Entorno

La Rioja: en busca del nicho para competir entre los gigantes del deporte

La comunidad con menor superficie territorial de España ha realizado un importante esfuerzo por impulsar la actividad física a través de la captación de eventos deportivos de disciplinas que cuentan con menor seguimiento en el panorama nacional, como el patinaje sobre hielo.

Álvaro Carretero

3 jun 2019 - 04:57

La comunidad con menor superficie territorial de España ha realizado un importante esfuerzo por impulsar la actividad física a través de la captación de eventos deportivos de disciplinas que cuentan con menor seguimiento en el panorama nacional, como el patinaje sobre hielo.

 

 

En 2014 La Rioja se anotó el mayor tanto de su historia deportiva. En 2014, Logroño fue elegida Ciudad Europea del Deporte, un honor que en España ya han compartido otras localidades como Guadalajara y Fuenlabrada (Madrid) en los últimos seis años. Desde entonces, la región con menor superficie territorial ha lanzado diferentes planes estratégicos para dinamizar el sector deportivo desde tres ejes, que pasan por el turismo, los clubes y las federaciones. El objetivo es construir un modelo que vaya más allá que del gol en Las Gaunas, que evoca a cuando el Logroñés promocionaba su imagen en la élite del fútbol español.

 

Aunque La Rioja cuenta con la menor masa de federados a nivel nacional, con 33.518 licencias. Sin embargo, también es la que menos población tiene, con algo más de 300.000 habitantes. Por tanto, los deportistas federados representan 10,7% de su población, uno de los porcentajes más altos, sólo por debajo de Cantabria, Aragón, Navarra y País Vasco.

 

La tasa de practicantes federados se corresponde con la del gasto, ya que los riojanos invierten una media de 115,8 euros anuales en equipamiento deportivo, por encima de comunidades autónomas como los de Galicia y Andalucía, entre otros. El desembolso medio también guarda relación directa con el PIB per cápita de La Rioja, por encima de la media nacional, así como con la tasa de paro, que se sitúa en un 9,6%, una de las más bajas en España. 

 

 

 

 

Aunque modalidades como la pelota vasca se cuelan entre los diez deportes más practicados, el fútbol es el deporte rey, al igual que en el resto del país. El balompié seduce a 7.706 practicantes, aunque está a la cola en el panorama nacional. No obstante, representa al 23% del total de fichas en la región, seguido de la caza, con 6.048 licencias.

 

La ausencia de clubes que ayuden a desarrollar estructuras de cantera y catalicen el salto entre el deporte base y la tecnificación ha provocado que equipos como el Osasuna y la Real Sociedad suscriban acuerdos con las entidades riojanas para captar futbolistas en desarrollo. Los jóvenes talentos emigran sin haber cumplido la mayoría de edad, dificultando el arraigo de los referentes y que el deporte de élite crezca en La Rioja.

 

Lo mismo sucede en baloncesto, que es el segundo deporte con mayor número de federados, con 4.310 fichas. Para fomentar el deporte en edad escolar La Rioja se ha sumado al torneo infantil JrNBA-FEB, aunque el principal referente es el Campus Promete, que este año disputa la Liga Femenina 2, aunque ya logrado retornar a la Liga Dia.

 

 

 

 

Sin embargo, al igual que los clubes de fútbol, apenas tiene capacidad tractora como motor en la comunidad ni dispone de grandes recursos económicos, por lo que el Ayuntamiento de Logroño ha lanzado un plan para financiar entre el 30% y el 40% del presupuesto de los equipos locales. La falta de un ecosistema que garantice su supervivencia y competitividad obliga a que las administraciones públicas asuman un rol más importante en la promoción del ecosistema competitivo. Aparte del Campus Promete, se beneficiarán otros como el EDF de fútbol, el Voleibol de Logroño y el Sporting La Rioja de balonmano.

 

Cuca Gamarra, alcaldesa de Logroño hasta la semana pasada, aseguró que “se financiará por igual a los equipos masculinos y femeninos en base a criterios objetivos”. Este aumento del presupuesto para los clubes viene de la mano del plan Logroño Deporte 2018, contó con una dotación de 10,5 millones de euros, un 4,2% más que el año anterior. El consistorio invertirá 1,2 millones de euros que se destinarán a los equipos locales, mientras que el mantenimiento de pabellones y centros deportivos se llevará 3,4 millones de euros.

 

A la acción de la corporación municipal hay que sumar la del Gobierno riojano, que este año destinará 6,7 millones de euros al fomento del deporte, una cantidad similar a la de 2018. Esta partida es equivalente a la que invierte la Administración en las carteras de turismo y transporte, aunque el objetivo es que se desarrollen sinergias entre estos sectores para “fomentar el desarrollo empresarial y comercial en la región”, según se destaca en el informe de los Presupuestos Generales de 2019.

 

 

 

 

De hecho, el Gobierno ha diseñado un Plan de Turismo de Reuniones y Deportivo que se extenderá entre 2018 y 2022, en el que se prevé atraer un total de 117 actividades turísticas y 90.000 participantes. Se estima que este tipo de eventos, enfocados fundamentalmente a las empresas, dejará en la región 60 millones de euros. “Tenemos una muy buena red de instalaciones con la que fomentar este tipo de actividad turística”, afirma José Ignacio Castresana, director del plan estratégico.

 

La vinculación del turismo de congresos y el deporte es otro de los nichos donde La Rioja ha intentado asomar la cabeza en el panorama español, pero no el único. En los últimos años también ha priorizado atraer al practicante de actividades como la caza y la pesca, donde otras regiones apenas compiten y permiten dinamizar la economía del entorno rural. Por otro lado, la prioridad ha sido captar competiciones nacionales para posicionarse como destino.

 

Aun a sabiendas de que no cuentan con las mismas oportunidades ni el mismo atractivo que otras ciudades españolas, durante los últimos cuatro años han albergado una media de setenta eventos deportivos anuales. De estos, sólo el Mundial sub 20 de hockey hielo tuvo repercusión internacional, aunque también destacan La Vuelta, la Supercopa Asobal de balonmano y los campeonatos de España de patinaje artístico y ballet sobre hielo.

 

 

 

 

Además, anualmente se celebran otras pruebas outdoor, como el Medio Maratón Adidas y la Bike Race, que en los últimos cuatro años dejaron una media de 139.000 euros anuales cada uno. Pero si hay un evento que caracteriza a La Rioja es la Eroica. La cicloturista de bicicletas clásicas congregó a más de 850 participantes en Cenicero durante la última edición y cuenta con sus propios patrocinadores internacionales, como Bianchi, Brooks, Santini, Continental y Campagnolo, entre otros.

 

Este tipo de eventos deportivos son cruciales para diversificar la actividad deportiva en una región que pivota sobre la influencia de Logroño. Desde el Ayuntamiento de la ciudad se han marcado el reto de “ser la sede de más eventos deportivos en los próximos años, ya que promocionan el nombre de la región a través del deporte y fomenta la actividad física entre nuestros habitantes”, explica Javier Merino, concejal de Alcaldía, Deportes y Jóvenes.

 

De hecho, para 2019 la ciudad ya se ha asegurado su presencia dentro del World Padel Tour (WPT), un evento que reforzará la visibilidad internacional y que incentivará una mayor inversión en infraestructuras deportivas en el futuro.

 

El objetivo de La Rioja, que dispone de recursos más limitados que otras comunidades autónomas, es entrelazar las diferentes industrias para que puedan crecer en conjunto. Y a falta grandes nombres o clubes que ejerzan de referentes, más allá del Logroño La Rioja en la Asobal, la estrategia es importar eventos de primera línea y reforzar la inversión pública para hacer crecer a su base de practicantes paulatinamente.