Entorno

Rafael de Andrés Álvez: “No había un problema de salud con las apuestas”

El abogado especialista en derecho administrativo, deportivo y del juego ha criticado la decisión de prohibir a los operadores de casas de apuestas publicitarse en deporte en septiembre y dejar al margen a Loterías y Once. 

Rafael de Andrés Álvez: “No había un problema de salud con las apuestas”
Rafael de Andrés Álvez: “No había un problema de salud con las apuestas”
“La situación es de absoluto control”, ha reiterado.

M. L-E.

24 nov 2021 - 05:00

No había un problema público con el juego. Según el abogado especialista en derecho administrativo, deportivo y del juego, Rafael de Andrés Álvez, “no había un problema de salud ni un problema de alarma” con el juego en España, por lo que no se tenía que haber prohibido a los operadores de casas de apuestas publicitarse en el deporte en septiembre. Así lo ha manifestado durante el tercer Encuentro LaLiga de Derecho del Deporte 2021-2022.

 

El abogado, que ha recordado que el mercado del juego en España en los últimos tres ha generado un volumen de 7.000 millones de euros, ha hecho énfasis en que, a priori, “se ha hecho por razones de interés público para intentar proteger un elemento de posible adicción, a los menores y a la ludopatía” pero “las cifras de adicción se han mantenido en los cincos años”. “España es uno de los países con menos problemas de adicción, aunque se hablaba de una situación problemática”, ha lamentado.

 

En esta línea, De Andrés ha subrayado que ahora hay una prohibición casi absoluta de la publicidad del juego y ha remarcado que durante la pandemia no se incrementó, puesto que “un 86,6% de los jugadores indicaron que jugaron menos o igual durante el confinamiento”, según datos de la Dirección General de Ordenación del Juego. “El temor de que aumentase la ludopatía quedó desdicho con los números que se han incorporado en los diferentes informes: ni hubo más juego ni hubo un mayor riesgo”, ha asegurado, destacando que “España es donde hay menos ludopatía, con tan sólo un incremento del 0,3% de jugadores con adicción en la última década”.

 

 

 

 

En este aspecto, ha asegurado que, con la ley aprobada en 2011, el juego “estaba perfectamente controlado desde el punto de vista de autorregulación, respetando los horarios de protección de menores”. Asimismo, ha destacado que “esto no se tuvo en cuenta” a la hora de legislar, puesto que lo que tenía que hacer el Gobierno era “hacer algunos elementos de matización, salvando la capacidad de los operadores para incorporar su producto en un ámbito legalizado”, por lo que se hubieran podido mantener los patrocinios en las camisetas o los naming rights. “No sólo es la camiseta, es cualquier tipo de merchandising y tampoco se pueden hacer acciones comerciales a nuevos jugadores, como ofrecer bonos”, ha manifestado.

 

Por otro lado, ha criticado que, pese a que se ha realizado esta prohibición, los operadores públicos con licencia singular, como Loterías y Apuestas del Estado o la Once, han quedado al margen, un hecho que ha generado una “asimetría jurídica” porque “una parte del sector del juego sí puede prescribir nuevos jugadores en medios publicitarios, pero el operador público no puede”.

De hecho, ha destacado que, según el Observatorio de la Publicidad, Once, invierte 49 millones de euros en inversión en publicidad, mientras que Loterías y Apuestas del Estado invierte 56,3 millones de euros.

 

Por lo tanto, ha recordado que, como consecuencia a esta situación, se han planteado recursos al Tribunal Supremo para “depurar aquellos elementos que son contrarios fundamentalmente a la libertad de empresa” y que los equipos han buscado acuerdos con operadores fuera de España. “La situación es de absoluto control”, ha reiterado.