Entorno
Jaime Lissavetzky, expresidente del CSD, liderará la nueva etapa de la Fundación España Activa
1 feb 2017 - 10:48
Relevo en la presidencia de la Fundación Vida Activa Saludable (FVAS). El organismo, creado para promover la práctica deportiva y que surgió como iniciativa de distintos operadores de gimnasios, ha decidido emprender una nueva etapa. Y lo hará no sólo con un cambio de nombre, a Fundación España Activa, sino que también aspira a ganar más influencia en la vida pública con un nuevo jefe.
Se trata de Jaime Lissavetzky, que fue el presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD) entre 2004 y 2011, durante la etapa del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Actualmente, quien también fue candidato a la alcaldía de Madrid por el PSOE es el director del Observatorio de Investigación de la Fundación Vida Activa y Saludable. Este grupo de trabajo surgió del Centro de Estudios del Deporte (CED), adscrito a la Universidad Rey Juan Carlos.
El objetivo de España Activa, liderada en sus primeros dos años por Gabriel Sáez, presidente de GO Fit, es que con este nombramiento puedan tener un mayor grado de influencia política. El propio Sáez ha admitido hoy en la jornada de la fundación que “el deporte siempre va contra el viento”, una circunstancia que no ha impedido que en los últimos cinco años se haya incrementado el número de españoles que hace deporte.
Su objetivo es mucho más amplio que velar por los intereses del fitness con cuestiones como la rebaja del IVA. La fundación aspira a integrar a todas las compañías y organizaciones que promueven la actividad física, y conseguir que el Gobierno y los distintos organismos legisladores promuevan medidas que incentiven el deporte. En este sentido, uno de sus grandes desafíos es que se entienda el mismo como una medida clave en la reducción del gasto sanitario.
Además de gran conocedor de la industria del deporte de élite tras su paso por el CSD, Lissavetzky también conoce las vicisitudes a pequeña escala, ya que fue consejero de cultura, educación y deporte de la Comunidad de Madrid entre 1985 y 1995, etapa en la que tuvo que marcar las líneas maestras de la promoción de la actividad física en una de las regiones más pobladas de España.
El nuevo presidente de España Activa ha señalado el deporte "es un mundo complejo, pero importante", y ha enfatizado que "la fundación quiere y puede de servir para luchar por los objetivos", que siguen siendo promover la actividad física y aumentar la práctica de la misma. "Intentaré estar a la altura de la confianza", ha concluido.
Quien no ha dudado de su valía es Alejandro Blanco, presidente del Comité Olímpico Español (COE), en un discurso de clausura repleto de llamadas a la unidad, entre las empresas pero también entre las federaciones y el resto de actores del deporte. "Seguimos sin estar todos juntos luchando por el deporte y por lo que los ciudadanos piden", ha afirmado. "Somos los dirigentes los que tenemos la obligación y la devoción de presentar al Gobierno el presente y futuro del deporte, que es el mayor factor de cohesión", ha insistido.
Blanco ha asegurado a los miembros de España Activa que "las federaciones y el COE están preparados" para trabajar en esta línea, que empezó a esbozarse hace dos años y que, de momento, se ha centrado en la realización de campañas para promover la actividad física entre los niños y la elaboración de informes sobre las motivaciones de aquellos que practican deporte.
Sáez, en su último parlamento como presidente de la fundación, ha advertido de que "es necesario abordar la plaga del sedentarismo; el deporte debe ser tomado como una cuestión de estado para revertir el sedentarismo y los efectos tremendos que tiene en la sociedad".