La Generalitat fusionará el CAR Sant Cugat con el CTD Blume

Las estrecheces presupuestarias de la Generalitat de Catalunya han obligado al secretario general de Deportes, Ivan Tibau, a plantear la fusión del Centro de Alto Rendimiento (CAR) de Sant Cugat con el Centro de Tecnificación Deportiva (CTD) Joaquín Blume, ubicado en Esplugues de Llobregat. "Se produciría una optimización de recursos, dada la coincidencia en las instalaciones y los servicios ofrecidos", indica el alto cargo del Ejecutivo de Artur Mas en una respuesta parlamentaria. Además, podrían obtenerse varios millones de euros por la venta de los terrenos de Esplugues.

El objetivo de la Generalitat sería concentrar en Sant Cugat los dos centros, puesto que las instalaciones del CAR sí que se han ido modernizando durante los últimos años y las del CTD Blume estarían probablemente algo más anticuadas. Con esta operación, cuya afectación a nivel de personal se desconoce, permitiría al CAR de Sant Cugat "potenciar su imagen de centro, integrando en su itinerario deportivo la fase de tecnificación". Es decir, que en las mismas instalaciones se tutorizaría a los jóvenes en su carrera para alcanzar el máximo nivel deportivo (misión del CTD de Esplugues) y se les ayudaría a mantenerse en la élite (objetivo en el que ya trabaja el CAR).

Uno de los asuntos más complejos que deberá resolver este traslado es qué sucederá con el Instituto de Estudios Secundarios (IES) Joaquín Blume, en el que hay 180 alumnos matriculados. El Consell Català de l'Esport, ente que cuelga de la Generalitat, ya ha mantenido reuniones con la dirección del centro, la asociación de padres y madres de los alumnos y el Ayuntamiento de Esplugues para estudiar las soluciones menos traumáticas.

El presupuesto del CAR de Sant Cugat para 2014 ascendía a 10,9 millones de euros, de los cuales 4,7 millones son aportados por el Ejecutivo autonómico y otros 1,7 millones por parte del Gobierno; el resto de ingresos procede de la prestación de servicios. El centro, que cerró 2013 con un déficit ligeramente superior al millón de euros, tiene una deuda con entidades de crédito que asciende a ocho millones de euros, principalmente por las mejoras en infraestructuras realizadas en los últimos años.

El CTE Blume, en cambio, no tienen ningún tipo de deuda, según afirma Tibau en su respuesta parlamentario. En esas instalaciones, con más de cincuenta años de vida, también se encuentran algunas de las dependencias del Consell Català de l'Esport que deberían reubicarse en alguno de los edificios de la Generalitat para poder vaciar las oficinas de Esplugues. Posteriormente, el Ejecutivo autonómico podría desprenderse de los terrenos para lograr liquidez.