta arrastra problemas para construir su nueva ciudad deportiva desde 2018. El presidente del club gallego quería adquirir unos suelos propiedad del ayuntamiento con la intención de aumentar la estructura patrimonial y el valor del club.
El proyecto inició con una construcción de 150.000 metros cuadrados, aunque una vez se finalicen todas las fases del proyecto, el complejo duplicará su actual tamaño y contará con nueve terrenos de juego, (cinco de hierba natural y cuatro de césped artificial), zonas de tecnificación, zona de playa para rehabilitación y otros servicios, estadio con capacidad para 4.000 espectadores, pistas de pádel y tenis, piscina, residencia, cafetería, restaurante, tienda del club, Universidad del deporte, pabellón deportivo multiusos y gimnasios. En total, la obra está estimada en unos 90 millones de euros.