Entorno

Hacienda, el ‘central’ que más ha marcado a los futbolistas en los últimos años

La reapertura del caso de Xabi Alonso por la Audiencia de Madrid es el último episodio de una serie por la que también han pasado Messi, Cristiano Ronaldo, Mascherano, Modric o Marcelo, con los derechos de imagen y la tributación internacional en el foco.

M.M.A.

16 ene 2018 - 04:56

La Audiencia Provincial de Madrid acordó ayer reabrir la investigación sobre Xabi Alonso y su presunta simulación de los ingresos por derechos de imagen. La Agencia Tributaria sostiene que el jugador tolosarra cobró cinco millones de euros por este concepto sin tributar, utilizando una estructura societaria similar a la que recurrieron otros futbolistas que en los últimos meses también han sido sancionados con importantes multas. En total, la cuenta ya suma 70 millones de euros a favor del erario público, pendiente de la resolución del caso de Cristiano Ronaldo.

 

El ex del Real Madrid y el Bayern de Múnich se sirvió de una sociedad en Madeira, como también lo hizo su excompañero en el Liverpool FC Javier Mascherano. El defensa argentino, que negocia su salida del FC Barcelona, ya fue condenado en enero de 2016 a pagar 1,5 millones al Fisco por rentas no declaradas y una multa adicional de 815.000 euros por utilizar sociedades en esta isla de Portugal y en Miami para cobrar de Nike y una parte de su salario como blaugrana.

 

Ambos casos tienen su origen en la ya conocida norma 85/15, por la que los futbolistas tienen derecho a cobrar el 15% de su salario en concepto de derechos de imagen a través de una empresa que tengan para esa finalidad. Sin embargo, el problema es que muchos optaron por utilizar sociedades radicadas en países con una menor tributación e incluso paraísos fiscales. Otros, en cambio, han sido condenados por una nueva interpretación de Hacienda, que considera que esa cesión de derechos de imagen no puede ser gratuita y debe hacerse a precios de mercado, lo que en la práctica elimina todo beneficio fiscal a la fórmula aprobada en 1996.

 

 

 

 

El de Xabi Alonso no es el único caso que ha reaparecido en las noticias en 2018, ya que en la segunda semana del año también se dio a conocer el acuerdo de Luka Modric con la Abogacía del Estado para pagar un millón de euros a cambio de evitar una pena de prisión por fraude fiscal. En su caso, y a falta de que se conozca el importe de la multa, la acusación se centra en la no declaración de todas sus rentas mediante el uso de una mercantil en Luxemburgo.

 

Al mismo tiempo, el también madridista Marcelo optó por la misma vía que el croata de aceptar la liquidación que le remitió la Agencia Tributaria y cerrar de conformidad el acuerdo planteado por la Abogacía del Estado. En esta ocasión fueron cerca de 500.000 euros, entre cuota defraudada e intereses.

 

Pero si el año pasado estuvo marcado por un caso es el de Football Leaks, una filtración masiva de documentos que permitió a la Agencia Tributaria descubrir que diversos futbolistas que habían pasado por LaLiga también eludieron impuestos. Falcao, ex del Atlético de Madrid, pagó 8,23 millones por ocultar rentas en Islas Vírgenes y Colombia; Di María, ex del Madrid y vinculado a empresas de Panamá, abonó 2 millones; Ricardo Carvalho, que vistió de blanco también, pagó 689.000 euros, mientras que su compatriota Fabio Coentrao pagó 1,3 millones.

 

Muchos de ellos son jugadores representados por Jorge Mendes, y en lo alto aparecieron dos nombres claves en su carrera como agente: el técnico Jose Mourinho, al que se le acusa de defraudar 3,3 millones de euros, y Cristiano Ronaldo, al que se le acusa de cuatro delitos fiscales por 14,7 millones de euros en total. Ambos casos están pendientes de resolución judicial, después de que, al menos por ahora, los dos acusados hayan decidido no firmar un acuerdo de conformidad.

 

 

 

 

El delantero portugués ha optado por no seguir la estrategia de sus compañeros de profesión y pactar, para seguir litigando y probar su inocencia. En su caso, la Fiscalía considera que CR7 eludió sus obligaciones al mantener su estructura fiscal (que incluía sociedades en paraísos fiscales) cuando en 2009 abandonó Reino Unido para fichar por el Real Madrid. En 2014, los abogados extranjeros del jugador propusieron y ejecutaron una regularización fiscal para evitar problemas.

 

Para justificar su inocencia, la defensa comparó su proceder con el de Leo Messi, para argumentar que mientras que el argentino era residente en España y no podía aplicarse el régimen de trabajadores desplazados a España del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), él sí. El delantero del FC Barcelona ya fue sentenciado por el Tribunal Supremo a 21 meses de prisión (no tuvieron que entrar en la cárcel por falta de antecedentes) y una multa de 2,09 millones por defraudar 4,1 millones entre 2007 y 2009; previamente, y como muestra de buena voluntad, presento declaraciones complementarias por los ejercicios posteriores por una suma superior a los 50 millones.

 

Ahora bien, lejos de haber quedado en caso cerrado, Hacienda ha vuelto a poner el foco sobre el delantero argentino y los cobros que su fundación recibió del Barça. La Agencia Tributaria quiere saber si las donaciones que anualmente se realizan a su organización benéfica, y que tienen una deducción del 35%, forman parte de su salario o no. La duda surge a raíz de que hay pagos extra por el rendimiento del jugador y se estableció que dejarían de existir si el argentino deja la disciplina blaugrana.

 

El club presidido por Josep Maria Bartomeu le recomendó hacer declaraciones complementarias y le avanzó 12 millones de euros de su futuro contrato para pagar la diferencia que estimaban que se le reclamaría. La renovación no llegó hasta finales de 2017, por la que, según documentos de Football Leaks, Messi cobrará 50 millones de euros netos por temporada hasta 2021.

 

Ante esta circunstancia, algunos jugadores como David Villa o Xavi Hernández también han decidido defender su inocencia, al tiempo que han optado por marcharse temporalmente a jugar al extranjero. Es uno de los riesgos existentes, y de los que más temen los ejecutivos del sector. “En Inglaterra los futbolistas cobran mucho más y pagan menos impuestos. Y a esto se opone un pequeño grupo de equipos europeos que todavía aguantan como el Real Madrid, pero esto es como una pecera donde falta oxígeno”, advirtió hace unos meses José Ángel Sánchez, director general del club blanco.