Entorno

La Rfef gastó 36,5 millones en camisetas de árbitros que no usó por comisiones

La investigación de la Audiencia Nacional revela que se adjudicó a dedo un contrato para el periodo de 2009 a 2016 a una empresa vinculada al exvicepresidente Juan Padrón.

Palco23

21 jul 2017 - 17:43

El uso de la Real Federación Española de Fútbol (Rfef) en beneficio de unos pocos no sólo atañe a los derechos audiovisuales y la organización de partidos amistosos. La investigación ordenada por el juez Santiago Pedraz también ha revelado que el ente adjudicó a dedo un contrato de 36,5 millones de euros para el suministro de camisetas de árbitros que jamás llegaron a utilizarse. A cambio, se habrían pagado comisiones.

 

Se trata de la concesión a la empresa Estudio 2000, presuntamente vinculada a un amigo del exvicepresidente económico Juan Padrón, quien a cambio habría recibido comisiones “arropado”, según el juez, por el propio Villar. Siempre según la investigación, Padrón y el aún presidente, Ángel María Villar, desviaron parte de los fondos a cuentas personales a través de una compleja estructura societaria. Además, con el agravante de que no se ha probado que la elección de esta compañía se hiciera “respetando principios de competitividad”.

 

El suministro de estas camisetas de mala calidad, que debían usarse también en las federaciones territoriales, se produjo entre 2006 y 2016 a través de la empresa propiedad de Vicente Bernad Vico. La empresa, que desde 2013 "subsiste exclusivamente gracias a la Rfef" según el auto, obtenía el 99% de su facturación gracias al organismo regulador del fútbol en España.

 

El sumario de la operación Soule va mucho más allá, y en un estudio comparativo concluye que la Federación se habría ahorrado cinco millones de euros si hubiera comprado directamente las prendas técnicas a la empresa que se las suministraba a Estudio 2000. Además, añade, “trabajan con retraso y se le adelanta un elevado porcentaje del pago anual total antes de que entreguen las prendas deportivas de la marca Pony, cuyo precio está sobrevalorado”.

 

En cuanto a las comisiones, se ha descubierto que se cobraban a través de Tenerife Sport, empresa de Padrón que percibió casi 700.000 euros entre 2009 y 2011. Los investigadores también detectaron un ingreso de casi un millón de euros a a esta mercantil por cuenta de los hermanos Bernad Vico, que se usó para cancelar un préstamo hipotecario de 1,2 millones de euros de Padrón.

 

El juez refuerza su tesis de que Tenerife Sport era un mero instrumento para cobrar comisiones con el hecho de que “resulta difícil determinar el emplazamiento de su única sucursal, ya que no tiene rótulo comercial ni escaparate, así como tampoco símbolos o distintivos que la identifiquen y faciliten el flujo de clientes”. Es más, Gorka Villar, hijo del presidente de la Rfef, trata este tema en una conversación telefónica que fue intervenida en la que habla con el presidente de la Federación Cántabra de Fútbol, José Ángel Peláez.

 

"La apariencia externa del local es de inexistencia de actividad comercial, y la interior de aspecto espartano, con multitud de cajas apiladas y sin elementos decorativos u otros que animen a la compra o atracción de clientes", afirma el auto, cuando es una empresa dedicada en teoría a "otro comercio al por menor en establecimientos no especializados".

 

Gorka responde que le parece "una vergüenza" y Peláez añade: "La verdad que el que tenga el contrato este... tiene un chollo de putísima madre... tiene garantizado unas ventas de 4 millones y medio de euros... haga lo que haga al precio...al precio que pone, porque los precios, tema de huevos". "Sí, correcto... sí, no... no... no, es una vergüenza lo del contrato ese... ese contrato hay que cargárselo ya... o sea, ya, ya", concluye el hijo de Villar.