Asics no levanta cabeza y sus ventas vuelven a caer un 2,9% en el primer semestre

Asics prolonga la caída de sus ventas. A cierre del primer semestre, comprendido entre enero y junio, la compañía japonesa de equipamiento deportivo retrocedió un 2,9%, hasta 187.204 millones de yenes (1.580,4 millones de euros). Su beneficio neto, sin embargo, se disparó un 53,4%, hasta 9.968 millones de yenes (84,1 millones de euros).

El fabricante, que se encuentra inmerso en un plan de transformación con vistas a 2020, se ha fijado como objetivos “liderar el negocio del calzado de running, expandir la marca Onitsuka Tiger, acelerar el negocio en Shanghai ampliando la sede y ahondar en la digitalización”. La caída en las ventas, por otro lado, la atribuyen al “bajo rendimiento del equipamiento deportivo y el textil”. De hecho, el beneficio obtenido de ambas categorías de productos ni siquiera se indica en su memoria semestral, y simplemente es marcado como “deficitario”.

Tampoco le ha ido mejor a la división de running, cuyas ventas disminuyeron un 3,2% en los primeros seis meses de 2019, hasta 83.573 millones de yenes (705,5 millones de euros). El atletismo es la principal línea de negocio de Asics, y representa el 44% del total de la facturación.

La marca Onitsuka Tiger, que este año celebra su 70 aniversario, ha sido la que ha paliado la caída del running, puesto que las ventas aumentaron un 7,5%, hasta 22.921 millones de yenes (193,5 millones de euros). Los productos dedicados al core performance estancaron ventas en 21.720 millones de yenes (183,3 millones de euros), y ya superan al textil, que cayó un  12,1%, hasta 19.680 millones de yenes (166 millones de euros).

Por territorios, Japón y Norteamérica experimentaron un alza del 0,4% y del 2,5% interanual, respectivamente, mientras que las ventas en Europa decrecieron un 10,7%. Tampoco le fue mejor a Asics en China, cuya facturación disminuyó un 6,1%, ni en Oceanía, donde las ventas se estancaron y no hubo ningún cambio.