Entorno

Queco Huerta (Adde): “El director deportivo vive en una situación de incertidumbre constante”

El presidente de la asociación de directores deportivos de España aboga por exigir una titulación para practicar la profesión, con el objetivo de regular la situación laboral en el sector y alcanzar mayores derechos laborales.

Queco Huerta (Adde): “El director deportivo vive en una situación de incertidumbre constante”
Queco Huerta (Adde): “El director deportivo vive en una situación de incertidumbre constante”
“Nuestros derechos laborales no están garantizados y no tenemos proyección laboral”

Albert Martínez

8 sep 2022 - 05:00

Regular la situación laboral del director deportivo, conquistar mayores derechos, exigir una titulación para llevar a cabo la profesión y recibir un mayor reconocimiento público. Estos son los cuatro principales puntos que demanda Queco Huerta, presidente de la asociación de directores deportivos de España (Adde), quien asegura que ese perfil está minusvalorado, ya que es el nexo entre la directiva y la plantilla, y se encarga de “crear y gestionar equipos humanos, con sus complejidades y sus desavenencias”.

 

Pregunta: ¿Por qué es necesaria una asociación como Adde?

Respuesta: Porque los directores deportivos vivimos en una situación de incertidumbre constante, sobre todo en categorías inferiores. ¡Hay muchas personas que conforman la dirección deportiva de un club! Desde ojeadores, analistas, secretarios técnicos, scoutings, directores de cantera… Necesitamos regular nuestra situación, necesitamos ayuda. Es por eso por lo que ha nacido nuestra asociación.

 

P.: ¿Qué tres mejoras podrían llevarse a cabo en vuestra situación?

R.: En primera instancia, que exista un reparto más equitativo del dinero y que nuestra profesión sea valorada como merece en el fútbol semiprofesional. En segundo lugar, nos gustaría que existiera una mayor cultura de la dirección deportiva, con más seminarios, ruedas de prensa, convocatorias o charlas. Y por último, exigir una titulación para llevar a cabo este trabajo. Debe existir un control al respecto…

 

P.: ¿Lo dice porque hay intrusismo en la profesión?

R.: No me gusta esa palabra, pero si luchamos por profesionalizarnos el primer paso que debemos dar es exigir una titulación.

 

P.: ¿Y falta formación en el sector?

R.: La Real Federación Española de Fútbol (Rfef) lleva a cabo formaciones y cursos, pero lo que falta es titulación. Si para entrenar se exige, ¿por qué no para ser director deportivo? No somos menos.

 

 

P.: ¿Qué diferencias hay entre Adde y otros sindicatos?

R.: A veces la palabra sindicato suena fuerte. Nosotros somos una asociación y de momento no cobramos cuota. Pero sí queremos un estamento, al igual que lo hay de entrenadores, de jugadores y de casi todas las profesiones en el mundo occidental.

 

P.: ¿Qué le piden a la administración?

R.:  Queremos tener delegados por zonas, estar representados en cada una de las comunidades autónomas del estado español. Y poder dialogar y colaborar con todos los estamentos que nos quieran apoyar.

 

P.: ¿Cuáles son las carencias de la nueva ley del deporte?

R.: No regula nuestra situación. Sentimos que nuestros derechos laborales no están garantizados y que no tenemos proyección laboral. Por ejemplo, demandamos una bolsa de empleo. En estos últimos años ha habido muchos cambios y la economía en muchos sitios es volátil, con recortes y ajustes, pero eso no quita que merezcamos reconocimiento.

 

P.: ¿Qué aporta un buen director deportivo a un club?

R.: El valor de un buen director deportivo es incalculable. No hay mayor nexo de unión entre el entrenador y la directiva que nosotros. Los directores deportivos transmiten valores y tratan a muchos equipos humanos, con sus complejidades y sus desavenencias.

 

 

P.: ¿El mayor enemigo de un director deportivo es un entrenador? ¿O un presidente muy intervencionista?

R.: Ni el entrenador ni el presidente. El mayor enemigo es la mala suerte o planificación, muchas veces condicionada por falta de tiempo o de presupuesto. Al final, las personas podemos equivocarnos y aunque un día algo te vaya bien, al siguiente te puede ir mal. Y no pasa nada.

 

P.: ¿Falta autonomía?

R.: Depende de la política del club, que puede ser independiente, piramidal o mixta. El director deportivo debe adaptarse a lo que hay, a la historia del equipo donde está. 

 

P.: ¿Qué diferencias hay entre un director deportivo en España y uno en el extranjero?

R.: La situación en Europa es bastante similar a la de España. Sin embargo, en Latinoamérica no está bien implantada la profesión. Hemos ido recabando información, experiencias, testigos y creemos que ni están defendidos ni están unidos. Muchas veces, cuando sales al extranjero quedas colgado de la mano de Dios.

 

P.: ¿Está reconocido el trabajo del director deportivo?

R.: Si salen mal la cosas, el demérito se lo lleva el director deportivo. Pero si salen bien, el reconocimiento se lo lleva la plantilla. Así es el sector. Nuestra labor es conformar un buen equipo humano y darles valor añadido a todas las partes.