Las exportaciones de material deportivo cierran por segundo año al alza

Las exportaciones de material deportivo cerraron 2014 en forma. Las ventas al extranjero de este tipo de productos crecieron por segundo año consecutivo tras el bache de 2012 y sus cifras ya se sitúan a niveles previos a los de la recesión. En 2014, el negocio exterior de esta industria subió un 2,6% (una décima más que el conjunto de sectores), hasta los 656,06 millones de euros.

El principal motor continúa siendo el material de gimnasio y otros accesorios para la práctica deportiva, con 236,52 millones de euros. Esta cifra supone un incremento del 9,7% respecto a 2013 y representa el 36% de todas las exportaciones de la industria. Dentro de este ámbito, destaca la comercialización de productos de cultura física, como pesas, con 78,67 millones de euros, así como los esquís, con 34,67 millones.

En lo que se refiere a prendas deportivas, los datos del Ministerio de Economía revelan una evolución dispar entre las piezas de entreno, esquí y baño que son de punto y las que no lo son. El crecimiento interanual de las prendas del primer tipo se sitúa en el 15,9%, hasta 55,93 millones de euros, y consolida una senda alcista que se inicia ya en 2010. La ropa deportiva que no es de punto, en cambio, rompe con tres años al alza y se hunden un 12,54%, hasta 187,64 millones.

Donde sí existe un consenso de mejora es entre los fabricantes de calzado deportivo, que mejoraron sus registros de exportación respecto a 2013 en todas las variantes de este tipo de productos. Las botas de esquí en las que tanto la suela como la lengüeta son de plástico o caucho suben un 4,5%, hasta 780.000 euros, mientras que las botas en las que la lengüeta es de cuero se disparan un 26,7%, hasta los 470.000 euros.

El calzado de deporte en el que la lengüeta es de cuero natural también registró un fuerte incremento, del 20,47%, hasta 40,2 millones. El resto de zapatillas para la práctica deportiva crecieron también a un ritmo fuerte (+13,1%), hasta 15,63 millones. El calzado específico para tenis, baloncesto, gimnasia y otro tipo de entrenamientos se disparó un 26,7%, hasta 87,56 millones de euros.

Uno de los borrones de la exportación española siguen siendo las embarcaciones de recreo, que durante los años de expansión económica alcanzó cifras récord y ahora lleva varios ejercicios en caída libre. Entre 2013 y 2014, el retroceso fue del 47,5%, hasta los cinco millones de euros.

La Unión Europea, un mercado prioritario

Los datos facilitados por el Ministerio de Economía revelan que los países comunitarios son el principal cliente de las empresas españolas vinculadas a la industria del deporte. Francia, sin ir más lejos, importó productos por 169,25 millones de euros en 2014, un 16,4% más respecto al ejercicio anterior. El incremento de las exportaciones el mercado galo ha permitido amortiguar el retroceso en Portugal, un país aún lastrado por sus problemas económicos; en este país, las ventas cayeron un 10,2$%, pero aún así es el segundo cliente más importante con 114,5 millones.

Italia (67,9 millones), Alemania (33,7 millones), Reino Unido (24,7 millones) y Bélgica (21,6 millones) consolidan a la Unión Europea (UE) como el principal mercado para las exportaciones de material deportivo. Muy por detrás se encuentran países como Argelia (7,5 millones, el triple que en 2013), Marruecos (6,9 millones, dos millones menos).

Al otro lado del Atlántico, las exportaciones mejoran en Estados Unidos (de 8 millones a 9 millones de euros), pero caen ligeramente en México (de 8,8 millones a 8,1 millones). En Colombia, Venezuela y Chile también se registran retrocesos del negocio, que se sitúa por debajo de tres millones de euros en cada uno de los países, aunque en estos casos la caída pueda explicarse por la fortaleza del euro respecto a otras divisas.

En Asia sucede algo similar. Por ejemplo, en China la caída es considerable: las exportaciones pasan de 6,2 millones a 3,9 millones de euros. En Japón, la caída también ronda los dos millones, al pasar de 7,7 millones a 5 millones de euros. La caída es de apenas medio millón en Corea del Sur, hasta 4,1 millones.