La Fifa relaja la norma sobre traspasos de menores para los refugiados

La Fifa ha decidido suavizar su estricta legislación en materia de traspasos de menores. El gobierno mundial del fútbol ha decidido introducir nuevas excepciones a la prohibición de que un jugador de menos de 18 años cambie de país para jugar a fútbol, esencialmente adaptándose al nuevo contexto, en el que son miles los refugiados que han dejado sus respectivos países huyendo de la guerra.

A partir de ahora, según el documento hecho públcio por la asociación, el Reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores introducirá la posibilidad de que "jugadores que se trasladan por razones humanitarias". Eso sí, los clubs deberán aportar la documentación que acredite que la persona y, si es el caso también sus padres, acrediten que tiene la condición de refugiado. 

La Fifa indica que concederá esta opción a aquellos que hayan dejado su país y no tengan opción de volver "porque su vida o su libertad podría estar amenazada por razones raciales, religiosas, nacionales o de pertenencia a un determinado grupo social o de opinión política".

Las nuevas excepciones también resuelven casos dramáticos en los que se le prohibía a un menor de otra nacionalidad distinta a la del país en la que reside el poder jugar. Incluso se habían puesto en duda casos de inmigrantes que querían jugar en un equipo de fútbol en el país al que habían llegado. Para ello, valdrá con acreditar que es su primera ficha federativa y que ha vivido al menos los últimos cinco años en el país donde está el club.

Los clubs ya no deberán aportar contratos de trabajo de los padres del menor si existen otras razones justificadas para el cambio de país

Ahora, la Fifa aceptará que el jugador fiche por un club de otro país si se muda junto a sus padres o uno de ellos sin necesidad de que la razón del cambio de país se deba a un cambio de trabajo. La actualización de la norma también resuelve algunos vacíos legales que habían estado afectando a la carrera de menores de edad mientras la Fifa resolvía, como son los casos de niños que sólo viven con uno de sus padres o con un tutor legal, ya que anteriormente se solicitaba la documentación de los dos padres biológicos.

El organismo advierte que los cambios introducidos no pretenden ser una puerta abierta a cuestiones que sigue considerando inaceptables, como que una familia entera se mude a otro país para que un menor pueda fichar por un gran club. 

Antes de esta reforma, la Fifa tan sólo contempla tres excepciones a la hora de fichajes internacionales de menores de edad: si los padres cambian de país por motivos no relaciones con el fútbol; si el traspaso hace referencia a un jugador de entre 16 años y 18 años y se realiza entre dos clubes de la UE, o si el jugador menor de edad vive a 50 kilómetros de la frontera del país vecino y el club al que se incorpora no está más allá de otros 50 kilómetros de la frontera.

Según la investigación, muchos de los menores fichados no cumplían estos requisitos, de manera que habrían incumplido los artículos 19 y 19bis del Reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores. Además, también habrían incumplido los artículos 5 y 9, así como los anexos 1 y 2 del citado reglamento, en los que se obliga a los clubes a notificar todas las incorporaciones de futbolistas de menos de 18 años.